La cuarentena dispara a Twitch (y a Ibai Llanos)
El confinamiento dispara las audiencias de las plataformas de ¡®streaming¡¯, como Twitch, en la que el antiguo narrador de eSports se ha convertido en uno de los referentes en Espa?a
La crisis del coronavirus ha beneficiado a las plataformas de streaming. El confinamiento impuesto por la pandemia ha disparado tanto el n¨²mero de usuarios como el consumo de contenidos. Netflix, por ejemplo, ha duplicado sus beneficios durante el primer trimestre del a?o y ha sumado a casi 16 millones de nuevos suscriptores en estas semanas de reclusi¨®n. M¨¢s desapercibido han irrumpido otros nombres como Twitch, donde los videojuegos son mayoritariamente los protagonistas de las emisiones en directo. En Espa?a, Ibai Llanos (Bilbao, 1995) se ha convertido en uno de los rostros m¨¢s seguidos a diario. El antiguo narrador de deportes electr¨®nicos, ahora creador de contenido para el equipo G2 Esports, congrega a decenas y hasta centenares de miles de espectadores, sean las siete de la tarde o las dos de la ma?ana.
Lo mismo juega al Fortnite con futbolistas como Thibaut Courtois y el Kun Ag¨¹ero, narra un Mundial de canicas, comenta v¨ªdeos de rusos d¨¢ndose tortazos que reacciona al contenido de El Comidista. ¡°La cuarentena ha provocado que este entorno crezca en todo el mundo. La gente est¨¢ aburrida en casa y pide directo. Muchos se han decantado por este entretenimiento. Buscan una alternativa a estar encerrados¡±, comenta. Y los datos lo avalan. De acuerdo con Streamlabs, las horas mensuales consumidas en Twitch, propiedad de Amazon, aumentaron un 24% a partir de marzo, llegando a un total de 1.203 millones en ese mes.
Pese a su imagen deslavazada, detr¨¢s de su ¨¦xito existe m¨¢s preparaci¨®n de la que cabe imaginar. No es balad¨ª que un d¨ªa intente hacer ejercicio durante 10 minutos y otro pase horas con sus amigos a Valorant. Organiza la semana siempre con la intenci¨®n tanto de entretener a su audiencia como de disfrutar ¨¦l mismo. ¡°Tengo una idea fijada para cada d¨ªa. Puedo llegar a improvisar, pero busco formatos constantemente. Preparo todo, desde el videojuego hasta el entorno que lo acompa?a en el directo¡± asegura. Una constancia que, en poco m¨¢s de tres meses en Twitch, lo ha encumbrado casi al mismo nivel de l¨ªderes indiscutibles espa?oles como ElRubius, AuronPlay y TheGrefg.
Sin embargo, la popularidad de Llanos nada tiene que ver con YouTube y otras plataformas empleadas por los gamers para dar el salto al streaming. Hasta esta nueva etapa, su vida ha estado ligada durante casi seis a?os a la Liga de Videojuegos Profesional (LVP), donde narraba eSports en una ¨¦poca en la que ni por asomo llenaban estadios de f¨²tbol. Los ve¨ªan como unos frikis ¡ª¡°a la gente le da rabia que pueda ganar dinero as¨ª¡±¡ª. Twitter fue su aliado para llegar a todo tipo de p¨²blicos y los videojuegos la excusa. Como precisa, solo ha viciado a League of Legends y Call of Duty. ¡°Soy un caso especial. No es normal que Twitter sea mi red social con m¨¢s seguidores. Crec¨ª por las tonter¨ªas que tuiteaba. En Instagram y en YouTube no hac¨ªa nada¡±, zanja.
El buen momento que vive Twitch abre la posibilidad de que recoja el testigo de oportunidad laboral que supuso YouTube tiempo atr¨¢s para una generaci¨®n como la millennial. La generaci¨®n z, que abarca a quienes nacieron entre finales de los 90 y 2010, ha desembarcado con fuerza en los directos. Cada vez son m¨¢s quienes intentan forjarse un futuro en este entorno. Para evitar que los cantos de sirena ensordezcan la realidad del sector, Llanos avisa a futuros streamers: ¡°Siempre hay que priorizar los estudios por delante de Twitch o YouTube¡±. Y eso que dej¨® su formaci¨®n con 19 a?os por un contrato en Barcelona que apenas superaba los 300 euros mensuales. ¡°No estoy orgulloso de lo que hice. Con m¨¢s esfuerzo podr¨ªa haberlo compaginado¡±, sostiene.
Un bicho raro
Precisamente, esta mudanza produjo una situaci¨®n inc¨®moda en su familia. Tan desconocido era el mundo de los deportes electr¨®nicos que, como bromea, sus padres pensaban que su hijo ten¨ªa problemas con el alcohol o se hab¨ªa metido en algo de drogas. ¡°Era muy marciano. Ten¨ªan que comprender que me iba de mi ciudad a comentar videojuegos. ?Comentar videojuegos! El proceso ha sido muy duro¡±, a?ade mientras lamenta haberse perdido la adolescencia de su hermano peque?o. Dice de s¨ª mismo que es muy familiar, que mantiene una relaci¨®n muy estrecha con todos. ¡°Por muy bien que te vaya o el dinero que ganes, el tiempo no se recupera seas quien seas¡±.
La fama adquirida por Twitch parte de la variedad de contenidos disponible. Los videojuegos son el reclamo habitual, pero la plataforma, de acceso gratuito, no deja de ser una web en la que emitir en directo ¡ª¡°hasta Kiko Rivera tiene su canal¡±, recalca¡ª. La categor¨ªa ¡°Charlando¡±, donde lo mismo alguien pinta que se pone a cocinar, suma a millones de espectadores recurrentemente. ¡°No me preocupo en exceso por el futuro que tenga el streaming. Por el momento es m¨¢s que s¨®lido. Noto que cada vez hay m¨¢s gente externa a este mundillo, como actores, cantantes o deportistas. Tengo la sensaci¨®n de que dar¨¢ trabajo a bastante gente¡±, aprecia.
Sin detenerse en excesivos detalles, no le importa hablar de la ansiedad que padece, aunque ya la controla. ¡°Es algo jodido. Al principio fueron demasiados cambios; y m¨¢s para alguien como yo, que ten¨ªa poca autoestima, nula experiencia laboral y sin haberme puesto jam¨¢s delante de una c¨¢mara. La ansiedad me llevaba a m¨ª. Pensaba que nunca se acabar¨ªa¡±. Ya es agua pasada, cuando el bombardeo constante de mensajes a trav¨¦s de Internet le condujo a enfrentarse a una enfermedad rodeada de muchos tab¨²es.
Con 121 millones de horas emitidas en el primer trimestre del a?o, seg¨²n datos de Streamlabs, Twitch ha aprovechado su oportunidad durante la cuarentena para garantizarse un futuro aparentemente prometedor. Aun con esta situaci¨®n, Llanos es consciente de que la Red encumbra en segundos y destruye reputaciones a la misma velocidad. No se plantea a corto plazo abandonar el barco de los directos, aunque si su trayectoria profesional cambiara, le encantar¨ªa crear su propio club de deportes electr¨®nicos. ¡°Ahora mismo me veo in¨²til para eso, aunque me gustar¨ªa. Lo he reflexionado en muchas ocasiones y me parecer¨ªa flipante¡±, concluye.
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