Si todas depilan igual, ?por qu¨¦ son mucho m¨¢s baratas las de hombres? Las verdaderas diferencias entre las cuchillas masculinas y femeninas

Si una se para un momento frente al expositor de cuchillas de afeitado en el supermercado podr¨ªa llegar a varias conclusiones: la primera, que el rasurado masculino es alg¨²n tipo de acto heroico (los mensajes que se repiten son de lo m¨¢s ¨¦picos y muy tecnol¨®gicos). La segunda, que la depilaci¨®n femenina es una cuesti¨®n de diosas griegas y escapadas tropicales. Quiz¨¢, tambi¨¦n, de mejores bolsillos, porque tal y como ya denunci¨® Facua en un estudio de 2018, el caso de las maquinillas de afeitar es uno de los m¨¢s ¡°claros y descarados¡± de la tasa rosa -esa disparidad de precios en la versi¨®n femenina de un producto cuando no hay diferencias t¨¦cnicas con la masculina-. Despu¨¦s de estudiar siete marcas muy populares conclu¨ªan que ¡°las maquinillas de afeitar ?para mujeres? son id¨¦nticas al resto pero hasta un 171% m¨¢s caras¡±. Gillette y Wilkinson eran las dos ¨²nicas que no incrementaban su precio en sus variantes femeninas y las peor paradas eran las de marca blanca. Esta distancia parece ser hoy m¨¢s corta (Carrefour las vende casi al mismo precio, aunque sigue existiendo un c¨¦ntimo de diferencia) pero no ha desaparecido en muchas otras. Algunas la integran de manera m¨¢s sutil, tras descuentos de 3¡Á2 que solo aplican a las azules (como ocurre en la marca Cosmia de Alcampo, y otras de forma m¨¢s visible, con el mismo producto con variaciones de hasta 20 c¨¦ntimos (en las de Dia). Precios aparte, si todas las cuchillas son cuchillas y sirven para lo mismo, una puede preguntarse si de verdad existen diferencias t¨¦cnicas entre las azules y las rosas, y en caso de haberlas, si de verdad las necesitamos.

Resulta curioso que un producto tan antiguo como una hoja de afeitar adherida a un mango sea un negocio al alza, pero las cifras indican que las ventas de maquinillas desechables no paran de crecer, aceleradas por la pandemia de la COVID, que ha reavivado los rituales de cuidado personal en casa. Fue hace 122 a?os, en 1900, cuando King C. Gillette tuvo la revolucionaria idea de crear maquinillas desechables tan delgadas y fuertes que los cient¨ªficos del instituto MIT las consideraron imposibles de forjar. Un a?o despu¨¦s cre¨® la primera hoja de afeitar de doble filo capaz de ofrecer las ventajas de una barber¨ªa sin salir de casa y en 1920 la convirti¨® en el primer instrumento de precisi¨®n del afeitado dom¨¦stico, con mayor precisi¨®n en el ¨¢ngulo de la hoja, un agarre mejor y los ajustes de apertura y cierre. Se convirti¨® en la marca de rasurado m¨¢s famosa del mundo, que hoy sigue siendo l¨ªder en pa¨ªses como EE.UU. Sin embargo, la primera cuchilla desechable femenina tard¨® 100 a?os m¨¢s en aparecer: Venus se lanz¨® en el a?o 2001 como la primera maquinilla dise?ada espec¨ªficamente ¡°para las necesidades de depilaci¨®n de la mujer¡±, cuentan en la marca. Pero, ?son de verdad diferentes, y m¨¢s a¨²n, necesit¨¢bamos una para cada g¨¦nero?

No, no son iguales (dicen en Gilette)

¡°Las maquinillas no son iguales¡±, aclaran desde el departamento de prensa de Gillette en Espa?a, cuyo trabajo, no lo olvidemos, es defender las bondades de su? producto. ¡°Las de hombre est¨¢n dise?adas normalmente para afeitarse el vello facial, pero las de las mujeres pueden depilar una superficie de hasta 10 veces m¨¢s grande: piernas, axilas e ingles¡±. ?Qui¨¦n dice, sin embargo, que los hombres hoy no se depilen tambi¨¦n el pecho o las piernas? Un estudio de Philips (otra de las grandes marcas de la industria del bello) aseguraba ya en 2015 que el 53% de los hombres y el 69% de las mujeres creen que ¡°cualquier tipo de vello corporal es muy desagradable en la playa y la piscina¡±. Hay diferencias, tambi¨¦n, en la forma: los cabezales de Venus de Gillette son ovalados en lugar de ser cuadrados para depilar f¨¢cilmente las zonas m¨¢s estrechas y cuentan con un mango dise?ado para poder agarrarlo desde varias posiciones, algo que sucede con la depilaci¨®n corporal. Mientras tanto, las masculinas incluyen hasta cinco hojas para afeitados muy apurados o recortadoras de patillas. Eso s¨ª, las maquinillas, sin importar el g¨¦nero, parecen estar arrim¨¢ndose al cuidado de la piel: las femeninas incluyen barritas de gel con ingredientes que aportan lubricaci¨®n e hidrataci¨®n, y la marca est¨¢ a punto de comercializar para el p¨²blico masculino la primera maquinilla que combina la exfoliaci¨®n y el afeitado.

Si la pregunta es si necesit¨¢bamos esas diferencias segregadas por g¨¦nero, la respuesta solo la puede dar el consumidor. Lo que s¨ª es una realidad es que ahora mismo las maquinillas desechables siguen siendo un gran negocio (se prev¨¦ que alcance los 4310 millones de d¨®lares para 2027, seg¨²n Fortune Business Insights) y que esto coexiste con un fen¨®meno en crecimiento: la ola de cambio que est¨¢ transformando la industria de la belleza hacia valores m¨¢s inclusivos y m¨¢s respetuosos con el medio ambiente ha llegado tambi¨¦n a este sector.

Consultamos a un experto en dise?o. I?aki Remiro es dise?ador, educador y Head of Strategy en ANIMA Design, y ha trabajado en el dise?o de productos diferenciados para hombres y mujeres. Cuando hablamos de cuchillas, resume, se les suelen dirigir mensajes de seguridad, higiene y ergonom¨ªa (m¨¢s enfocados a las sensaciones), mientras que a los hombres se les ofrece durabilidad y eficacia en el apurado (conceptos m¨¢s pr¨¢cticos). Sin embargo, tal y como apunta Remiro, motivos como los cambios sociales o la optimizaci¨®n de costes y recursos est¨¢n alimentando una tendencia hacia productos ¡°unisex¡± o ¡°genderless¡±. Marcas como la sueca Estrid o la finlandesa Basik est¨¢n lanzando maquinillas neutras, alejadas de los estereotipos de g¨¦nero cl¨¢sicos (y por supuesto del azul y rosa) y con materiales m¨¢s verdes, afianzando la neutralidad de g¨¦nero como un valor de igualdad y sostenibilidad. Sus cuchillas minimalistas en tonos piedra o pastel, que parecen un objeto de arte, se apoyan en la tesis de que si el dise?o ayuda a forjar realidades, el de g¨¦nero neutro da respuesta a la diversidad de la sociedad. ¡°Son claros ejemplos de esa tendencia y de como acercar propuestas de valor en torno a la igualdad, a lo respetuoso con el entorno y las personas, a la democratizaci¨®n de nuevos productos¡±, apunta I?aki Remiro. Es evidente que estas marcas se dirigen a un p¨²blico millennial y de Generaci¨®n Z: ¡°Me parece una tendencia l¨®gica ya que el dise?o responde a los anhelos y comportamientos de los usuarios, y creo que en muchas verticales (en ciertos productos de consumo) ha llegado para quedarse, o as¨ª lo espero. Y en efecto responde a que somos personas, iguales, y eso permite una magn¨ªfica oportunidad para las marcas en la optimizaci¨®n de costes y de empujar a encontrar soluciones circulares que ayudan al modelo de negocio a trav¨¦s del dise?o de producto. Los consumidores buscan productos que satisfagan sus necesidades, no productos que los obliguen a asumir roles de g¨¦nero tradicionales¡±.

Distinto g¨¦nero, mismas preocupaciones

Cuando hablamos de rasurado una de las cuestiones m¨¢s repetidas en consulta dermatol¨®gica es compartida entre hombres y mujeres: por qu¨¦ en ciertas zonas, despu¨¦s de pasar la cuchilla, pueden salir pelos enquistados. En el Instituto de Dermatolog¨ªa Avanzada (IDERMA) la doctora Raquel Andreu, especialista en Medicina Est¨¦tica y coordinadora de la Plataforma L¨¢ser de IDERMA y servicio de Dermatolog¨ªa del Hospital Universitario Dexeus de Barcelona, explica que ¡°muy probablemente se trate de?una foliculitis cr¨®nica. La foliculitis suele ocurrir cuando el pelo no puede romper la barrera de la epidermis (la capa m¨¢s superficial de la piel) y no consigue salir a la superficie. Esta situaci¨®n puede dar lugar a la inflamaci¨®n de uno o varios fol¨ªculos pilosos. Con mucha frecuencia este problema se asocia a m¨¦todos de depilaci¨®n como cera o afeitado con cuchilla, pero tambi¨¦n se dan algunos casos en los que la foliculitis se produce de manera natural. Si tienes este problema, mi consejo es que te plantees depilarte con l¨¢ser la zona, para poderlo solucionar de forma definitiva y no tengas que afrontar m¨¢s inflamaciones y posibles cirug¨ªas de la zona¡±.

En Dexeus la describen como ¡°la aparici¨®n de unos puntos rojos, bultos o granitos que surgen a posteriori. Se deben a una inflamaci¨®n de los fol¨ªculos pilosos, que son ¨Cpor explicarlo de forma sencilla¨C los orificios por los que crece el pelo. La piel se siente agredida por la extracci¨®n del vello y reacciona provocando la inflamaci¨®n. Este problema afecta sobre todo a mujeres de entre 20 y 30 a?os o con la piel sensible. Es m¨¢s frecuente que aparezca en las axilas o las ingles, y en el caso de los chicos en la barba¡±. Aseguran que en general, si la reacci¨®n es leve, los puntos suelen desaparecer al cabo de unas horas, pero si no es as¨ª, se deber¨ªa recurrir a un/a dermat¨®logo/a, ¡°ya que adem¨¢s de ser doloroso, molesto y poco est¨¦tico, si no se trata puede aparecer una infecci¨®n (granitos con pus) y agravarse¡±. Y ofrecen cinco consejos pr¨¢cticos para evitar este problema: si te depilas con cuchilla, evitar rasurar a contrapelo (en direcci¨®n contraria a la que crece el cabello) o apurar en exceso. Antes de depilarte, aconsejan lavar bien la zona de la piel que vas a depilar con un jab¨®n antis¨¦ptico y, al acabar, aplicar una loci¨®n fluida de acci¨®n calmante. Tambi¨¦n recomiendan utilizar ropa holgada que permita la transpiraci¨®n de la piel despu¨¦s del rasurado y lavar las cuchillas con abundante agua tibia siempre tras su uso, no compartirlas y renovarlas con frecuencia. En este art¨ªculo publicado en?El Pa¨ªs, la doctora Virginia S¨¢nchez Garc¨ªa, jefe del servicio de Dermatolog¨ªa del Hospital Universitario Sanchinarro, nos desvela las meteduras de pata m¨¢s comunes: pasarla en seco (¡°Antes de deslizar la cuchilla es muy importante aplicar una capa de alg¨²n producto espec¨ªfico para depilaci¨®n. Los m¨¢s recomendables son aquellos en forma de gel, ya que se introducen en las irregularidades microsc¨®picas de la piel para crear una capa homog¨¦nea que evite cortes¡±), apurar demasiado (¡°Si la piel es sensible o est¨¢ m¨¢s seca de lo normal, se irritar¨¢ con facilidad, apareciendo erosiones o infecciones cut¨¢neas secundarias. Es m¨¢s seguro utilizar una cuchilla de alta calidad de 4 hojas, y ejercer una presi¨®n suave del cabezal contra la dermis¡±), ignorar la calidad del artefacto (¡°Adem¨¢s de las 4 hojas para una presi¨®n suave, es recomendable que la cuchilla tenga una cinta humectante en el cabezal, porque as¨ª el gel brotar¨¢ por s¨ª solo. No hay que olvidar lavarlas y secarlas despu¨¦s de cada uso. Se deben retirar y cambiar cuando pierden el filo¡±) y compartir (Las cuchillas no se deben compartir nunca, porque al producir microtraumatismos en la piel existe riesgo de transmisi¨®n de enfermedades de car¨¢cter infeccioso). Todos estos consejos no tienen g¨¦nero.

A la depilaci¨®n con cuchilla le persiguen muchos mitos muy extendidos, como que el pelo que nace es m¨¢s grueso, que el Instituto M¨¦dico L¨¢ser de Madrid aclara en un art¨ªculo certificado por Dra. Josefina Royo de la Torre: ¡°El principal falso mito sobre depilarse con cuchilla es que el pelo crece m¨¢s fuerte. Esta aseveraci¨®n, a pesar de estar muy extendida, es totalmente incorrecta¡± y, explican, ¡°el pelo no presenta el mismo grosor desde su base hasta la punta: en la ra¨ªz es mucho m¨¢s grueso y en la punta mucho m¨¢s fino. Cuando rasuramos cortamos la punta, la zona m¨¢s fina del pelo. Esto provoca que al tacto percibamos un grosor mayor que cuando toc¨¢bamos la punta. Sin embargo, el calibre del pelo sigue siendo el mismo¡±.

¡°Otro de los falsos mitos de la depilaci¨®n con cuchilla es que se pierde el bronceado de la piel¡±, aseguran, pero ¡°el color de la piel bronceada es fruto de la activaci¨®n de la melanina, una sustancia marr¨®n que se localiza en la parte m¨¢s profunda de la epidermis.?La melanina no est¨¢, por tanto, al alcance la cuchilla¡±.

En lo que todos los dermat¨®logos coinciden es en la importancia de mantener las hojas de la cuchilla limpias y en buenas condiciones. ¡°El mejor indicativo de que es momento de cambiar las hojas es cuando est¨¢n desafiladas. Si se empieza a notar tirones, o que la piel se irrita m¨¢s de lo normal despu¨¦s de la depilaci¨®n, es hora de cambiarlas. La frecuencia para?cambiar las hojas?depende de la frecuencia del cambio de maquinilla o recambio, ¨C que a su vez depende, de la gen¨¦tica ya que la cantidad y la velocidad en la que crece el vello es una cuesti¨®n hormonal-¡°. Por eso, aunque desde Gilette aseguran que la mayor¨ªa de las mujeres consiguen su ¡°mejor depilaci¨®n¡± cambiando su cuchilla cada 1 o 2 semanas si se depilan diariamente, la frecuencia del cambio de hojas en realidad depende mucho de la gen¨¦tica y de si se trata de una maquinilla desechable o recargable: en este caso, para asegurar que la banda lubricante dure, recomiendan guardar la maquinilla mirando hacia arriba y siempre alejada de las superficies h¨²medas.

En cualquier caso, la revoluci¨®n social de lo inclusivo y los sofisticados dise?os que se ofrecen tanto en el extremo masculino como en el femenino redundan en lo que ya se sab¨ªa: la tasa rosa es completamente injustificada y aunque en las marcas blancas parezca en v¨ªas de desaparici¨®n se dan casos como el de?Alcampo (marca Cosmia) que ha igualado precios pero solo hace ofertas 3¡Á2 en su gama masculina, no en la femenina.