B¨®rdame unos drones: dise?o ir¨®nico y pol¨ªtico ¡®made in Palestina¡¯
El colectivo Disarming Design crea objetos impactantes con la idea de desactivar t¨®picos sobre Oriente Medio. Visita Barcelona dentro de la feria editorial independiente ¡®Read or Die¡¯.
A simple vista parece una bufanda tradicional con hechuras artesanas. Lo es, pero si uno mira de cerca, ve que entre los bordados, adem¨¢s de flores hay drones, un elemento indispensable en el paisaje actual en Oriente Medio. La bufanda de Gaza forma parte de la colecci¨®n de Disarming Design, un colectivo con doble base, en B¨¦lgica y Palestina, que trabaja para ¡°desarmar¡± t¨®picos a trav¨¦s del dise?o y que estar¨¢ representado este fin de semana en Read or Die, una feria de publicaciones independientes que se celebra en The Folio Club de Barcelona.
Como la bufanda, hay muchos otros objetos en el cat¨¢logo de la marca que tienen un sutil elemento de humor o por lo menos una fina iron¨ªa. Ah¨ª est¨¢ la almohadilla de ¡°apenas relax¡±, que se parece a las cl¨¢sicas colchonetas de vuelo que uno se pone alrededor del cuello pero se produjo inicialmente con relleno de piedras para simular el ¡°peso sobre los hombros¡± con el que cargan los palestinos y trasladar el stress que supone viajar para los palestinos, sorteando controles y retenciones. No hay que preocuparse: al cliente se le vende sin piedras. Se puede conjuntar con el antifaz para dormir, que lleva bordados unos ojos y pretende despertar la atenci¨®n sobre el conflicto, y el tarjetero de viaje, hecho en piel. Es bastante m¨¢s grande que los elegantes portapasaportes que venden marcas como Smythson o Herm¨¨s porque ir por el mundo con un documento de identidad de la Autoridad Palestina requiere bastantes m¨¢s papeles. Todos los pa¨ªses, excepto Jordania, exigen visado y pueden denegar la entrada a un ciudadano sin dar explicaciones demasiado claras.
A pesar del simbolismo con el que cargan, los objetos de Disarming Design son ante todo eso, objetos. Visualmente atractivos, bien pensados y correctamente manufacturados en talleres de los territorios palestinos. Teresa Palmieri, coordinadora de dise?o y marketing del colectivo, que estar¨¢ en la feria de Barcelona, y Annelys de Ves, una de las fundadoras, insisten en ese punto: ¡°Quer¨ªamos mostrar la calidad del dise?o palestino y todo su potencial intelectual, cr¨ªtico y creativo. S¨ª, trabajamos bajo las directrices del comercio justo, pero es importante que se valore estos productos por la calidad de su dise?o, no como un producto del victimismo¡±. ?Respecto al humor, Palmieri se?ala que no era uno de sus objetivos pero ¡°org¨¢nicamente se ha convertido en una de las se?as de identidad, ya que forma parte de esa cultura¡±.
Las ideas suelen surgir en los talleres que se celebran en Ramala una vez al a?o a los que acuden tambi¨¦n creativos europeos. Se programan visitas a artesanos y talleres y muchos de los prototipos surgen de conversaciones espont¨¢neas y acaban materializ¨¢ndose all¨ª mismo.
Algunas de las piezas m¨¢s potencialmente controvertidas del cat¨¢logo utilizan como base la keffiyeh, el tradicional pa?uelo palestino. Hay incluso un escotado vestido de noche hecho con esa tela que se presenta como ¡°una declaraci¨®n de estilo y de pol¨ªtica¡±. Tambi¨¦n se vende el pa?uelo con una gigante inscripci¨®n de ¡°Made in China¡±. Ambos se producen en Hirbawi, la f¨¢brica tradicional de keffiyehs en Hebr¨®n que ve amenazada su existencia porque en la actualidad la mayor parte de los pa?uelos que se venden all¨ª y en el resto del mundo est¨¢n hechos en China. Sin embargo, el best seller de la colecci¨®n no es ninguna de esas piezas sino una libreta que reproduce un cl¨¢sico mosaico y que permite escribir de izquierda a derecha o de derecha a izquierda.
Palmieri participar¨¢ hoy en Read or Die en un coloquio sobre ¡°libros de guerrilla¡± y dise?o en un contexto pol¨ªtico en el que tambi¨¦n estar¨¢ Ibrahim Nehme, el fundador de la revista The Outpost. Esta publicaci¨®n de grafismo exquisito ¨Cobra de la agencia barcelonesa Rifle¨C que se define como ¡°una revista sobre las posibilidades¡± sale dos veces al a?o desde Beirut y tiene el casi nada ambicioso objetivo de repensar el mundo ¨¢rabe desde una ¨®ptica abierta y, aunque suene raro, optimista. The Guardian llam¨® a esta revista, de manera algo hiperb¨®lica, ¡°la nueva The Economist¡±. En realidad se parece m¨¢s en su est¨¦tica y en el perfil de sus lectores y colaboradores ¨Cmuchos j¨®venes de pa¨ªses ¨¢rabes que han estudiado o vivido fuera de sus pa¨ªses¨C a una revista como Monocle, que, por cierto, tambi¨¦n la elogi¨®.
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