¡®Crisis fatigue¡¯ o c¨®mo un a?o repleto de malas noticias est¨¢ empezando a pasar factura a nuestro cuerpo
Psic¨®logos estadounidenses han acu?ado el t¨¦rmino ¡®fatiga por crisis¡¯ ante el crecimiento de pacientes que dicen sentirse emocionalmente sobrepasados ante la dura actualidad. Hablamos con dos expertas sobre sus s¨ªntomas y qu¨¦ hacer para que el miedo no nos paralice.
Deber¨ªamos retroceder varias d¨¦cadas para toparnos con una exposici¨®n tan intensa y prolongada de malas noticias. Con una crisis sanitaria sin precedentes y tres meses de confinamiento ya en nuestra mochila emocional, ahora somos testigos de una polarizaci¨®n pol¨ªtica cada vez m¨¢s acentuada, de ¨ªndices econ¨®micos que advierten su desplome, de episodios racistas y comercios saqueados, de vaticinios pesimistas de rebrote y grupos de WhatsApp transformados en trincheras vehementes. Una exposici¨®n a acontecimientos ambientales tan estresantes que ha multiplicado los casos de personas que dicen sentirse agotadas y emocionalmente sobrepasadas, con problemas para conciliar el sue?o y al borde de la ansiedad o la depresi¨®n. Un entumecimiento que psic¨®logos estadounidenses ya han bautizado como crisis fatigue, fatiga por crisis, y que podr¨ªa ser la respuesta de nuestro cuerpo a este ca¨®tico 2020.
¡°Tu cuerpo est¨¢ bien preparado para manejar situaciones de estr¨¦s temporal, pero est¨¢ desbordado ante las constantes e incansables presiones de este a?o¡±, sostiene Matt Simon en el art¨ªculo de la revista Wired que ha puesto nombre a este c¨²mulo de s¨ªntomas cada vez m¨¢s habitual. Este estr¨¦s prolongado se ha apoderado de nuestras vidas ante una incertidumbre sanitaria, pol¨ªtica, social y econ¨®mica como hace d¨¦cadas que no experiment¨¢bamos y, como explica Silvia Garc¨ªa Graullera, psic¨®loga y directora del centro Psicia, ¡°provoca que los mecanismos psicol¨®gicos adaptativos se vayan debilitando y que aparezca una sensaci¨®n de pesimismo, miedo al futuro y amenaza constante¡±.
Leire Villaumbrales, psic¨®loga y directora de los centros Alcea, confirma a S Moda que la recepci¨®n continuada de augurios pesimistas puede provocarnos un alto nivel de estr¨¦s. ¡°Cuando percibimos un peligro, nuestro hipot¨¢lamo, que controla el funcionamiento del sistema nervioso, reacciona activando en nuestro cuerpo un ¡®sistema de alarma¡¯, que incluye la secreci¨®n de una serie de hormonas. Dos de estas hormonas son la adrenalina y el cortisol, muy relacionadas con la sensaci¨®n de estr¨¦s, al incrementarse los latidos del coraz¨®n y la presi¨®n arterial¡±, a?ade. Irritabilidad, insomnio, tensi¨®n muscular, trastorno de la alimentaci¨®n, jaquecas o dificultad para mantener la concentraci¨®n pueden ser algunos de los problemas desencadenados por esta prolongada sensaci¨®n de peligro y la reacci¨®n bioqu¨ªmica corporal asociada. Esta reci¨¦n acu?ada ¡®fatiga por crisis¡¯ comparte s¨ªntomas con el conocido como ¡®s¨ªndrome de fatiga por compasi¨®n¡¯, habitual en sanitarios, trabajadores sociales, psic¨®logos o activistas.
En Espa?a, los efectos del clima sociopol¨ªtico y medi¨¢tico provocado por la pandemia y los meses de confinamiento ya deja notar sus estragos. Un grupo de psic¨®logos e investigadores de la Universidad Complutense de Madrid, apoyados por la Agencia Estatal de Investigaci¨®n, ha publicado un informe en el que confirman que uno de cada cinco espa?oles sufre s¨ªntomas de depresi¨®n y ansiedad desde que comenz¨® la crisis del coronavirus. Los menores de 45 a?os son el estrato demogr¨¢fico m¨¢s afectado. Tambi¨¦n en Estados Unidos, donde medios como The Washington Post ya han alertado sobre la crisis de salud mental que asola a su poblaci¨®n. ¡°Una oleada hist¨®rica de problemas entre los que se encuentran depresiones, abuso de sustancias, desordenes de estr¨¦s postraum¨¢tico y suicidios¡±, explican.
Villaumbrales admite que en los ¨²ltimos d¨ªas ha tratado a pacientes que presentan problemas para lidiar con la incertidumbre y con diferentes crisis existenciales y laborales, ¡°relacionadas con la sensaci¨®n de sentirse perdidos, exhaustos y sin saber qu¨¦ nuevas decisiones tomar¡±. Garc¨ªa Graullera tambi¨¦n confirma el aumento de episodios de este tipo: ¡°Actualmente, y pasados ya unos meses desde el inicio de esta crisis, estamos recibiendo muchos casos relacionados con este debilitamiento psicol¨®gico, donde la ansiedad se cronifica y el bajo estado de ¨¢nimo se instala debido a la percepci¨®n de impotencia ante esta situaci¨®n. Tambi¨¦n estamos viendo ya casos de estr¨¦s postraum¨¢tico, sobre todo en personal sanitario¡±.
Ante este horizonte desmoralizador, ?qu¨¦ podemos hacer para que las malas noticias no hagan tanta mella en nuestro ¨¢nimo y en nuestra salud? ¡°Ante esta situaci¨®n experimentada de indefensi¨®n, tenemos que ser conscientes de que, aunque no podamos ejercer un control directo de la situaci¨®n, s¨ª que podemos ejercer un control sobre nuestros pensamientos y conductas¡±, sostiene Silvia Garc¨ªa Graullera, que aconseja buscar espacios libres de estr¨¦s y focalizar nuestra atenci¨®n en aspectos positivos y acciones concretas del d¨ªa a d¨ªa para no dejar que el miedo nos paralice. ¡°La manera en la que reaccionamos depende en gran medida de nuestro tipo de personalidad, de las experiencias vitales previas y de c¨®mo hemos aprendido a lidiar con las crisis anteriormente, as¨ª que es dif¨ªcil tener una f¨®rmula que funcione para todos igual¡±, concluye Leire Villaumbrales. Pr¨¢cticas de cuidado de nuestra salud f¨ªsica y emocional pueden ser claves para sobrellevar esta situaci¨®n: desde la preservaci¨®n de espacios de ocio hasta el cuidado de la alimentaci¨®n y la pr¨¢ctica de ejercicio o t¨¦cnicas de relajaci¨®n. Buscando siempre ayuda profesional si la situaci¨®n se escapa a nuestro control.
El surrealismo se ha apoderado de nuestras vidas, sin que nadie pueda asegurar con certeza d¨®nde estar¨¢ en tres meses. ¡°Es como cuando entras a un museo y te encuentras un gran cuadro abstracto en la pared. Cuando lo miras, y no sabes lo qu¨¦ es, sientes ansiedad e incomodidad¡±, reconoce el psiquiatra infantil Fredrick Matzner en Wired. En lo que llevamos de a?o, m¨¢s all¨¢ de una pandemia mundial que sigue cobr¨¢ndose cientos de miles de vidas en todo el mundo, hemos sido testigos de terribles incendios en Australia, de la consumaci¨®n del Brexit, del Impeachment a Donald Trump y la oleada antirracista m¨¢s intensa vivida por el pa¨ªs desde hace medio siglo, del fallecimiento de ¨ªdolos globales como Kobe Bryant y de una contracci¨®n econ¨®mica sin precedentes que solo asoma sus consecuencias. El panorama es tan desolador que muchos han optado por afiliarse al viejo credo del ¡°r¨ªo por no llorar¡± y los planes, prop¨®sitos y esperanzas que lo que llevamos de a?o se ha encargado de desbaratar ya forman parte de la cultura meme digital. Desde el creador de la sanguinaria saga Juego de Tronos afirmando que 2020 est¨¢ dirigido por ¨¦l, hasta tuiteros que no se explican c¨®mo la serie documental Tiger King puede haber sido lo m¨¢s normal en nuestras vidas en los ¨²ltimos meses.
Mis planes / El 2020 pic.twitter.com/0v9XvpREfF
— ????? ????? (@perrondeado) May 18, 2020
Me on New Year¡¯s Eve: ¡°2020 will be better than 2019¡±
— introverts memes (@introvertsmemes) May 31, 2020
2020: pic.twitter.com/5P4DK5ffXs
March 1st vs. March 31st pic.twitter.com/UqeUPCTdMP
— Tom Zohar (@TomZohar) March 31, 2020
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