Acerca de lo exponencial y lo ¡®slow¡¯
Vivimos en un mundo donde hay dos palabras con las que llevan tiempo bombarde¨¢ndonos en charlas y art¨ªculos, dos palabras enfrentadas con dos puntos de vista opuestos: lo exponencial y lo slow.
Vivimos en un mundo donde hay dos palabras con las que llevan tiempo bombarde¨¢ndonos en charlas y art¨ªculos, dos palabras enfrentadas con dos puntos de vista opuestos: lo exponencial y lo slow.
Por un lado, lo exponencial busca acelerar el crecimiento a trav¨¦s de la tecnolog¨ªa y por otro lado, lo slow busca la desaceleraci¨®n y tranquilidad como visi¨®n de vida.
Dos filosof¨ªas que se ven enfrentadas principalmente por la velocidad que requieren, parece que si piensas en exponencial desaparece lo slow y sucede igual al contrario. Pero, ?y si tratamos de conectar estas dos visiones? Encontrar el por qu¨¦, el para qu¨¦ y en qu¨¦ momento podemos utilizar cada filosof¨ªa, tal vez si lo hacemos descubramos su sentido.?
Despu¨¦s de darle vueltas y pensar en diferentes enfoques he hecho un ejercicio de simplicidad (proceso que me ayuda enormemente) para intentar llevarlo a una m¨ªnima expresi¨®n, a una regla b¨¢sica que nos ayude en cada momento y de manera sencilla a combinar ambas filosof¨ªas, a saber ver cual tiene m¨¢s peso y sentido en cada momento y situaci¨®n.?
Si entendemos que lo exponencial tiene que ver con las m¨¢quinas y lo slow con lo humano, que lo exponencial es tecnolog¨ªa y lo slow son personas, resolveremos un mont¨®n de dudas, problem¨¢ticas y conflictos en el entorno profesional. Una regla b¨¢sica que si todo el mundo entiende y comparte ser¨¢ mucho m¨¢s sencillo abordar los cambios que nos plantea el contexto actual.
Una tecnolog¨ªa es exponencial cuando crece por dos cada a?o y reduce sus costes a la mitad, ?Brutal verdad? ?Es viable este desarrollo en una persona? Obviamente no, por eso es imposible que cuando las personas son nuestro foco hablemos de exponencialidad. La exponencialidad es rendimiento 24/7, son m¨¢quinas sin descanso y a alto rendimiento, donde se puede evolucionar y cambiar a trav¨¦s de microchips, computaci¨®n cu¨¢ntica, algoritmos ¡ y con cero resistencia, todo lo que vayamos probando lo va a soportar sin queja alguna, podemos estresar las m¨¢quinas incluso hasta romperlas para hacerlo exponencial. Visto esto, podemos decir que las m¨¢quinas son el aliado perfecto para un desarrollo exponencial.
Por el contrario una visi¨®n o pensamiento slow requiere tiempo, reflexi¨®n, diferentes miradas, creatividad, intuici¨®n, an¨¢lisis, critica, ¡ ?complejo verdad? ?es posible este pensamiento para una m¨¢quina? Aqu¨ª no puedo decir un rotundo obviamente no, y tengo que sustituirlo por un de momento no. A lo largo de los ¨²ltimos a?os hemos visto algunos progresos pero a d¨ªa de hoy el pensamiento humano slow no es replicable y gracias a eso nos lleva cada vez a soluciones diferentes y ¨²nicas; ojo, no estoy hablando del pensamiento r¨¢pido que puede ser f¨¢cilmente copiado y estandarizado por una m¨¢quina al ser una reacci¨®n inmediata a un est¨ªmulo; hablo del pensamiento slow, que por sus caracter¨ªsticas mencionadas con anterioridad lo hacen ¨²nico y el aliado perfecto para dar sentido y diferenciaci¨®n a la exponencialidad.
- Sumemos el cambio a la f¨®rmula
Ahora que vemos como conectan los dos conceptos y como pueden trabajar en la misma direcci¨®n, sumemos una nueva variable com¨²n a ambos y tan presente en el contexto actual: el cambio. Ya sea porque queremos afrontar un cambio a nivel organizacional o cultural, para una transformaci¨®n digital o para la b¨²squeda de nuevos modelos de ingresos.
En estos momentos y procesos de cambio, adem¨¢s de compartir la conexi¨®n entre los dos conceptos, es cuando hay que entender que lo tecnol¨®gico y lo humano tienen y necesitan velocidades diferentes y que es ah¨ª donde radica el valor de cada uno. En un contexto en continuo cambio y a una velocidad brutal es importante saber muy bien cu¨¢nta velocidad exponencial y cu¨¢nta desaceleraci¨®n y pensamiento slow necesitamos en cada momento.
No entender esto hace que las empresas fracasen en sus cambios, que no se hagan las preguntas adecuadas y que dejen de lado la parte m¨¢s importante en las transformaciones: las personas, que en multitud de ocasiones son utilizadas como un mero n¨²mero m¨¢s, sin tener en cuenta sus necesidades, h¨¢bitos, emociones y aporte de valor.
Ahora toca preguntarse c¨®mo estamos afrontado el cambio, y si es posible hacerlo sin contar con las personas.? Para contestar a la pregunta un ¨²ltimo consejo:
Piensa lento y actua exponencialmente.
Eduardo Beotas es CEO de Soulsight
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