La era de la ciberbelleza ya est¨¢ aqu¨ª
Las nuevas tecnolog¨ªas revolucionan las estrategias de venta de las tiendas de cosm¨¦ticos. La interactividad fideliza y convierte la compra en otra experiencia.
El infinite commerce (comercio infinito en belleza) ha llegado a Espa?a. La expresi¨®n hace referencia a una forma de consumo basada en las nuevas tecnolog¨ªas, cuyo objetivo es ofrecer un servicio m¨¢s completo y personalizado, tanto en el espacio f¨ªsico como en la Red. ?El mercado se est¨¢ transformando?, explica Javier Celaya, socio de Dosdoce.com y experto en Internet. ?Espa?a es el segundo pa¨ªs europeo en el uso de tel¨¦fonos inteligentes, y solo los utilizamos para hablar en un 20%. Vivimos una evoluci¨®n en el uso de las aplicaciones y las tiendas quieren enriquecer la experiencia de compra, facilitar que el cliente descubra, compare, comparta¡?, a?ade.
Las redes sociales son los nuevos escaparates: un 61% de los consumidores espa?oles se informa as¨ª sobre productos y marcas y el 31% de los usuarios utiliza shopping apps. Seg¨²n un estudio del Aimia Institute, el 60% de los usuarios de smartphones en Estados Unidos hace b¨²squedas adicionales online mientras est¨¢ en la tienda. Esto, unido al creciente fen¨®meno de showrooming (mirar productos en el espacio real para luego comprarlos a mejor precio en el virtual), ha puesto el punto de mira en que el futuro del sector est¨¢ all¨¢ donde el consumidor se encuentra.
El espacio de L¡¯Or¨¦al Paris en Madrid se basa en la interactividad.
Mirta Rojo
Despu¨¦s de todo, aunque el comercio electr¨®nico en belleza est¨¦ creciendo (un 30% respecto al 6% de las ventas generales), un 71,7% de los clientes a¨²n prefiere comprar en las tiendas de siempre. ?La naturaleza del consejero de belleza cambiar¨¢, pero la experiencia humana es importante?, afirma Katherine Voyten, de Procter & Gamble.?
Asia, a la cabeza. Corea y Jap¨®n llevan la delantera. En 2011 Shiseido abri¨® en Tokio un espectacular espacio (The Ginza) de 825 metros cuadrados donde las clientas dispon¨ªan de aplicaciones virtuales para determinar el maquillaje m¨¢s adecuado para su piel. Hoy cuentan con Realtime Makeup Simulator, el primer dispositivo del mercado a nivel mundial que trabaja sobre la imagen en movimiento, a modo de espejo, y en tiempo real.
Mary Kay es una de las firmas que apuestan por las aplicaciones para el m¨®vil.
D.R.
El a?o pasado L¡¯Or¨¦al Paris lanz¨® en China una versi¨®n de su aplicaci¨®n Skin Genius, que, a partir de una foto y teniendo en cuenta datos como la humedad, el estado de ¨¢nimo o los cigarrillos fumados, propone un ritual de cuidados. El nuevo local que acaba de abrir en Madrid ofrece, por ejemplo, la posibilidad de realizar una grabaci¨®n ¨Ca modo de tutorial¨C mientras un maquillador hace un look a la clienta, quien recibe el v¨ªdeo por Bluetooth. Otro experimento de la firma es una m¨¢quina expendedora en el metro de Nueva York que recomienda productos que combinen con el look de cada usuaria.?
Otro ejemplo: la tienda Burberry Beauty Box, que abri¨® en Covent Garden (Londres), ha cambiado las cajas registradoras por iPads y iPhones. Entre sus alicientes, una pasarela virtual de u?as y la posibilidad de adquirir?online?los productos usados en la London Fashion Week.
Burberry Beauty Box, en Londres.
Dan Medhurst
?Qu¨¦ ser¨¢ lo pr¨®ximo? ?Queda mucho por ver. En los almacenes Neiman Marcus (EE?UU) ya tienen dispositivos inteligentes que gu¨ªan al cliente seg¨²n sus necesidades?, explica Celaya. Si en 2010 Sephora present¨® un prototipo de tienda inspirada en la pel¨ªcula?Minority Report, ?hoy, con una tarjeta de fidelidad y la aplicaci¨®n MySephora, los clientes acceden a una lista de productos seg¨²n su historial?, dice Elizabeth Angl¨¨s d¡¯Auriac, directora de Marketing europeo de Sephora. En el futuro, solo necesitar¨¢n pasar con la tarjeta en el bolsillo para que un holograma se lo ofrezca.
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