?Tiene sentido seguir cambiando la hora?

Una vez m¨¢s, en la madrugada del s¨¢bado 28 al domingo 29 de marzo deberemos adelantar una hora los relojes en toda la Uni¨®n Europea para comenzar as¨ª el horario de verano. Justo a la inversa que el pr¨®ximo mes de octubre. En teor¨ªa, de esta forma ahorramos energ¨ªa y dinero.

Hay una noche de domingo del mes de marzo en el que no existen las dos de la ma?ana. Es una forma de ganar una hora de luz por la tarde a cambio de perderla por la ma?ana. A d¨ªa de hoy no est¨¢n claro que las consecuencias de estas molestias sean positivas, pero s¨ª la causa de ellas, que est¨¢ relacionada, c¨®mo no, con el petr¨®leo. Aunque esta pr¨¢ctica ya se ejerc¨ªa durante la Primera Guerra Mundial para que las tropas alemanas ahorraran fuel, fue a partir de 1974 cuando la primera crisis del petr¨®leo oblig¨® a adoptarla de manera generalizada con el fin de consumir menos energ¨ªa, aprovechando la luz natural. En la actualidad la siguen m¨¢s de 70 pa¨ªses en todo el mundo aunque Rusia se ape¨® de ella en 2011.

Esta medida lleva a?os rodeada de pol¨¦mica, pero este a?o en Estados Unidos ¨Cdonde se hace efectiva tres semanas antes que en nuestro continente¨C ha despertado un debate m¨¢s intenso que en temporadas anteriores, gracias en parte a la repercusi¨®n medi¨¢tica de uno de sus principales detractores, el showman brit¨¢nico John Oliver. Coincidiendo con el adelanto de los relojes en Estados Unidos el pasado ocho de marzo, John Oliver se posicion¨® con su habitual iron¨ªa en contra de la medida en su show en la HBO estadounidense, Last Week Tonight with John Oliver. Los argumentos en forma de v¨ªdeo que mostr¨® en el segmento de su programa titulado Why Is This Still a Thing? se vitalizaron en cuesti¨®n de horas.

¡°En la sociedad contempor¨¢nea (el cambio de hora) no es solo innecesario. Tambi¨¦n es un desperdicio, es cruel y peligroso. Hace mucho que deber¨ªamos habernos despedido de este h¨¢bito¡±, argumentaba The Atlantic al d¨ªa siguiente de la emisi¨®n del v¨ªdeo de John Oliver.

La naturaleza no entiende de ajustes artificiales y las profesiones relacionadas con ellas son las m¨¢s afectadas. Agricultores y ganaderos se encuentran entre los gremios que m¨¢s han protestado por tener que cambiar la hora dos veces al a?o, debido a las repercusiones negativas en sus cultivos y ganado. Uno de los argumentos del showman brit¨¢nico, colaborador habitual de John Stewart, es precisamente el anular este falso mito que asegura que el cambio de hora beneficia a este sector.

Hace cinco a?os la organizaci¨®n Ecologistas en Acci¨®n comenz¨® un estudio en Espa?a en el que analizaba el consumo medio diario de energ¨ªa en los diez d¨ªas previos y posteriores a los cambios de hora. El resultado de este an¨¢lisis arroj¨® luz, y nunca mejor dicho, a las dudas que nos asaltan cada vez que tenemos que estar pendiente del reloj por orden ministerial. En cuatro de los seis periodos estudiados el consumo de energ¨ªa con el cambio de hora aument¨® hasta casi un tres por ciento. Por otro lado, resaltan que la medida afecta mucho al ritmo biol¨®gico de los m¨¢s peque?os sobre todo en lo relacionado con la comida y el sue?o.

Adem¨¢s de mostrar datos parecidos de aumento del consumo relacionados con Estados Unidos, John Oliver tambi¨¦n recuerda en su v¨ªdeo humor¨ªstico de tres minutos que en Norteam¨¦rica aumentan los accidentes laborales y de tr¨¢fico durante este periodo de adaptaci¨®n. ¡°Lo que pierdes en luz lo ganas en peligro mortal¡±, apunta con iron¨ªa el programa de televisi¨®n.

Sin embargo, no todas las organizaciones opinan que la medida no sirve para nada. Marina Bevacqua, responsable de Energ¨ªa de Greenpeace Espa?a, calcula que el ahorro de energ¨ªa ronda el 5%. "La medida es positiva y viene acompa?ada de un ahorro de energ¨ªa. El problema es pol¨ªtico. Si pones en marcha esta medida, pero no la apoyas con otras pol¨ªticas que verdaderamente busquen la reducci¨®n del consumo se queda en algo totalmente anecd¨®tico". Desde la organizaci¨®n insisten en que las nuevas tarifas el¨¦ctricas de la Reforma Energ¨¦tica aumentan la parte fija de la factura, aquella no depende del consumo del usuario por lo que los esfuerzos por ahorrar en consumo no se incentivan en absoluto. "En cosas como estas s¨ª se podr¨ªa ahorrar de verdad. Pero lo de cambiar la hora se queda en algo simb¨®lico".