?rase una vez el timo (4.0)
Repasamos las amenazas m¨¢s pintorescas que ha detectado la Oficina de Atenci¨®n al Internauta en la ¨²ltima d¨¦cada
Si te est¨¢s planteando una carrera en la cibercriminalidad, aseg¨²rate de ser un maestro del disfraz. Camufla tu software malicioso. Haz que ese virus se esconda en una factura. Cuela malware en una foto. Roba datos fingiendo que eres Hacienda. El truco es viejo, pero sigue surtiendo efecto, asegura Ruth Garc¨ªa, experta en ciberseguridad de la Oficina de Seguridad del Internauta (OSI) del Incibe: "Si no funcionase, estos contenidos no seguir¨ªan en circulaci¨®n".
Despu¨¦s de diez a?os recopilando amenazas, el sistema de avisos de seguridad de la OSI se ha convertido en un carnaval de atracadores cibern¨¦ticos disfrazados de supermercados, marcas de moda, instituciones oficiales, bancos, empresas tecnol¨®gicas, compa?¨ªas el¨¦ctricas, videojuegos y, sin excepci¨®n, cualquier entidad que contribuya al ¨¦xito del timo. Basta un repaso a las m¨¢s pintorescas para comprobar que no hemos cambiado tanto.
Fuente: OSI
A todos nos hace ilusi¨®n recibir paquetes cuando no hemos comprado nada, pero hay que ser un poco cauto
Y a viejos males, viejos remedios: "Mas vale prevenir que curar. Es un dicho de toda la vida, pero en este caso es cierto", insiste Garc¨ªa. Por eso en la OSI intentan seleccionar sus avisos pensando en el p¨²blico general y en aquellas amenazas que sean susceptibles de afectar a un gran n¨²mero de usuarios. "Fraudes, virus y malware, por desgracia, circulan mucho. Intentamos filtrar para no caer en el error de enviar alertas muy espec¨ªficas que puedan no interesar a los usuarios", explica.
Entre las marcas m¨¢s citadas por la OSI destaca especialmente Apple -el robo de un solo ID y contrase?a dar¨ªa acceso a todos los dispositivos asociados a la cuenta-, pero tambi¨¦n asoman con frecuencia otras instituciones, como la Agencia Tributaria o Correos y Tel¨¦grafos. "Se ve que a todos nos hace ilusi¨®n recibir paquetes cuando no hemos comprado nada ni esperamos recibir nada. Hay que ser un poco cauto y saber que en un servicio de estas caracter¨ªsticas nunca piden datos privados por correo electr¨®nico ni env¨ªan archivos adjuntos", advierte la experta.
Gu¨ªa definitiva para que no te cuelen un virus
- Desconf¨ªa de las cadenas. Recibir uno de estos mensajes ya deber¨ªa ser motivo de sospecha. Si vienen acompa?ados de enlaces, extrema las precauciones.
- Cuestiona la pertinencia de los formularios. ?Es razonable que te pidan tu m¨®vil? ?Tiene sentido que necesiten los datos de tu tarjeta de credito?
- ?El mensaje est¨¢ a tu nombre? El objetivo del cibercriminal es lograr la m¨¢xima difusi¨®n con el m¨ªnimo esfuerzo, por eso utilizan f¨®rmulas gen¨¦ricas para dirigirse a los destinatarios.
- Verifica la identidad del remitente. En muchos casos el nombre del remitente no se corresponde con la verdadera identidad de la persona que ocupa el cargo especificado en la empresa suplantada.
- Revisa la ortograf¨ªa. Dejadez y traductores autom¨¢ticos convierten estas campa?as en un campo de erratas.
- ?A¨²n te quedan dudas? Consulta con la propia marca o dir¨ªgete a la propia OSI. Otra opci¨®n es contactar con la polic¨ªa o la Guardia Civil.
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