Tres aplicaciones que te har¨¢n todav¨ªa m¨¢s dependiente del m¨®vil

El objetivo primario de la tecnolog¨ªa ha sido siempre el mismo: hacernos la vida m¨¢s sencilla. Desde mucho antes de la aparici¨®n de la rueda, el ser humano se ha enfocado en la t¨¦cnica para habilitar mecanismos que reduzcan el esfuerzo necesario para realizar una tarea y para desarrollar herramientas que pongan a nuestro alcance facilidades que no eran posibles hasta el momento.

Si bien el concepto de experiencia de usuario suena relativamente moderno, la accesibilidad de cada nuevo invento ¡ª?hasta qu¨¦ punto puede usarlo todo el mundo?¡ª ha determinado su ¨¦xito o fracaso, su extensi¨®n en la sociedad como elemento modernizador o su ca¨ªda en el olvido. La aparici¨®n del smartphone supuso un hito en la expansi¨®n de una tecnolog¨ªa al alcance de todos. Cualquier nuevo software puede ser f¨¢cilmente distribuido por los cerca de 5.000 millones de terminales que se utilizan en el mundo y los desarrolladores se esfuerzan por que sus programas sean tan sencillos e intuitivos que cualquiera pueda entenderlos.

El problema de esta abrumadora expansi¨®n tecnol¨®gica es que, en su ansia por ser inclusiva, corre el riesgo de apartar del camino a quienes, por el motivo que sea, no disponen de un tel¨¦fono inteligente y, en ocasiones, ayuda a extender la dependencia al m¨®vil hasta unos extremos que rozan el absurdo. EL PA?S RETINA reflexiona sobre algunos casos de uso que est¨¢n consolidando la barrera que nos dificulta la interacci¨®n con el mundo real si salimos de casa sin nuestro terminal.

• El tel¨¦fono hasta en el ba?o

Una de las ¨²ltimas ocurrencias de Silicon Valley se llama Good2Go y es una startup que quiere asegurarse de que llevas el m¨®vil encima cuando tienes que ir al ba?o. Se dedican a instalar lavabos modernos en bares y cafeter¨ªas ¡ªgrifos manos libres que se activan con sensores de movimiento, puertas que se abren y cierran autom¨¢ticamente...¡ª a los que puedes acceder con una aplicaci¨®n m¨®vil.

Vas andando por la calle y, de repente, surge la necesidad. Abres la aplicaci¨®n y ves cu¨¢l es el cuarto de ba?o Good2Go m¨¢s cercano. Incluso pides tu turno antes de llegar al establecimiento para ganar tiempo. No vamos a negar que esta soluci¨®n sea pr¨¢ctica en alg¨²n sentido, pero la existencia de un portero virtual que no nos permite orinar sin nuestro tel¨¦fono m¨®vil se parece a esa l¨ªnea que pens¨¢bamos que nunca llegar¨ªamos a cruzar.

Aunque esta aplicaci¨®n no sea absolutamente excluyente ¡ªpuedes llevar encima un c¨®digo QR impreso para escanear en la puerta y siempre puedes hablar con el empleado m¨¢s cercano para que te abra la puerta del ba?o, solo faltar¨ªa¡ª sorprende la posibilidad de expansi¨®n de una tendencia que lleva a terreno del m¨®vil la posibilidad de cubrir necesidades tan b¨¢sicas. Good2Go opera en nueve establecimientos de San Francisco y planea triplicar su alcance en breve.

• Al estadio, con bater¨ªa

La tendencia de avanzar hacia el mobile-only no es exclusiva de Silicon Valley. Desde el mes pasado, el equipo de los Miami Heat de la NBA no permite a los aficionados acceder al AmericanAirlines Arena a ver jugar a su equipo si no llevan la entrada en el tel¨¦fono. ¡°La emisi¨®n de entradas m¨®viles garantiza su autenticidad, simplifica el acceso y facilita las transacciones¡±, explicaba Matthew Jafarian, vicepresidente de innovaci¨®n digital del equipo.

La convivencia entre la entrada en papel y m¨®vil presente en el resto de estadios de la liga de baloncesto m¨¢s seguida del mundo marca la pauta de una realidad que trasciende a este deporte. Sin embargo, hay otros en los que la imposici¨®n del pago m¨®vil est¨¢ m¨¢s extendida. Es el caso del b¨¦isbol, donde los New York Yankees no son el ¨²nico equipo que ha implementado este sistema hace m¨¢s de un a?o.

Si esta iniciativa gana adeptos, no resulta dif¨ªcil pensar en una expansi¨®n del modelo que discrimine a aquellos que no lleven el m¨®vil consigo cuando quieran ver una pel¨ªcula en el cine, asistir a una obra de teatro o presenciar un concierto de su grupo favorito.

• Cuando el m¨®vil es la llave de tu coche

Las plataformas de carsharing han entrado con fuerza en las ciudades revolucionando el concepto de movilidad urbana y cuestionando la idea de que si el veh¨ªculo no es tuyo, lo conduce otro. Esta alternativa, que prolifera a partir del ¨¦xito de j¨®venes empresas como Car2Go y Emov, no solo destaca por la comodidad de su uso ¡ªpuedes gestionar el uso y pago del veh¨ªculo que necesitas a trav¨¦s de una aplicaci¨®n¡ª; tambi¨¦n acerca la posibilidad de desplazarse en coche o moto a personas que no quieren o pueden permit¨ªrselo en propiedad.

Ser¨ªa absurdo pensar que esta tendencia vaya a terminar con otras opciones de desplazamiento, pero es importante percatarse de que ya existen medios de transporte en los que el m¨®vil es igual de importante que el volante. Bluemove y Respiro, dos plataformas de carsharing que operan en Madrid, permiten desde 2016 la apertura de sus veh¨ªculos con la tarjeta de transporte p¨²blico de la Comunidad, pero las m¨¢s utilizadas siguen sin permitir una forma de acceso alternativa al m¨®vil.