As¨ª est¨¢n hoy mismo las tecnolog¨ªas de ma?ana
Investigadores y expertos repasan de d¨®nde venimos y a d¨®nde vamos en inteligencia artificial y realidad virtual
El escritor brit¨¢nico de ciencia ficci¨®n Arthur C. Clarke afirmaba que una tecnolog¨ªa lo suficientemente avanzada es indistinguible de la magia, ?no encajar¨ªa aqu¨ª un superpoder? El modelo de innovaci¨®n de Prosegur busca desarrollar habilidades sobrehumanas: colaboraci¨®n entre robots y personas para vigilancia a¨¦rea, realidad mixta para visualizar el mundo digital trav¨¦s de un interfaz f¨ªsico. ¡°Lo utilizamos en el negocio de ATMs, cuando un operario llega un cajero y tiene que arreglarlo, sabe de todos los problemas que se puede encontrar¡±, se?ala Jos¨¦ Daniel Garc¨ªa Espinel, director de Innovaci¨®n de Prosegur. Hasta la impresi¨®n 3D encaja en la agenda de la compa?¨ªa: ¡°Todo aquello que somos capaces de dise?ar en un ordenador, somos capaces de imprimirlo¡±. Por ejemplo, las piezas de los cajeros. ¡°Estas tecnolog¨ªas nos permiten dar un servicio perfecto, r¨¢pido y ¨¢gil¡±.
El superpoder del c¨¢lculo es clave entre los anteriores. ¡°Estas herramientas de predicci¨®n han sido clave en los acontecimientos de las ¨²ltimas semanas en nuestro pa¨ªs. Si detectamos un problema que va a llegar a una calle determinada en los pr¨®ximos 15 minutos, lo que hacemos es cerrarlo¡±.
Prosegur no sufre por falta de datos. Ya est¨¢ recopil¨¢ndolos en cuentos de miles de c¨¢maras y sensores por todo el mundo. El reto es procesarlos. ¡°La naturaleza, durante billones de a?os ha evolucionado sistemas biol¨®gicos que permiten a los animales procesar esa informaci¨®n de forma s¨²per eficaz¡±, se?ala Manuel Tarrasa, CTO de la compa?¨ªa
El objetivo de Prosegur es emular esto con inteligencia artificial. Identificar, por ejemplo, una pistola en la c¨¢mara de seguridad de una tienda e interpretar que probablemente no va a ser usada de manera muy amigable. ¡°Al final, una fotograf¨ªa no deja de ser un conjunto de n¨²meros que puede tratarse desde un ordenador. Necesitamos inteligencia artificial para interpretar esto¡±, afirma. ¡°Desde luego, no hemos llegado a la capacidad humana, pero ya podemos hacer muchas cosas¡±
?Qu¨¦ hacer con todas ellas, una vez se tenga al alcance de la mano? Analizar datos para llegar a extremos parecidos a lo que mostraba la recurrente Minority Report: predecir el crimen y, en general, la inseguridad.
¡°Lo que estamos construyendo es una plataforma de inteligencia artificial que nos permite conocer lo que est¨¢ pasando del mundo en tiempo real y eso o podemos hacer gracias a diferentes tecnolog¨ªas: machine learning, IOT, nube, API management y monitorizaci¨®n¡±.
- Donde no llegan las m¨¢quinas
Entendiendo la inteligencia artificial como ¡°la expresi¨®n de comportamientos humanos por m¨¢quinas¡±, describimos un ¨¢mbito donde ¡°cabe todo¡±, explica Elisenda Bou-Balust, CTO de Vilynx. En este sentido, y en medio de la proliferaci¨®n de herramientas que se cuelgan esta medalla, casi es mejor decir qu¨¦ no puede hacer ahora la inteligencia de las m¨¢quinas. ?D¨®nde est¨¢n sus l¨ªmites? Pues, ver¨¢s, HAL, de Odisea en el Espacio, est¨¢ bastante perdido en las nieblas del futuro m¨¢s lejano y qui¨¦n sabe si improbable.
Como muestra, un bot¨®n: jirafas en una piscina. Es un escenario raro, pero si lo ves, tu humano cerebro lo reconocer¨¢. Las m¨¢quinas no est¨¢n tan preparadas para esto. Aqu¨ª empiezan los quebraderos de cabeza de la visi¨®n artificial. Una jirafa en una piscina es casi factible, ?pero que es un cuerpo de d¨¢lmata con cuello de jirafa que tiene por cabeza el m¨¢stil de una guitarra? ¡°Esto a una m¨¢quina le cuesta un mont¨®n¡±.
El procesamiento del lenguaje tampoco se queda atr¨¢s. Si alguien dice que tu perro se ha comido un postre con un tenedor, tu sentido com¨²n entra en juego y dice: ¡°Se ha comido el tenedor¡±. Para la m¨¢quina, carente de conocimientos del mundo y su funcionamiento m¨¢s all¨¢ de lo que cab¨ªa en su dataset primigenio, el perro se ha comido el postre usando un tenedor. ¡°Esto es un reto muy grande para la inteligencia artificial. Se resuelve mediante sistemas de probabilidades, que no solo almacenan las posibilidades que son obvias¡±.
- Tu cerebro en el pa¨ªs de las maravillas
¡°La realidad virtual es la generaci¨®n de un entorno de 360 grados, que nos rodea completamente, con un ordenador¡±, define Mavi S¨¢nchez-Vives investigadora en Neurociencias y Realidad Virtual, profesora de investigaci¨®n ICREA y fundadora de Virtual Bodyworks.
En este contexto, cuanto m¨¢s multisensorial, mejor. O peor: si te est¨¢ persiguiendo un asesino, respondes como si fuera real pese a que sabes que no lo es. Pero esta tecnolog¨ªa no s¨®lo encaja en Halloween. Encuentra un amplio mercado en los videojuegos y en general, en el desarrollo de experiencias. ¡°Podemos estar en la cumple del Everest, navegando en los oc¨¦anos o en el Machu Pichu, o en una monta?a rusa, o volando¡±.
Esto se puede utilizar para un amplio abanico de entrenamientos. De hecho, el ej¨¦rcito americano lo utiliz¨® para conocer mejor las calles de Bagdad antes de la invasi¨®n. Pero tambi¨¦n sirve para aprender a hablar en p¨²blico, superar la fobia social o preparar entrevistas de trabajo. ¡°Pueden ser entornos muy ricos socialmente¡±, a?ade la cient¨ªfica.
En este mundo de ficci¨®n desaparecen las limitaciones. Ni siquiera tu cuerpo te corta las alas. ¡°Nuestro cerebro es muy flexible respecto a esto: podemos cambiar de edad, sexo, raza¡ Sin embargo, si hay discrepancias en el movimiento o la informaci¨®n visot¨¢ctil, se rompe la ilusi¨®n con respecto al cuerpo virtual¡±.
?Qu¨¦ podemos hacer? Algo tan f¨ªsicamente imposible como ponerte en el cuerpo de un ni?o. ¡°Lo que sucede cuando pasa esto es que en unos minutos se produce un reescalado de los objetos que tienes a tu alrededor¡±, se?ala S¨¢nchez Vives. Adem¨¢s, estos entornos se pueden utilizar con progenitores, creando experiencias que aumentan la empat¨ªa hacia los ni?os. Con otros escenarios pero la misma idea se puede incluso reducir sesgos raciales y abordar el lastre de la violencia dom¨¦stica. ¡°No s¨®lo podemos ponernos en la perspectiva de otra persona¡±.
- Los mundos de Telef¨®nica
Con la realidad virtual, la emoci¨®n de ir al estadio a ver un partido de f¨²tbol se vuelve m¨¢s alcanzable para los forofos de este deporte. Todo es recreable: oficinas bancarias, aulas, conciertos¡ Y Telef¨®nica lo sabe. ¡°Cuando nos vayamos a comprar un piso, podremos recorrerlo como si estuvi¨¦ramos all¨ª, aunque no est¨¦ construido¡±, explica Mercedes Fern¨¢ndez, gerente de Innovaci¨®n Tecnol¨®gica de Telef¨®nica.
La compa?¨ªa lleva tiempo buscando espacios que puedan completarse con las posibilidades de este entorno digital. Aunque la realidad virtual tiende a ser una experiencia un poco individualista, se le puede dar la vuelta para entornos tan cercanos como ver la tele y tan lejanos como hacerlo acompa?ados por personas que est¨¢n en otro pa¨ªs. Esa misma soledad se puede resolver en entornos profesionales, como la mesa de quir¨®fanos. O la industria. O el turismo. ¡°Tenemos grandes cosas por hacer, pero hoy por hoy ya se pueden hacer muchas. Las capacidades de las redes han mejorado mucho y nos permiten mejorar experiencias mucho m¨¢s complejas¡±.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.