C¨®mo el espa?ol pijo y de derechas se apropi¨® del chaleco de plumas ligero
Mientras en EEUU Steve Bannon se queda con la chaqueta Barbour, ?qu¨¦ pasar¨¢ con esta prenda despu¨¦s de que Juanma Moreno y las elecciones andaluzas la hayan elevado a uniforme de un determinado color pol¨ªtico?
La foto de la entrada en prisi¨®n de Rodrigo Rato o cuando Mariano Rajoy lo luci¨® bajo su traje en una cumbre en Suecia ya nos alertaban de lo que estaba por llegar. Tras unos pocos a?os de avistamientos t¨ªmidos, la catarsis se materializ¨® con el arranque de la campa?a a las elecciones andaluzas. Juanma Moreno, candidato a hacerse con la presidencia de la comunidad por el Partido Popular, oficializ¨® el 16 de noviembre lo que muchos ya ven¨ªan advirtiendo desde que integrantes del Partido Popular, Ciudadanos o Vox?hayan posado con ¨¦l una y otra vez con la ca¨ªda de las temperaturas: los hombres de la derecha espa?ola se han adue?ado del chaleco de plumas ligero. El c¨ªrculo ten¨ªa que cerrarse con el ?Juanma Moreno presidente? impreso en la espalda del modelo customizado que el candidato andaluz se coloc¨® encima para presentar su campa?a. El PP ya ten¨ªa su ch¨¢ndal a lo Evo Morales o su camisa de Alcampo a lo Pablo Iglesias. Su resumen estil¨ªstico ante el mundo es un acolchado funcional para proteger su pecho en invierno.
Vamos a conseguir abrir una nueva puerta a la esperanza y el futuro de nuestra tierra.#HackathonXelCambio pic.twitter.com/q4sNcpxCkj
— Juanma Moreno (@JuanMa_Moreno) November 15, 2018
El chaleco ese de plumas es el nuevo jersey sobre los hombros anudado en el pecho.
— Jorge Abad (@jorgeabadp) November 25, 2018
Ni la lluvia de memes que le cayeron ese d¨ªa, ni los chistes?constantes en redes sobre el nuevo uniforme de la derecha espa?ola han frenado al af¨¢n de Juanma Moreno por convertir a la prenda en una suerte de?s¨ªmbolo de su campa?a. El andaluz ha adoptado el plumas ligero en m¨²ltiples formas y estilismos: lo ha llevado bajo la chaqueta, en versi¨®n plum¨®n¨Ca la que tampoco hace ascos Pablo Casado¨C, se lo ha puesto para pedirle el voto a una vaca?y hasta en el v¨ªdeo viral donde quer¨ªa epatar la ¨¦pica de Juego de Tronos de Teresa Rodr¨ªguez. Pero el chaleco no solo es territorio ¨²nico del Partido Popular. Mientras Albert Rivera ha cambiado la camisa por el cuello cisne bajo americana, el chaleco ligero?tambi¨¦n es un recurso estrella para el secretario general de Vox, Javier Ortega,?y los simpatizantes que suelen acompa?arle?junto a Santiago Abascal. La prenda despunta este oto?o en s¨ªmbolo de una determinada masculinidad espa?ola (tambi¨¦n se deja ver con ella bajo su americana toreros como Fran Rivera?o el fan¨¢tico de las mujeres como las de antes,?Arturo P¨¦rez Reverte)?y con un car¨¢cter aspiracional resumido en un tuit: ?Estas Navidades, no puede faltar en ninguna mansi¨®n el chaleco ligero de plumas y los castellanos de dos borlas?.
Mientras en EEUU Barbour se enfrenta a una posible crisis de imagen ante la apropiaci¨®n de su chaqueta insignia por parte de la extrema derecha en una figura tan pol¨¦mica como la de Steve Bannon, en Espa?a el fen¨®meno de la apropiaci¨®n del chaleco ligero de plumas ¨Cvisto aqu¨ª como heredero del uniforme de caza y equitaci¨®n que viste el sector m¨¢s conservador del pa¨ªs¨C, choca con la?poli¨¦drica visi¨®n americana. All¨ª est¨¢ asociado de forma no oficial a un sector m¨¢s geek como son los empresarios/inversores de Silicon Valley ¨Cde ah¨ª las?bromas sobre la m¨¢quina expendedora de chalecos ligeros que la firma Uniqlo instal¨® este verano en el aeropuerto de San Francisco o su inclusi¨®n constante en series que retratan el gremio como la de HBO¨C. Tambi¨¦n lo est¨¢ con ese sector adicto a las tendencias que ha visto en el?Gorpcore?una salida creativa a la invasi¨®n de b¨¢sicos minimalistas. El plumas ligero se imagina all¨ª en dise?os m¨¢s osados y largos, mezcl¨¢ndose con forros polares, chaquetas-peluche con aire monta?ero o la reconversi¨®n de The North Face o Patagonia en inesperadas firmas de car¨¢cter urbano?cool.?
La introducci¨®n en el mercado de la ropa t¨¦rmica para vestir lejos de las monta?as y sobre el asfalto, gracias a firmas de car¨¢cter urbano como Uniqlo o el repunte de la ropa monta?era como tendencia de moda, ha propiciado una expansi¨®n aupada gracias?su extrema funcionalidad ¨Cpesa/ocupa poco y abriga mucho¨C que ha favorecido una democratizaci¨®n del plumas ligero como chaqueta o accesorio b¨¢sico del armario invernal. Una situaci¨®n que en los ¨²ltimos a?os no entend¨ªa de clase social o etiqueta.?As¨ª lo ve tambi¨¦n el reciente?manual del hater de Twitter que es?El libro del odio (Malpaso, 2018) al ilustrar a la prenda como ?5 gansos muertos llevo dentro. El chaleco de plumas es la prenda contradicci¨®n: eres choni, eres cazador?. Una ambivalencia que ahora parece obsoleta desde que, en unas elecciones, la derecha espa?ola insisti¨® en apropi¨¢rsela para ella sola.
?Pero qu¨¦ co?o es esta moda pepera de llevar eso bajo la chaqueta? pic.twitter.com/wfevx0XwX9
— Dani Gove (@Dani_Gove) November 19, 2018
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