?Es la grasa una inversi¨®n de futuro?

Parec¨ªa imposible. La promesa de eterna juventud ha encontrado una nueva esperanza en el lugar m¨¢s insospechado: las c¨¦lulas grasas. Lo que antes constitu¨ªa un enemigo indeseable para conseguir el cuerpo perfecto se ha transformado en una fuente de belleza que merece la pena atesorar. Bajo esta premisa han nacido los bancos de grasa: una especie de cuenta de ahorros donde es posible guardar el tejido adiposo para utilizarlo en un futuro, cuando los estragos del paso del tiempo hagan su inevitable aparici¨®n.?

Hasta ahora, la grasa constitu¨ªa solamente un material m¨¢s de relleno, id¨®neo en procedimientos de rejuvenecimiento facial ¨Cuna alternativa a los productos sint¨¦ticos inyectables como el ¨¢cido hialur¨®nico¨C, capaz de devolver el volumen, mejorar el tono de la piel y recuperar el aspecto tridimensional de un rostro joven. Su papel en el mundo de la cirug¨ªa est¨¦tica gan¨® protagonismo al aplicarse en el aumento de pecho o en la correcci¨®n de defectos de volumen y cicatrizaci¨®n ¨Cpor ejemplo, tras un tratamiento oncol¨®gico¨C. Pero el renovado inter¨¦s por la grasa como fuente de juventud lleg¨® con el descubrimiento de su potencial biol¨®gico. ?La importancia del tejido adiposo es que en ¨¦l se concentra un mayor n¨²mero de c¨¦lulas madre y adem¨¢s es m¨¢s f¨¢cil extraerlas?, explica el doctor Jes¨²s Benito, cofundador de la Sociedad Espa?ola de Transplantes de Grasa (Setgra). El uso de las c¨¦lulas madre se inici¨® en la medicina reconstructiva. ?Desde hace varios a?os las investigaciones en este campo est¨¢n enfocadas hacia su potencial para regenerar tejidos y curar enfermedades?, como el Alzheimer, la diabetes, la artritis e, incluso, ciertos tipos de c¨¢nceres, afirma el doctor Jorge Planas, cirujano y director de Cl¨ªnica Planas.?

Hoy, las aplicaciones est¨¦ticas de las c¨¦lulas madre han abierto una nueva puerta en la lucha contra el reloj. La principal diferencia entre las destinadas a un uso est¨¦tico y las que se utilizan en medicina regenerativa es que las primeras no requieren ning¨²n tipo de manipulaci¨®n, por lo que se eliminan los problemas ¨¦ticos e inmunol¨®gicos. De hecho, el Comit¨¦ de Cirug¨ªa Pl¨¢stica Mundial y las principales autoridades sanitarias de Europa y Estados Unidos fomentan el uso de c¨¦lulas madre a nivel est¨¦tico, una conclusi¨®n que comparte el doctor Roger Amar, cirujano franc¨¦s y miembro del Centro Europeo de Cirug¨ªa Est¨¦tica, al afirmar que ?el uso de grasa enriquecida con c¨¦lulas madre adultas purificadas ser¨¢ el eje del futuro en la cirug¨ªa de rejuvenecimiento?. Lo que permite que la grasa se convierta en la ¨²ltima arma antiedad es ?su potencial no solo como relleno, sino, sobre todo, las caracter¨ªsticas regenerativas de las c¨¦lulas madre?, comenta el doctor Benito.?

La t¨¦cnica que se utiliza para exprimir al m¨¢ximo este potencial se conoce como Celution: la grasa obtenida se divide en dos partes. Una se utiliza para conseguir las c¨¦lulas madre y otra se procesa para purificarla. Al mezclarse de nuevo, se logra grasa enriquecida con c¨¦lulas madre. Capaces de mejorar la calidad del col¨¢geno y la formaci¨®n de vasos sangu¨ªneos en condiciones adversas, estas c¨¦lulas ayudan al tejido adiposo a aumentar su volumen y aferrarse al tejido en el que se inyectan.?

Su principal virtud es la generosa concentraci¨®n de c¨¦lulas madre, 500 veces mayor a la que encontramos en la m¨¦dula ¨®sea. Otra gran ventaja es que se puede obtener con facilidad y de forma inmediata. La m¨¢s sencilla: aprovechando una liposucci¨®n. El procedimiento es el mismo, ?pero con el valor a?adido de que parte de la grasa que se extrae se env¨ªa a un laboratorio para aislar las c¨¦lulas madre, que se cultivar¨¢n y conservar¨¢n en un banco de tejidos privado?, explica el doctor Planas.?

Si bien es cierto que hoy los m¨¦dicos no recomiendan someterse a una liposucci¨®n con el ¨²nico objetivo de almacenar la grasa, esta tendencia est¨¢ ganando adeptos y hoy existen otros m¨¦todos menos invasivos para beneficiarse de los avances de la cirug¨ªa. Cryo-Lip es uno de ellos. Se trata de una divisi¨®n nacida de Cryo-Save, el principal banco de c¨¦lulas madre en Europa, con m¨¢s de 11 a?os de experiencia e instalaciones en Estados Unidos, B¨¦lgica, Alemania, Dub¨¢i y la India. Ofrece la posibilidad de obtener la cantidad suficiente de tejido adiposo (entre 30 y 60 milil¨ªtros, el volumen de una lata de Coca-Cola) en una intervenci¨®n ambulatoria de apenas 15 minutos y con anestesia local.?

El proceso es tan sencillo que parece ciencia ficci¨®n: las c¨¦lulas grasas se extraen con un mecanismo especial denominado LipiVage, una jeringa patentada que aspira y filtra la grasa en un ¨²nico procedimiento. As¨ª, se obtiene grasa purificada, que luego se almacena en un dispositivo est¨¦ril, y se desecha el resto. El procedimiento dura poco m¨¢s de un minuto y medio: ?Un minuto para extraer, 10 segundos para filtrar y 30 segundos para almacenar el lipoaspirado en un dispositivo llamado Cryobag, que se transporta al banco de c¨¦lulas madre?, explican en la Cl¨ªnica Menorca, una de las pioneras. Una vez que la muestra llega a los laboratorios, se le asigna un c¨®digo de identificaci¨®n (una especie de DNI ¨²nico y personal) y se conservan en un tanque de tr¨¢nsito a -196 ?C. Despu¨¦s de pasar unos exhaustivos controles de calidad, se llevan a la caja fuerte: un dep¨®sito de alta seguridad con vapor de nitr¨®geno l¨ªquido. ?La criopreservaci¨®n conservar¨¢ las c¨¦lulas durante a?os, y se puede recuperar hasta el 80% de las mismas?, explica el doctor Planas. El precio por congelar el tiempo: entre 990 y 1.800 euros por la extracci¨®n, el traslado al laboratorio y el almacenamiento durante el primer a?o, y una cuota de conservaci¨®n anual de entre 100 y 150 euros.?

Lo que no se ha definido es el tiempo m¨¢ximo que una muestra de c¨¦lulas madre puede preservarse y garantizar beneficios, pero los bancos de grasa recomiendan no esperar demasiado para abrir una cuenta. En Cryo-Lip explican que, ?en principio, la edad no incide y la regeneraci¨®n celular se consigue con c¨¦lulas madre de grasa aut¨®loga a cualquier edad. Aunque, si se trata de una persona de menos de 40 a?os, las c¨¦lulas siempre estar¨¢n en mejor estado?.?

Pero, ?realmente merece la pena atesorar la grasa en un dep¨®sito durante a?os o es preferible utilizarla en el mismo momento de su extracci¨®n? La respuesta queda en el aire y los m¨¦dicos no se pronuncian. Prefieren dejar esa decisi¨®n al cliente (y a su esp¨ªritu previsor).

Cuando el due?o de una de estas cuentas decida que ha llegado el momento de dar marcha atr¨¢s a las agujas del reloj ¨Choy o dentro de 20 a?os¨C, el banco de grasa se encarga de recuperar la cantidad necesaria y enviarla a la cl¨ªnica, ?lista para usar?. Los resultados inmediatos saltan a la vista: tras ser inyectada, la grasa proporciona un efecto de volumen. Pero los beneficios a largo plazo constituyen el gran gancho: las c¨¦lulas madre mejoran la circulaci¨®n sangu¨ªnea e impulsan la creaci¨®n de col¨¢geno. Los incentivos para empezar a ahorrar nunca hab¨ªan sido tan interesantes.