Berto Romero, entre el Mac y la minipimer

Hoy estrena su primera serie de autor, Mira lo que has hecho (Movistar+), una comedia rom¨¢ntica: ¡°Chico conoce chica. Chico y chica conocen beb¨¦¡±. Ya se sabe, un padre primerizo no es el tipo m¨¢s desenvuelto del mundo. De la torpeza existencial ¡ªante los objetos, las personas, las situaciones¡ª nace el humor de este ejercicio de autoficci¨®n ideado por Berto Romero.

Me gustan las m¨¢quinas que se parecen a las personas, que tienen vicios

De los problemas que despierta la paternidad, la tecnolog¨ªa no es, ni mucho menos, el menor. La serie est¨¢ llena de gadgets que vienen a interrumpir la comunicaci¨®n de la pareja: los selfies, los guasap, Skype¡­ ¡°Es raro que una pareja actual no est¨¦ todo el rato mirando el m¨®vil o recibiendo mensajes de chats de los padres. Lo ¨²nico que me da m¨¢s miedo que el Skype con la suegra es la teletransportaci¨®n: que aparezca tu familia pol¨ªtica en casa. Es la ¨²ltima frontera¡±.

El Berto personaje y el Berto real intentan aplicar como pueden una visi¨®n humanista de su relaci¨®n con lo tecnol¨®gico: ¡°Me gustan las m¨¢quinas que se parecen a las personas, que tienen vicios. Yo fui fabricado en los a?os 70 y siempre llevo relojes de cuerda fabricados en esa d¨¦cada. Tengo uno que se adelanta cinco minutos cada d¨ªa. Por la ma?ana lo pongo tres minutos tarde y as¨ª s¨¦ que acabo el d¨ªa dos minutos despu¨¦s. Hay que entenderlo como a una persona: tiene sus man¨ªas¡±.

Se comprende, entonces, por qu¨¦ los youtubers que aparecen en Mira lo que has hecho le causan tal desaz¨®n: ¡°El youtuber es un miedo de mi personaje pero tambi¨¦n un miedo generacional: no comprendemos qu¨¦ hacen estos chicos. Tienen un punto de ruptura con las generaciones anteriores. Yo puedo dialogar con la tradici¨®n de Faemino y Cansado o Pepe Rubianes. Ellos, ya no¡±. Una circunstancia con la que se muestra comprensivo pues, a?os ha, Romero vivi¨® una experiencia similar con su padre: ¡°Cuando le explicaba lo que era un ordenador, ¨¦l entend¨ªa que era una televisi¨®n m¨¢s una m¨¢quina de escribir. Hay algo m¨¢s en el ordenador que trasciende esa suma. Lo pillaba, pero de otra manera. Y esa es mi sensaci¨®n cuando me acerco a la modernidad de esta nueva generaci¨®n¡±.

De hecho, en busca de refugio, afirma estar volviendo a un mundo predigital: ¡°He vuelto a sentir la necesidad de tocar las cosas. Estoy involucionando hacia el papel. Cuando escribo, tengo que imprimir los guiones. Necesito tacharlos. Tambi¨¦n tengo un agenda. Me la hago yo con una libreta y pego cosas de colores encima. Es un jard¨ªn zen para calmar los nervios. ?Estoy volviendo a preescolar!¡±.

• Un sibarita de las batidoras

A esta pasi¨®n por lo vintage escapa su afici¨®n al coleccionismo¡­ ?de minipimers! ¡°Es una costumbre que me gustar¨ªa no tener. No he calibrado bien la importancia de este electrodom¨¦stico. Cada vez que salgo de viaje con la familia me doy cuenta de que no nos hemos llevado la minipimer y, como nos gusta hacer cremas de verduras por la noche, siempre nos toca comprar una. Total, que tenemos como una decena de diferentes pa¨ªses que nunca utilizamos, porque en casa tenemos, claro est¨¢, ¡®el se?or de los anillos de las minipimers¡¯, y es la que empleamos¡±.

El n¨²mero 3 de la revista se entrega el s¨¢bado 24 de febrero gratis con EL PA?S. M¨¢s adelante, podr¨¢s comprarla por separado en los quioscos. ?No te quedes sin tu ejemplar!