El coleccionismo de sellos vive su propia revoluci¨®n digital

Cargados con ¨¢lbumes, lupa en mano y una edad m¨¢s que respetable a sus espaldas. Una imagen que a cualquiera le viene a la cabeza al escuchar la palabra filat¨¦lico. Pero aquello de que las apariencias enga?an se cumple a la perfecci¨®n. Es el encanto de los trampantojos. A primera vista dan una impresi¨®n que cambia casi por completo al llegar hasta el fondo. El coleccionismo de sellos ha encontrado en las nuevas tecnolog¨ªas el aliado id¨®neo para jugar con todos a las falsas impresiones. La revoluci¨®n digital que vive le permite adaptarse a los cambios fren¨¦ticos de la sociedad del siglo XXI y, al mismo tiempo, acercarse a un p¨²blico m¨¢s joven.

Una carta sin sello resulta inconcebible. El problema para este peque?o elemento rectangular es que la correspondencia f¨ªsica ha bajado exponencialmente con el paso de los a?os. Su mejor salvavidas ha sido transformarse en elemento de colecci¨®n. En Espa?a, por ejemplo, conviven unos 400.000 filat¨¦licos. ¡°Nuestra baza es dar un valor a?adido al sello, que sea diferente. Que le guste a m¨¢s gente que solo a los coleccionistas. Por eso, la tecnolog¨ªa nos ha ayudado a crear algunos completamente innovadores¡±, razona Modesto Fraguas, director de filatelia de Correos. Ya no vale con un dibujo bonito, sino que necesita trascender el propio papel.

La realidad aumentada ha tenido un impacto determinante en las series para coleccionistas. Aparte de llamar la atenci¨®n, los mensajes entre lo real y lo virtual se entremezclan a trav¨¦s de un tel¨¦fono m¨®vil. Como explica Fraguas, el primero que emple¨® esta tecnolog¨ªa en Espa?a fue de un emoticono que inclu¨ªa un c¨®digo QR para descargar la app que permit¨ªa ver m¨¢s sellos dise?ados con la misma t¨¦cnica. ¡°Los contenidos adicionales pueden ser desde tutoriales que cuentan c¨®mo se ha montado un sello en papiroflexia hasta una animaci¨®n que contextualiza la imagen que aparece de El Greco¡±, a?ade.

Nunca antes ocho cent¨ªmetros cuadrados tuvieron tantas posibilidades. Los filat¨¦licos tienen que estar literalmente con todos los sentidos puestos para aumentar su colecci¨®n. Correos elabor¨®, en colaboraci¨®n con el chef Ferran Adri¨¤, una serie de sellos con aroma y sabor a almendra, en recuerdo al ajoblanco, como homenaje a la gastronom¨ªa espa?ola. ¡°Habr¨ªa sido imposible sin las mejoras t¨¦cnicas actuales y sin sistemas de impresi¨®n digital. Est¨¢ claro que aumenta su precio, pero tambi¨¦n que no cuesta lo mismo incorporar unas semillas a un sello¡±, sostiene Fraguas. Est¨¢ claro que lo de los trampantojos se lo han tomado realmente en serio en la filatelia.

Los sellos tambi¨¦n entienden de 3D

En el af¨¢n por conectar con un p¨²blico m¨¢s joven, los sellos en tres dimensiones se han convertido en una especie de reclamo. A veces no ser¨¢ tan f¨¢cil contemplarlos sin m¨¢s. Gafas en ristre, el dinosaurio impreso cobra vida casi al instante como si saliera de Parque Jur¨¢sico. Si optamos por una opci¨®n m¨¢s sencilla, solo con girarlo y modificando el ¨¢ngulo de visi¨®n, Han Solo cambiar¨¢ de acompa?ante en el mismo trozo de papel. ¡°Jugamos con diferentes efectos y la profundidad de campo gracias a que los imprimimos en 3D. Se trata de modernizar el sector e innovar tanto en tem¨¢ticas como en t¨¦cnicas de impresi¨®n¡±, asegura el director de filatelia de Correos.

Pese a ser un mercado m¨¢s que maduro, contin¨²a despertando cierto inter¨¦s. Seg¨²n expone Fraguas, al a?o emiten unos 90 sellos, pero se les acumulan hasta 600 peticiones de instituciones para dejar su impronta filat¨¦lica. Uno de los valores m¨¢s importantes para los coleccionistas es el poso de historia detr¨¢s de su afici¨®n. Recoge la evoluci¨®n de un pa¨ªs. ¡°Es el testimonio de una sociedad en un tiempo determinado. Al principio solo se imprim¨ªan monarcas, pero ahora ya hablamos de Harry Potter, Star Wars o gastronom¨ªa. Lo que hagamos tiene que estar sinton¨ªa con la ¨¦poca que nos toque vivir¡±, concluye.

Correos ha incorporado las nuevas tecnolog¨ªas a un elemento que parece alejado de la disrupci¨®n. Son conscientes de que, sin aplicarlas correctamente, el futuro de la filatelia, pese a los 60 millones de coleccionistas mundiales, puede no ser el deseado aun siendo un negocio consolidado. La innovaci¨®n en los sellos no es precisamente un juego de falsas apariencias. Conviene revisar la percepci¨®n y observarlos como un elemento m¨¢s de la revoluci¨®n digital.