La sororidad de la sauna de humo: confesiones femeninas bajo el vapor para uno de los fen¨®menos cinematogr¨¢ficos del a?o
Hablamos con Anna Hints, la directora de uno de los documentales m¨¢s impactantes del a?o, que llega este viernes a las pantallas espa?olas
La sauna de humo es una antigua tradici¨®n entre las mujeres finlandesas que tambi¨¦n lo es el pa¨ªs de la estonia Anna Hints. La directora de cine se busc¨® la forma de meter dentro de algunas de ellas un equipo de grabaci¨®n capaz de resistir las altas temperaturas y desvelar as¨ª las vivencias que transcurren en el interior de esas caba?as de madera en medio del bosque y que ella tantas veces ha experimentado, primero con sus familiares y luego con sus amigas. Durante siete a?os, registr¨® para su primer largometraje la sororidad que se genera entre conocidas e incluso desconocidas en la intimidad de estos lugares, en los que la desnudez femenina no cumple ninguna norma.
Mientras los poros de su piel se abr¨ªan y eliminaban toxinas, esas mujeres purgaban entre penumbras sus traumas y sanaban heridas con una espontaneidad pocas veces vista en pantalla. Es algo que no mencion¨® la Unesco cuando incluy¨® este ritual en su Lista Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad. Smoke Sauna Sisterhood, que en Espa?a se titula simplemente Sauna, es un fen¨®meno cinematogr¨¢fico global como nunca se ha visto en la industria de un pa¨ªs de apenas 1,3 millones de habitantes.
Hace justo un a?o, Hints se llev¨® por este trabajo el premio a mejor directora en Sundance. Desde entonces, ha pasado por cert¨¢menes de todo el mundo, del festival de cine de Z¨²rich al renacido Mumbai Film Festival (que ha impulsado la actriz y activista Priyanka Chopra). En diciembre, triunf¨® en los premios del cine europeo en Berl¨ªn con el galard¨®n a mejor documental y cerraba el c¨ªrculo como representante de Estonia al Oscar en la categor¨ªa de mejor pel¨ªcula de habla no inglesa, aunque finalmente no ha logrado la nominaci¨®n. Smoke Sauna Sisterhood puede verse en salas espa?olas a partir de este viernes 26 de septiembre y estar¨¢ disponible en el cat¨¢logo de Filmin desde el 8 de marzo.
La visita a una de estas saunas que m¨¢s marc¨® a Hints ocurri¨® durante su infancia. Ten¨ªa 11 a?os y acababa de morir su abuelo. Acudi¨® con su abuela, su t¨ªa y su sobrina a una de ellas y presenci¨® c¨®mo la viuda expulsaba por vez primera la ira que le hab¨ªa provocado un matrimonio lleno de infidelidades. Durante a?os, ¨¦l abandon¨® el hogar familiar para vivir con otra mujer y ella tuve que sacar adelante a cuatro hijos en los momentos m¨¢s crudos de la era sovi¨¦tica. Pero esa explosi¨®n de sinceridad, en vez de resultarle inoportuna, le permiti¨® hacer las paces con su marido justo antes de despedirse de ¨¦l en su entierro, explica ahora su nieta.
¡°Ese ritual es parte de mi cultura, mi idea era mostrar a mi propio entorno, pero en estos siete a?os fuimos encontrando a otras mujeres que quer¨ªan participar, y esa comunidad femenina comenz¨® a agrandarse¡±, recuerda Hints durante la presentaci¨®n de la pel¨ªcula en Z¨²rich (Suiza). Tiene una teor¨ªa de por qu¨¦ su relato ha conmovido a tantos espectadores. ¡°Muchas de ellas eran mujeres que no conoc¨ªa. Tuve que construir poco a poco, con el tiempo, una confianza que no ten¨ªa y que termin¨® siendo muy cercana. Eso trasciende la pantalla¡±, barrunta la cineasta.
Patriarcado perpetuado por mujeres
Confiesa que quer¨ªa hacer una pel¨ªcula que no recordara a otras pel¨ªculas anteriores. Esa intenci¨®n, la misma que hizo que tantos productores no se decidieran a apoyar la pel¨ªcula en sus inicios, es la que luego convenci¨® al jurado de Sundance. ¡°Son historias de patriarcado que rara vez hemos visto mostradas de esta forma y que se combinan con belleza cinematogr¨¢fica, humor, sabidur¨ªa y una refrescante autoconciencia¡±, argumentaron sus miembros al premiar a Hints. Aunque, a medida que transcurre el documental, las confesiones de sus protagonistas desvelan que han sido principalmente otras mujeres las que han perpetuado en ellas las reglas de ese patriarcado.
A lo largo de la hora y media que dura Smoke Sauna Sisterhood se suceden las confesiones en torno a sus embarazos, sus partos (tambi¨¦n sus abortos), la relaci¨®n con su cuerpo y la forma en la que les agrede enfermedades como el c¨¢ncer. Para ser cercana pero no invasiva, para que la c¨¢mara no robara naturalidad, y las palabras resultaran espont¨¢neas, la directora rompi¨® cualquier contrato previo de derechos de imagen con esas mujeres. Sab¨ªan que solo iban a aparecen en el montaje final las que, despu¨¦s de grabar, mantuvieran su deseo de formar parte del documental. Ninguna se retract¨® tras ver el resultado final de esas grabaciones, asegura la cineasta.
La propia Hints se desnud¨® para compartir algunos de esos momentos de proximidad, risas y vulnerabilidad compartida. Relat¨® uno de los testimonios m¨¢s impactantes de toda la pel¨ªcula, recordando la violaci¨®n que sufri¨® en su juventud. Hasta ese momento, no hab¨ªa tenido la oportunidad de ser plenamente escuchada, admite la directora. Vivi¨® ese momento de revelaci¨®n ocultando su rostro ante su propia c¨¢mara, por la sensaci¨®n de verg¨¹enza que, a?os despu¨¦s, sigue sintiendo.
A pesar de haber sido siempre parte de su vida, a la cineasta estonia no se le ocurri¨® que esos encuentros femeninos en saunas de vapor pod¨ªan ser el objeto de su primera pel¨ªcula hasta que vivi¨® justo la experiencia contraria. No pudo soportar el voto de silencio durante un largo retiro espiritual en un monasterio budista al que acudi¨® con su madre, con la que ha mantenido en el pasado una relaci¨®n que califica como turbulenta. ¡°No fue una experiencia que disfrutara. Me di cuenta de lo importante que es tener voz y que esa voz sea tenida en cuenta¡±, concluye.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.