El puerto que sustituy¨® a los estibadores por robots y algoritmos

La terminal de contenedores de Qianwan, en el puerto de Qingdao, est¨¢ a pleno rendimiento. Ha atracado en sus instalaciones el Cape Tainaro, un carguero malt¨¦s de 330 metros de eslora, y hay que desembarcar miles de contenedores. Sin embargo, apenas se ven seres humanos en el trecho de 660 metros que ocupa la terminal. Y los pocos que caminan por la explanada no parecen muy atareados. Al contrario, se dedican a observar c¨®mo funciona todo a la perfecci¨®n sin que ellos muevan un dedo, porque la de esta localidad del noreste de China es la primera terminal de contenedores totalmente automatizada de Asia y una de las m¨¢s avanzadas del mundo.

La instalaci¨®n es propiedad de la empresa p¨²blica? Qingdao Port Group, de DP World (filial de Dubai World, un holding propiedad de los Emiratos ?rabes Unidos) y de la danesa? Maersk.?Cosco, la empresa que controla los puertos de Bilbao y Valencia (adem¨¢s de otros como el del Pireo) lleg¨® a controlar el 20% del capital antes de desinvertir.?

Qianwan se inaugur¨® en mayo de 2017 despu¨¦s de una construcci¨®n completada en solo tres a?os, un lustro menos de lo habitual. Puede acomodar a los mayores barcos de contenedores del planeta, esos capaces de transportar m¨¢s de 20.000 toneladas, y todas las operaciones se supervisan por ordenador desde un centro de control. Seguir el proceso resulta fascinante.

Un ej¨¦rcito de brazos rob¨®ticos suelta y ancla cada caja met¨¢lica, siete gr¨²as STS sin operario desembarcan los contenedores del buque a tierra, 38 veh¨ªculos aut¨®nomos el¨¦ctricos guiados por la cuadr¨ªcula invisible que dibujan 20.000 transpondedores magn¨¦ticos integrados en el suelo los transportan con precisi¨®n milim¨¦trica, y 38 gr¨²as apiladoras parecen jugar al tetris en la ¨²ltima fase del proceso, antes de que se carguen en los camiones tradicionales que los llevar¨¢n a su destino final. Las puertas por las que pasan estos veh¨ªculos tambi¨¦n son autom¨¢ticas, y reconocen cada contenedor para evitar errores.

¡°Los d¨ªas en los que se formaban cuellos de botella en el puerto han acabado¡±, afirm¨® el director general, Zhang Liangang, durante la inauguraci¨®n de la terminal. Y, Yang Jiemin, subdirector del Puerto de Qingdao y uno de los cient¨ªficos que controlan los sistemas de las instalaciones autom¨¢ticas, asegura a EL PA?S Retina que el futuro de los puertos es el que est¨¢ permitiendo que el Cape Tainaro descargue sus contenedores a toda velocidad y sin ning¨²n peligro para la seguridad de los empleados. Claro que en Qianwan es dif¨ªcil resultar herido porque los estibadores han desaparecido.

China gestion¨® el a?o pasado 14.300 millones de toneladas de carga en sus puertos. El pa¨ªs tiene intereses en los los de Barcelona, Valencia, o Bilbao.

¡°Los costos laborales se han reducido un 70% y la productividad ha aumentado un 30%. Antes necesit¨¢bamos unos sesenta empleados para descargar un buque, pero ahora bastan nueve. Y ya no son poco cualificados, sino t¨¦cnicos que controlan todo desde un centro computarizado¡±, se?ala orgulloso. ¡°Como utilizamos lectores l¨¢ser para localizar de forma muy precisa todos los puntos de anclaje en las esquinas de los contenedores, podemos trabajar en total oscuridad. O sea, que de noche mantenemos el mismo ritmo que de d¨ªa¡±, a?ade.

La terminal automatizada comenz¨® sus operaciones con una productividad por cada gr¨²a de 26,1 contenedores a la hora. Nada espectacular. Un a?o despu¨¦s, esa variable se hab¨ªa incrementado hasta los 33,1 contenedores, y, actualmente, la media est¨¢ por encima de los 35. Como apunta Yang, es una productividad que supera ya a la de las terminales manuales, y que todav¨ªa est¨¢ lejos de alcanzar su cima. ¡°Hemos marcado un r¨¦cord mundial de 43,23 contenedores a la hora, y la tecnolog¨ªa contin¨²a avanzando. Apostamos por el ¡®big data¡¯, la inteligencia artificial, y las nuevas redes 5G para continuar incrementando la eficiencia del puerto sin que ello requiera inversiones muy elevadas. El objetivo es llegar a los 40 contenedores por hora en el pr¨®ximo a?o¡±, se?ala el vicepresidente.

La clave est¨¢ en los sistemas que mueven la terminal. El ¡®software¡¯ dise?ado en China para Qianwan genera autom¨¢ticamente planes de trabajo de acuerdo con las caracter¨ªsticas de cada buque y de su carga: escanea el contorno de los contenedores, identifica su contenido, determina las secuencias de trabajo, y los robots las llevan a cabo con una precisi¨®n superior a la del ser humano. Actualmente, la terminal puede gestionar unos 5,2 millones de contenedores de 20 pies al a?o, y Yang est¨¢ convencido de que los avances en el ¡®software¡¯ continuar¨¢n exprimiendo a¨²n m¨¢s la infraestructura, incrementando su rentabilidad.

Ese ¨²ltimo es un punto de suma relevancia. Porque el desembolso que requiere la construcci¨®n de una terminal como la de Qianwan es elevado -unos 425 millones de euros-. No obstante, Yang sostiene que la inversi¨®n no tarda en dar frutos. ¡°Es cierto que el coste de la infraestructura es un 30% m¨¢s elevado que el de una terminal manual, pero se compensa r¨¢pidamente con el incremento de la eficiencia y la reducci¨®n de la masa salarial. En 10 o 15 a?os devolveremos los cr¨¦ditos que pedimos para levantar la infraestructura, y en solo uno ya hemos conseguido que arroje beneficios, incluso teniendo en cuenta la amortizaci¨®n de esa financiaci¨®n¡±.

Adem¨¢s, Yang se?ala que la plena automatizaci¨®n y electrificaci¨®n de las operaciones han permitido reducir sustancialmente las emisiones contaminantes. ¡°Tenemos el menor consumo de energ¨ªa por unidad, y la meta es alcanzar las emisiones cero¡±, informa el cient¨ªfico con una amplia sonrisa que se desvanece cuando se le pregunta por la competencia. Yang reconoce que China no ha sido pionera en la materia. Ni mucho menos. La primera terminal automatizada se construy¨® en el puerto de Rotterdam en 1993, y por el mundo ya hay 48 que son total o parcialmente autom¨¢ticas.

¡°Nuestra ventaja est¨¢ en la innovaci¨®n tecnol¨®gica y en la reducci¨®n de los costos de construcci¨®n y de operaci¨®n. Rotterdam sufre muchos problemas y es mucho m¨¢s cara que Qianwan, aunque su productividad es menor. Esas estad¨ªsticas han ralentizado la expansi¨®n de estas tecnolog¨ªas por el mundo, pero China ha dado con soluciones que suponen un gran salto, porque reducen el tiempo de construcci¨®n y los costos operativos a la vez que aumentan la eficiencia¡±, explica el directivo.

El desarrollo que el gigante asi¨¢tico est¨¢ promoviendo en el sector no es por capricho, sino por necesidad: China gestion¨® el a?o pasado 14.300 millones de toneladas de carga en sus puertos, y siete de los diez m¨¢s importantes del mundo est¨¢n en el gigante asi¨¢tico, que tambi¨¦n controla algunos en otros pa¨ªses, incluidos los de Barcelona, Valencia, o Bilbao. A pesar de la guerra comercial con Estados Unidos y la ralentizaci¨®n de la econom¨ªa global, puertos como el de Qingdao contin¨²an incrementando su volumen de carga. Pero no es lo ¨²nico que crece: el aumento del precio de la mano de obra es una presi¨®n cada vez mayor.

As¨ª, el ejemplo de Qingdao contin¨²a cundiendo: el a?o pasado Shangh¨¢i inaugur¨® la mayor terminal automatizada del mundo, capaz de gestionar 6,3 millones de contenedores de 20 pies al a?o. El ¨¦xito de estos ejemplos ha hecho que los planes para construir m¨¢s infraestructuras de este tipo se hayan multiplicado. ¡°La Nueva Ruta de la Seda es un buen proyecto para extender esta tecnolog¨ªa por el mundo¡±, afirma Yang. En l¨ªneas similares, el ministro de Transportes de China, Li Xiaopeng, asegur¨® hace unos meses que el objetivo es incrementar la capacidad de forma paralela a la eficiencia y reduciendo la huella medioambiental del sector. Para lograrlo, las inversiones en nuevas tecnolog¨ªas son clave.

Mercado para ellas no va a faltar. Seg¨²n un estudio de MarketsAndMarkets, en 2017 el volumen de negocio de los puertos automatizados era de unos 8.800 millones de d¨®lares, cifra que aumentar¨¢ hasta los 10.890 millones en 2023. Y el recorrido que tiene esta tecnolog¨ªa es largo, porque solo un 3% de las terminales del mundo cuenta con alg¨²n grado de automatizaci¨®n. ¡°Entiendo que haya quienes se opongan a estos avances, pero, en el futuro, todos los puertos ser¨¢n autom¨¢ticos¡±, remarca Yang.