El riesgo de una cuarta ola se eleva: aumenta la movilidad y se extiende la variante B.1.1.7
Los datos de telefon¨ªa dicen que nos movemos m¨¢s, mientras aumentan los casos con las mutaciones m¨¢s transmisibles. En la 'newsletter' de Kiko Llaneras
Buenos d¨ªas. Tras la dosis de optimismo de la semana pasada, hoy escribo con datos para seguir en guardia.
- ?Nos ayudas? Reenv¨ªa esta ¡®newsletter¡¯ a amigos y contactos, o diles que pueden apuntarse aqu¨ª para recibirla ?
Hace un mes que la movilidad aumenta en Espa?a. As¨ª lo muestran los datos de 12 millones de tel¨¦fonos m¨®viles, que la empresa KIDO Dynamics usa para calcular un radio de movilidad que mide cu¨¢nto nos alejamos de casa. En enero la media cay¨® al 55% o 60% de lo normal antes de la pandemia, pero desde febrero ha vuelto a subir. Ahora supera el 70% y nuestra actividad se acerca a la de diciembre, cu¨¢ndo se elev¨® la tercera ola.
Este aumento de desplazamientos se observa tambi¨¦n en datos de Apple y Google. Y sabemos que esos aumentos de movilidad suelen significar m¨¢s contactos y una mayor probabilidad de contagios.
?Pero son niveles de riesgo? Alberto Hernando de Castro, de KIDO dynamics, cree que s¨ª. Han observado que existe un nivel cr¨ªtico alrededor del 70% de radio de movilidad: las hospitalizaciones y las muertes tienden a aumentar dos o tres semanas despu¨¦s de superarse ese umbral. Y al rev¨¦s, el virus retrocede, normalmente, cuando la movilidad baja del 70%.
El siguiente gr¨¢fico compara la evoluci¨®n del radio de movilidad con las defunciones por covid (desplazadas tres semanas para que coincidan los ejes). Se ve muy claro el efecto del primer confinamiento, que llev¨® las defunciones hasta casi cero. Despu¨¦s vino una segunda ola que se levant¨® despacio en verano, cuando la movilidad estuvo en niveles casi normales. Pero el momento m¨¢s interesante es la tercera ola: los movimientos empezaron a subir a finales de noviembre y pasaron del 70% la primera semana de diciembre ¡ªantes de Navidad¡ª, lo que coincide con un pico de defunciones tres semanas despu¨¦s.
Ahora la movilidad aumenta en casi todas las comunidades. En los gr¨¢ficos siguientes se pueden ver cuatro ejemplos, Madrid, Catalu?a, Castilla y Le¨®n y Murcia.
?Qu¨¦ podemos concluir de estos datos? Dicen dos cosas con bastante claridad: que la movilidad aumenta ¡ªestamos haciendo m¨¢s desplazamientos o yendo m¨¢s lejos¡ª, y que se acerca a niveles que en el pasado coincidieron con una expansi¨®n del virus.
No obstante, ese umbral del 70% no es una ley matem¨¢tica. Aunque habr¨¢ un nivel de contactos que har¨¢ crecer los contagios exponencialmente, (1) no sabemos con precisi¨®n cu¨¢l ser¨¢, (2) no es determinista ¡ªdepende del azar¡ª, y (3) habr¨¢ ido cambiando. Ese umbral se habr¨¢ elevado cuando aprendimos a protegernos mejor, llevando mascarilla o eligiendo terrazas, por ejemplo. Tambi¨¦n subir¨¢ si hace buen tiempo o al ir aumentando el n¨²mero de personas inmunes.
Pero no todo son buenas noticias. El avance de la variante B.1.1.7 detectada en Reino Unido, al ser m¨¢s contagiosa, pone presi¨®n en sentido contrario: un nivel de movilidad capaz de frenar al virus en sus formas anteriores, podr¨ªa ser insuficiente ahora.
Esa variante ha sido capaz de penetrar en Espa?a a pesar de las restricciones. Pronto ser¨¢ la dominante. Seg¨²n datos de Sanidad, aunque todav¨ªa son aproximados, hay ocho comunidades donde ya supone la mitad de los casos: Madrid (50%), Andaluc¨ªa (51%), Galicia (53%), Navarra (52%), Asturias (64%), Baleares (65%), Cantabria (76%) y Catalu?a (76%).
En otros pa¨ªses ya hemos visto ¡°dobles epidemias¡±. En enero los casos totales bajaban, pero al mismo tiempo las nuevas variantes iban creciendo con una lenta exponencial. Ahora son las dominantes en Francia y han cambiado la tendencia general con un repunte. Se ve claramente en este gr¨¢fico de Francia, de John Burn-Murdoch. Y en Dinamarca.
?Est¨¢ pasando esto en Espa?a? Es dif¨ªcil saberlo porque los datos de variantes son todav¨ªa algo fragmentarios, pero es posible: ¡°Puede estar ocurriendo, una ola dentro de otra ola. Es una se?al de que si levantamos seg¨²n qu¨¦ medidas, se nos van a disparar los casos y entraremos en la situaci¨®n de Francia¡±, me dice al correo I?aki Comas, bi¨®logo del CSIC dedicado a secuenciar covid desde hace meses. Sabemos que la variante se ha extendido en enero. En Madrid, los casos de B.1.1.7 crecieron en n¨²mero absoluto, aunque ahora parecen planos. La duda es si la variante sigue expandi¨¦ndose. En Asturias ha pasado del 36% al 64% en la semana del 22 al 28 de febrero, cuando la incidencia baj¨® solo un 16%, lo que implicar¨ªa un aumento de casos.
De momento no se ven repuntes de casos o ingresos, pero s¨ª una ralentizaci¨®n de sus bajadas. Es lo que se ve, de momento, en los datos del ministerio. En el gr¨¢fico siguiente, de escala logar¨ªtmica, hay lugares donde la bajada ya no es una recta, sino que se frena, como pasa en Arag¨®n, Asturias o Castilla y Le¨®n. Esto significa que el n¨²mero reproductivo (R) crece, aunque siga siendo inferior a uno, porque aumenta el contacto entre personas o gana peso la variante m¨¢s transmisible.
No son los ¨²nicos motivos de preocupaci¨®n:
- En Asturias, que ofrece datos muy profundos, se observan repuntes de casos en algunas ¨¢reas sanitarias.
- En los datos de la Comunidad de Madrid tambi¨¦n los ingresos se han estancado: ya no bajan, como mostraba en Twitter Sa¨²l Ares, del Centro Nacional de Biotecnolog¨ªa.
- Otra se?al en Madrid es el an¨¢lisis de aguas residuales, que lleva una semana detectando un aumento del virus. Hay varias zonas en "ascenso fuerte", como Vallecas, Vic¨¢lvaro o Boadilla.
- Las predicciones del proyecto precov2, que lidera Jos¨¦ L. Aznarte, del Departamento de Inteligencia Artificial de la UNED, dicen que son posibles repuntes en Lleida, Ourense, Asturias y otra docena de provincias.
En resumen, estos datos no demuestran que est¨¦ levant¨¢ndose una cuarta ola, ni que vaya a haber repuntes ya necesariamente. Pero es un hecho que la movilidad est¨¢ aumentando y que la variante B.1.1.7 ha penetrado en Espa?a, lo que aumenta el riesgo. Esta semana he hablado con media docena de expertos, entre acad¨¦micos y t¨¦cnicos, y todos piensan que el repunte es una posibilidad cierta contra la que debemos seguir muy alerta.
2. ?? El ritmo de las vacunas
En las ¨²ltimas dos semanas el ritmo de la vacunaci¨®n ha aumentado, de poner dosis al 1% de la gente cada semana, hemos pasado al 1,6% en los ¨²ltimos d¨ªas y la tendencia parece ser creciente. Se puede ver en los datos de Our World in Data.
El ritmo tiene que seguir aumentando, sin embargo, si queremos vacunar al 70% de los adultos antes de que acabe el verano. El domingo pasado hicimos los c¨¢lculos y es necesario que se administren dosis al 4% de la poblaci¨®n cada semana.
3. ?? Un emoji aleatorio
Al s¨ªmbolo de la jeringuilla se le va a quitar la sangre: se usaba para ¡°donar¡±, pero no es ideal para representar vacunas. ?Estamos ante un caso de semi¨®tica de servicio p¨²blico?
- Hay otros precedentes de cambios. La paella con ingredientes inusitados de Apple, que se corrigi¨® en 2017 ?; la hamburguesa con el queso debajo del todo, que cambi¨® el consejero delegado de Google en 2018 ?; o la pistola real ?, que pas¨® a ser de juguete.
- Hay tambi¨¦n un debate: estos s¨ªmbolos los cambian empresas, que con su decisi¨®n alteran el debate p¨²blico, aunque sea poco.
?Nos ayudas? Reenv¨ªa esta newsletter a tus contactos o diles que se apunten aqu¨ª. Puedes escribirme con pistas o comentarios a mi correo: kllaneras@elpais.es ?.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.