As¨ª funcionan los dispositivos que leen y modifican el cerebro para mejorar capacidades humanas
El desarrollo de las interfaces cerebro-m¨¢quina y la evoluci¨®n de la IA son la clave para conseguir humanos sanos con habilidades mejoradas. El escenario abre m¨²ltiples interrogantes ¨¦ticos y filos¨®ficos, algunos de ellos inquietantes
Cuando la tecnolog¨ªa consiga curar el cerebro, si es que lo logra, llegar¨¢ la edad dorada de la mejora de capacidades. Se extender¨¢ entonces el uso de dispositivos para tener m¨¢s memoria, concentrarse con m¨¢s facilidad o ser capaz de pensar en varias cosas a la vez. Tambi¨¦n de aquellos que permitir¨¢n conectarse a Internet con nuestra mente o manejar dispositivos sin tocarlos.
Esa es la previsi¨®n de la comunidad cient¨ªfica, que entiende que el desarrollo de las interfaces cerebro-m¨¢quina y la evoluci¨®n de la inteligencia artificial son la clave para conseguir que haya humanos sanos con habilidades mejoradas. El escenario abre m¨²ltiples interrogantes ¨¦ticos y filos¨®ficos, algunos de ellos inquietantes: ?hasta qu¨¦ punto podemos intervenir en nuestro cerebro y seguir siendo quienes somos? ?Podr¨¢n todas las personas acceder a esos avances que aumentar¨¢n nuestras capacidades o ser¨¢n el privilegio de una casta de humanos mejorados?
Leer la mente
Conviene no perder de vista esos debates, aunque hoy parezcan de ciencia ficci¨®n. Las interfaces cerebro-m¨¢quina que mencionan los expertos son dispositivos que pueden leer actividad de las ondas cerebrales y tambi¨¦n escribir informaci¨®n nueva en ellas. Puede ser un electrodo que se pone en el cr¨¢neo o un microchip que se inserta directamente en el cerebro. Estos sensores recogen los datos de la actividad neuronal y los env¨ªan a un ordenador, donde los algoritmos los procesan e interpretan: as¨ª podemos llegar a saber qu¨¦ hay codificado en nuestras neuronas. Tambi¨¦n funciona al rev¨¦s: el ordenador puede introducir informaci¨®n nueva en el cerebro modificando su actividad.
¡°Digamos que los sensores son micr¨®fonos que permiten escuchar a las neuronas y los algoritmos tienen que traducir la informaci¨®n que se recopila, que puede ser emocional, cognitiva, motora o sensorial¡±, explica Mar¨ªa L¨®pez, CEO de la empresa Bitbrain, especializada en desarrollar sensores que detectan la actividad cerebral y el software que analiza los datos. ¡°Dado que todo lo que hacemos pasa por el cerebro, si podemos traducir esa informaci¨®n podemos utilizarla para lo que queramos, como mejorar capacidades cognitivas¡±.
Es lo que hizo el a?o pasado el equipo de deportes electr¨®nicos Vodafone Giants. En colaboraci¨®n con Bitbrain, midieron las ondas cerebrales de los jugadores y obtuvieron informaci¨®n sobre su concentraci¨®n a trav¨¦s de unas diademas con electrodos. ¡°Utilizamos una tecnolog¨ªa que es capaz de mejorar ciertas ¨¢reas del cerebro que est¨¢n involucradas en las capacidades cognitivas. Vemos que aumenta su memoria de trabajo, la atenci¨®n sostenida y la velocidad de pensamiento¡±, explica Javier M¨ªnguez, cofundador de Bitbrain, en un v¨ªdeo donde cuenta el proyecto.
Para alcanzar estos objetivos, los jugadores aprenden qu¨¦ ¨¢reas del cerebro tienen que estimular. Se colocan una diadema que lee sus ondas cerebrales y las traslada a un ordenador. Mientras, tienen una pantalla delante donde est¨¢n viendo un cuadrado que se pone en rojo cuando est¨¢n concentrados y en azul cuando sus pensamientos se dispersan. Podr¨ªa decirse que pueden cambiar el color del cuadrado con la mente, pero no al pensar en rojo o azul, sino al concentrarse o desconcentrarse.
En este caso, la interfaz cerebro-m¨¢quina lee y descifra la informaci¨®n encriptada en nuestras ondas cerebrales y, al darnos feedback sobre c¨®mo estamos utilizando el cerebro, podemos aprender a reforzar las conexiones que queramos mejorar. ¡°No necesitas estimular el cerebro insertando un dispositivo, eres t¨² mismo quien, a base de entrenar, est¨¢s fortaleciendo las conexiones que te interesan¡±, explica L¨®pez. Esta forma de desarrollar habilidades mentales se basa en la plasticidad, es decir, en la idea de que el cerebro refuerza las conexiones que m¨¢s se utilizan.
Pero hay otra forma de hacerlo: se puede escribir informaci¨®n nueva en nuestras neuronas y mejorar las habilidades que elijamos mediante una orden que el ordenador env¨ªa a los microchips que los usuarios tienen implantados. Es decir, adem¨¢s de leer el cerebro, tambi¨¦n se puede escribir en ¨¦l.
Escribir en el cerebro
El ordenador puede enviar se?ales a los chips que, al estar en contacto con las ondas cerebrales, pueden modificarlas para alterarlas o reajustarlas. ¡°Es una de las l¨ªneas de investigaci¨®n m¨¢s innovadoras, pero tambi¨¦n es la m¨¢s lejana. Al estimular esas ondas cerebrales, corres el riesgo de alterar otras se?ales cercanas¡±, explica Mar¨ªa L¨®pez, CEO de Bitbrain.
Los proyectos m¨¢s ambiciosos en este sentido proponen implantar chips microsc¨®picos que, a d¨ªa de hoy, se est¨¢n dise?ando para tratar enfermedades pero que tambi¨¦n podr¨ªan utilizarse para mejorar capacidades. ¡°Ahora mismo, hay interfaces cerebro-m¨¢quina focalizadas a la recuperaci¨®n de memoria de pacientes con problemas neurol¨®gicos, pero tambi¨¦n se podr¨ªa aumentar la memoria de los usuarios que no tengan problemas¡±, explica Jos¨¦ Carmena, cofundador de la californiana Iota Biosciences y uno de los creadores del polvo neuronal, unos implantes inal¨¢mbricos que pueden monitorizar m¨²sculos, ¨®rganos y nervios en las profundidades del cuerpo.
Uno de los avances m¨¢s novedosos que destaca Carmena en el uso de esta tecnolog¨ªa es escribir sensaciones en el cerebro que la persona no est¨¢ sintiendo. Por ejemplo, es ¨²til en un paciente que est¨¢ aprendiendo a manejar un brazo rob¨®tico y quiere sentir a trav¨¦s del brazo. En ese caso, se tiene que hacer de forma artificial: consiste en codificar esa informaci¨®n en las neuronas, escribir esa sensaci¨®n en el cerebro.
Esta tecnolog¨ªa avanzada ya se est¨¢ aplicando en animales. ¡°En ratones no solo se est¨¢n descifrando neurodatos e interpretando, por ejemplo, su percepci¨®n visual, sino que se est¨¢ manipulando. Los investigadores hacen que vean cosas que no est¨¢n viendo, alterando sus ondas cerebrales¡±, explica Rafael Yuste, promotor del proyecto internacional BRAIN y catedr¨¢tico de la Universidad de Columbia, que est¨¢ en contacto con expertos de todo el mundo que lideran la investigaci¨®n en neurotecnolog¨ªa.
Apetito empresarial
Estos avances han llamado la atenci¨®n de las grandes tecnol¨®gicas, que en los ¨²ltimos a?os se han lanzado a desarrollar herramientas basadas en interfaces cerebro-m¨¢quina. Destacada entre ellas Neuralink, fundada por Elon Musk, que busca aumentar las capacidades de los usuarios al implantar hilos microsc¨®picos en el cerebro que permitan comunicar distintas ¨¢reas entre ellas y con el exterior mediante inteligencia artificial.
¡°En el ¨²ltimo a?o, compa?¨ªas como Facebook y Microsoft est¨¢n invirtiendo cada una 1.000 millones de d¨®lares en esta tecnolog¨ªa¡±, asegura Yuste. Ahora mismo el proyecto m¨¢s avanzado es el de la compa?¨ªa de Mark Zuckerberg. Lo llaman thought to text [de pensamiento a texto] y utiliza un dispositivo que permite escribir sin teclear. ¡°La idea es que el iPhone acabe siendo una interfaz cerebro-computadora no invasiva. Podr¨¢s comunicarte con la red tanto para enviar datos como para recibirlos utilizando solo tu actividad cerebral¡±.
Glosario
Interfaces cerebro-m¨¢quina. Dispositivos que recogen informaci¨®n minuciosa de las ondas cerebrales y la env¨ªan a un ordenador, que procesa e interpreta los datos. Tambi¨¦n puede funcionar en el sentido opuesto: el ordenador puede enviar se?ales a los dispositivos que, al estar en contacto con las ondas cerebrales, pueden modificarlas para alterarlas o reajustarlas.
Bioelectr¨®nica. Disciplina que se encarga de estudiar c¨®mo se pueden utilizar se?ales electr¨®nicas para estimular el sistema nervioso y curar enfermedades. Es la base sobre la que se sustentan las interfaces cerebro-m¨¢quina.
Plasticidad cerebral. Es la capacidad que tiene el cerebro para reorganizarse y adaptarse a los cambios funcionales y estructurales. Cuando dejamos de utilizar una serie de conexiones (por ejemplo, si hace mucho que no hacemos una divisi¨®n con decimales), el cerebro entiende que no es una informaci¨®n relevante para nosotros y utilizar¨¢ esas redes neuronales para que podamos aprender otra cosa.
Electroencefalograma. Se trata de un estudio que detecta la actividad el¨¦ctrica del cerebro. Para ello, se fijan unos electrodos sobre el cuero cabelludo que son capaces de leer los impulsos nerviosos que se transmiten entre neuronas. Esta informaci¨®n puede servir para detectar irregularidades en las ondas cerebrales e, incluso, con la tecnolog¨ªa adecuada, para llegar a descifrar pensamientos.
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