Los astronautas de la Estaci¨®n Espacial Internacional tienen un nuevo amigo: este robot

Los robots en el espacio ya llegaron a nuestras vidas de mano de de Star Wars. En la saga, R2D2, C3PO y, m¨¢s recientemente, BB8, son protagonistas de las aventuras junto a otros habitantes del espacio. Desde hace unas semanas, los astronautas de la Estaci¨®n Espacial Internacional tambi¨¦n tienen a su propio amigo robot: CIMON (las siglas en ingl¨¦s de compa?ero m¨®vil interactivo de la tripulaci¨®n) que ha llegado hasta all¨ª para demostrar que puede existir cooperaci¨®n entre seres humanos y m¨¢quinas inteligentes. Pero parece que le est¨¢ costando trabajo desarrollar su empat¨ªa y su comportamiento se aleja del de un robot servicial: ya ha protagonizado su primer rifirrafe.

Tiene el tama?o aproximado de un bal¨®n medicinal, pesa cinco kilos, puede flotar y moverse de forma aut¨®noma. Su pantalla muestra una cara con la que expresa sus emociones. Percibe su entorno a trav¨¦s de tres c¨¢maras ¡ªuna de ellas dedicada exclusivamente al reconocimiento facial, para identificar mejor las emociones de su interlocutor¡ª, siete micr¨®fonos y un altavoz. Tambi¨¦n est¨¢ dotado de sensores ultras¨®nicos para medir distancias. El objetivo de la Estaci¨®n Espacial Internacional es "comprobar el alcance de las posibilidades de la inteligencia artificial en un ambiente tan complejo como este", explica Matthias Biniok, arquitecto jefe de IBM para Watson, seg¨²n recoge Xataka.

Pero para lo que CIMON realmente ha ido all¨ª es para aprender del comportamiento de los humanos que lo acompa?an. Desarrollado por IBM y basado en Watson, su sistema de inteligencia artificial estrella, es capaz de procesar texto e im¨¢genes y comprender lo que le dicen sus colegas, aunque tiene que seguir aprendiendo a detectar el estado de ¨¢nimo y el humor de los humanos. En los ¨²ltimos d¨ªas, la ESA ha publicado un v¨ªdeo en el que se ve al astronauta Alexander Gerst charlando con CIMON. En un momento de la conversaci¨®n el robot parece molestarse. Sucede justo despu¨¦s de que Gerst le repita en varias ocasiones que apague la m¨²sica.

¡ªS¨¦ amable, por favor ¡ª, pide el robot.

¡ª?Estoy siendo amable!

"Me est¨¢ acusando de no ser amable", se r¨ªe el astronauta. El robot vuelve a la carga unas frases despu¨¦s, cuando le dice a Gerst que no sea cruel. "Est¨¢ diciendo que soy malo", vuelve a comentar entre risas el astronauta. "Creo que CIMON est¨¢ un poco sensible hoy".

• Amigos desde hace meses.

Ambos empezaron a conocerse meses antes de la llegada del robot, que ha sido entrenado para identificar tanto la cara como la voz de Gerst y est¨¢ programado para acudir a su llamada y seguirlo en sus tareas. CIMON ha llegado a la estaci¨®n para ayudarlo en varios experimentos de cristalizaci¨®n y para ser los ojos de un experimento m¨¦dico. Su c¨¢mara servir¨¢ para que el personal en la Tierra pueda ver y controlar sus movimientos. Los investigadores tambi¨¦n quieren medir c¨®mo reacciona el robot cuando tiene que resolver junto a un humano una tarea sencilla para ¨¦l: resolver un cubo de Rubik. CIMON podr¨ªa resolverlo en solo unos segundos, pero lo que buscan sus creadores es evaluar la capacidad del robot de ejercer como compa?ero.