Nicholas Carr: ¡°Google socava nuestra capacidad de pensar de manera profunda¡±
El divulgador tecnol¨®gico critica en la entrevista la evoluci¨®n que han tenido las redes sociales y sostiene que las nuevas tecnolog¨ªas contribuyen a una mayor banalidad de los razonamientos
Controversia y pol¨¦mica son dos sustantivos que acompa?an a Nicholas Carr (Estados Unidos, 1959) desde que, en 2003, criticara en un art¨ªculo en la Harvard Business Review la evoluci¨®n adquirida por las tecnolog¨ªas de la informaci¨®n. Lo mismo discut¨ªa con directivos de Microsoft que de Intel. Para este divulgador tecnol¨®gico, internet ha convertido al ser humano en un animal superficial. Alejado de la profundidad que se le presuponen a sus razonamientos. Las redes sociales tampoco han escapado de sus dardos cargados de cr¨ªtica. En la publicaci¨®n de su ¨²ltimo libro, La pesadilla tecnol¨®gica (Ediciones El Salm¨®n), escribe que Twitter no es m¨¢s que un sitio para expresar minucias personales. ¡°Ofrece, por tomar prestada la frase del fil¨®sofo John Gray, un refugio para la insignificancia¡±, argumenta.
?Por qu¨¦ piensa que las redes sociales ejercen un papel tan pernicioso para la sociedad?
??Acaso hay alguien todav¨ªa que no critique a Facebook y al resto de redes? Hemos perdido nuestra inocencia con respecto al reino digital. Nos hemos desilusionado. No creo que nadie, salvo acosadores o s¨¢dicos emocionales, obtenga demasiado placer de una red social si es que alguna vez la obtuvieron. Nos inscribimos a ciegas en sus servicios y ahora estamos habituados a ellos. Dependemos de ellos. Los tejimos en la trama de la sociedad, pero usamos las redes como un alivio de los rigores de la comunicaci¨®n y el pensamiento. Como una forma de evadir nuestra mente.
?Existe alguna posibilidad de revertir esta situaci¨®n para que las redes sociales no parezcan un sitio tan vac¨ªo como describes?
?Alguien se siente satisfecho, intelectual o socialmente, cuando las usa? No lo creo. La mayor¨ªa de gente siente ansiedad y vac¨ªo. Es importante recordar que las redes sociales, como Facebook y Twitter, se dise?aron para conversaciones informales, como charlas amistosas, ligar o intercambiar r¨¢pidamente mensajes. Nada que ver ni con la seriedad ni con conversaciones sutiles. Y, sin embargo, gracias a una combinaci¨®n de pereza personal y manipulaci¨®n empresarial, las hemos llegado a utilizar cada vez m¨¢s para hablar en p¨²blico y el debate pol¨ªtico.
?Cu¨¢les son las consecuencias de que dominen el debate p¨²blico?
Las redes han engendrado superficialidad y polarizaci¨®n. Tambi¨¦n han fomentado la propaganda y el auge de las llamadas fake news. Creo que esto ¨²ltimo es una de las mayores tragedias de las redes sociales. Las usamos para unas formas de comunicaci¨®n completamente inadecuadas.
En el libro describes a Facebook como una empresa que solo hace negocios con datos privados y anuncios. ?La gente es consciente de su modelo?
Si todav¨ªa hay personas que est¨¢n bajo la ilusi¨®n de que Facebook es una herramienta benigna para la armon¨ªa social, deben llevar a?os dormidas. Deber¨ªan despertar, apagar su tel¨¦fono y leer un peri¨®dico. Facebook es un negocio basado en espiarnos y manipularnos. Esto es tan obvio que creo que incluso Mark Zuckerberg lo admitir¨ªa.
?La tecnolog¨ªa, por s¨ª misma, es un problema o m¨¢s bien depende del uso que le demos?
La tecnolog¨ªa la crean y usan humanos, por lo que al final somos responsables de ella. No es algo que caiga por arte de magia del cielo. Es un tonter¨ªa pensar que la tecnolog¨ªa es neutral. Tiene un sesgo, nos empuja a comportarnos y a pensar de una manera determinada. Cuando adoptamos una nueva herramienta, tambi¨¦n adoptamos sus sesgos. Por ejemplo, internet est¨¢ sesgado hacia la distribuci¨®n de informaci¨®n de alta velocidad en diferentes formatos, como audio, texto o im¨¢genes. Esto significa que es un medio de gran distracci¨®n, que socava el pensamiento profundo. As¨ª que, cuando nos conectamos, intercambiamos profundidad por amplitud, contemplaci¨®n por estimulaci¨®n.
?Por qu¨¦ aseguras que Google ha cambiado la forma en que razonamos y pensamos?
La visi¨®n de Google de la mente humana es industrial. Se trata de la eficiencia con la que nuestro cerebro procesa la informaci¨®n. Por esta raz¨®n, Google y otras compa?¨ªas ponen tanto ¨¦nfasis en la velocidad y el volumen de consumo de la informaci¨®n. Lo que les falta es una apreciaci¨®n de la forma en que el cerebro transforma los fragmentos de informaci¨®n en conocimiento de calidad. Al bombardearnos, socavan nuestra capacidad de pensar de manera profunda, cr¨ªtica y conceptual. Formas de pensar que requieren atenci¨®n y reflexi¨®n. Hay evidencias cient¨ªficas que demuestran que los medios digitales nos empujan hacia un pensamiento superficial y lejos del rigor. Y todo es mucho peor desde que llevamos encima un smartphone todo el tiempo.
Si todav¨ªa hay personas que est¨¢n bajo la ilusi¨®n de que Facebook es una herramienta benigna para la armon¨ªa social, deben llevar a?os dormidas".?
Est¨¢s preocupado por las filtraciones de datos y la privacidad. ?Las redes sociales han fomentado que los casos hayan aumentado?
Algo que las redes han dejado claro es que los puntos de vista de muchas personas est¨¢n mal informados, son banales o, simplemente, err¨®neos. De esta forma, lograr que alguien se exprese es una bendici¨®n mixta. Todos estar¨ªamos mejor si pas¨¢ramos m¨¢s tiempo pensando cr¨ªticamente sobre nuestros puntos de vista y menos en expresarlos a todo el mundo. Creo que un sentido de privacidad es esencial para desarrollar una vida intelectual rica, por lo que la forma en que las redes sociales nos han robado el refugio de la privacidad empeora todos estos problemas.
?C¨®mo de cercana es la relaci¨®n que mantienen actualmente las redes sociales y la pol¨ªtica?
Las redes sociales son inadecuadas para el discurso pol¨ªtico. Fomentan la superficialidad sobre la profundidad, la emoci¨®n sobre la raz¨®n y el pensamiento grupal por encima del cr¨ªtico. Su dise?o auspicia que se extienda r¨¢pidamente la propaganda y la desinformaci¨®n. Los pol¨ªticos han adoptado las redes sociales porque les brinda una forma f¨¢cil de llamar la atenci¨®n y entusiasmar a sus bases. Resulta dif¨ªcil observar efectos positivos en el movimiento del discurso pol¨ªtico y el debate p¨²blico hacia las redes.
?Alguien se siente satisfecho, intelectual o socialmente, cuando las usa? No lo creo. La mayor¨ªa de gente siente ansiedad y vac¨ªo.
Steve Bannon, estratega de campa?a de Donald Trump, entre otros, es un ejemplo de c¨®mo la pol¨ªtica se ha adaptado a internet. ?La extrema derecha lleva ventaja al resto de partidos?
En Estados Unidos, la derecha tiene una perspectiva externa. Se ven a s¨ª mismos luchando en una batalla contra las ¨¦lites pol¨ªticas y acad¨¦micas que consideran que controlan la cultura. Creo que es por eso que personas como Bannon apreciaron desde el principio c¨®mo las redes sociales podr¨ªan ser un arma efectiva para la guerra cultural y pol¨ªtica. Pero no veo que las redes tengan ning¨²n sesgo pol¨ªtico en particular. Pueden usarlas tanto d¨¦spotas de izquierdas como de derechas.
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