Fiestas de ?vieja normalidad? y jets a lugares prohibidos: as¨ª sortea la fama y el dinero las lagunas legales del coronavirus
Barras privadas de alcohol mientras los bares est¨¢n cerrados o tratos de favor a famosos para afrontar las cuarentenas. La crisis del coronavirus expone, a¨²n m¨¢s, las grietas sociales marcadas por el poder y la fama.
?Tras dos semanas de m¨²ltiples tests sanitarios y pidiendo a todo el mundo que hiciese cuarentena, sorprend¨ª a mi c¨ªrculo m¨¢s ¨ªntimo con un viaje a una isla privada donde pod¨ªamos pretender que las cosas eran normales durante un momento en el tiempo?. Kim Kardashian ha cumplido 40 a?os y ha decidido compartir desde sus redes las instant¨¢neas de su celebraci¨®n en una isla secreta.?¡°Bailamos, montamos en bicicleta, nadamos cerca de las ballenas, hicimos kayak, vimos una pel¨ªcula en la playa y mucho m¨¢s. Me doy cuenta de que para la mayor¨ªa de la gente, esto es algo que est¨¢ muy lejos de su alcance en este momento, por lo que en momentos como estos, recuerdo humildemente lo privilegiada que es mi vida¡±, ha contado desde sus redes sociales hacia sus m¨¢s de 40 millones de seguidores.
After 2 weeks of multiple health screens and asking everyone to quarantine, I surprised my closest inner circle with a trip to a private island where we could pretend things were normal just for a brief moment in time. pic.twitter.com/cIFP7Nv5bV
— Kim Kardashian (@KimKardashian) October 27, 2020
Entre la indignaci¨®n y el cachondeo (?Una multimillonaria verifica humildemente su privilegio en una isla privada?, titulaba acertadamente The Cut), la publicaci¨®n de Kardashian se convirti¨® durante la jornada de ayer en el meme del d¨ªa, cuando usuarios de todo tipo (y hasta el MoMA de Nueva York) compartieron fotograf¨ªas de sus propias ?islas privadas? en tono de burla con el mismo copy que utiliz¨® Kardashian. Las desigualdades que han asomado sobre los privilegios de los poderosos con el resto de los mortales en esta crisis condensadas en un solo post de famosa se ganaron aplaudidas referencias a la pel¨ªcula Par¨¢sitos,?a la sangrienta boda roja de Juego de Tronos, y a la secta de vestidos blancos y coronas de flores de Midsommar.
After 2 weeks of multiple health screens and asking everyone to quarantine, I surprised my closest inner circle with a trip to a private island where we could pretend things were normal just for a brief moment in time. pic.twitter.com/HcNrQr6NYl
— Ken Klippenstein (@kenklippenstein) October 27, 2020
Una de las grietas sociales que m¨¢s asoma en la crisis del coronavirus es la que evidencia, todav¨ªa m¨¢s, c¨®mo el poder del dinero hace m¨¢s llevadera nuestra existencia cuando llega una pandemia. En el confinamiento severo aprendimos que no era lo mismo encerrarse en un piso de 30 metros sin balc¨®n con toda tu familia que en un chalet de 200 metros con jard¨ªn y con la desescalada llegaron los VIPS que exhib¨ªan el lujo de poder bailar sin mascarilla pag¨¢ndose pruebas PCR antes de sus fiestas. Tambi¨¦n los que, directamente, montaban por el m¨®dico precio de 40.000 euros fiestas privadas en villas de Ibiza mientras las discotecas estaban cerradas.?Ahora, cuando la segunda oleada amenaza nuestra estabilidad mental y la afrontamos m¨¢s deca¨ªdos, se acumulan las denuncias por tratos de favor a las ¨¦lites mientras se piden m¨¢s sacrificios y responsabilidad moral al resto de ciudadanos.
Esas costuras se vislumbran tambi¨¦n a menor escala, porque tampoco hace falta huir a una isla desierta para marcar la diferencia. Desde mediados de octubre los bares de Catalunya est¨¢n cerrados por decreto, pero eso no evit¨® que en la previa a la imposici¨®n del toque de queda se ofertasen propuestas de ocio alternativas a trav¨¦s de listas personalizadas por WhatsApp. ??PLAN DE FIN DE SEMANA CON AMIGOS!! Disfruta de unas copas ? en el HOTEL 54 BARCELONETA este fin de semana, reservando habitaci¨®n y podr¨¢s subir a la terraza con nuestras incre¨ªbles vistas?!! La habitaci¨®n puede ser de hasta 6 personas, paga 50€ por la habitaci¨®n y 50€ por incluir las bebidas que t¨² quieras!?. Las barras de bar de entrada libre y gratuita estar¨ªan cerradas para socializar, pero bastaba contar con 100 euros de base para montarse una barra privada en la terraza de un hotel. Hecha la ley, hecha la trampa. Nada que una cartera con billetes no pueda solucionar.
?Un doble rasero impactante?
Los estadounidenses tienen prohibido la entrada, salvo excepciones, a algunos pa¨ªses de Europa desde verano, pero eso no impidi¨® que?Kylie Jenner colgase unas fotos vacacionales desde Par¨ªs?y sus seguidores la reprendieran por ello: ?Tienes esta enorme plataforma y en lugar de promover el distanciamiento social y adherirte a las leyes y regulaciones establecidas para la SEGURIDAD de todos en una PANDEMIA GLOBAL, en lugar de eso, haces alarde de tus viajes internacionales cuando la gente ni siquiera puede ver a familiares enfermos durante esta crisis. Est¨¢s avergonz¨¢ndote a ti misma?, le espet¨® una seguidora y su comentario se gan¨® casi 3.000 me gusta.?Brad Pitt tambi¨¦n se relaj¨® en agosto en su chateaux franc¨¦s?junto a su nuevo ligue: ??C¨®mo ha podido saltarse la prohibici¨®n para una escapada rom¨¢ntica??, se preguntaban en FranceR24.??El viaje de Pitt significa que alguien con su riqueza y fama puede eludir las restricciones de viaje? ?O su equipo encontr¨® una laguna legal leg¨ªtima??, indagaban en el texto. No son los ¨²nicos que han levantado quejas.
En Australia hasta los pol¨ªticos?cuestionaron p¨²blicamente que Tom Hanks no pasara la cuarentena obligatoria en las instalaciones que requiere el gobierno a los reci¨¦n llegados y la pasara, directamente, en un hotel de lujo en su retorno al rodaje del biopic de Elvis.?El doble rasero es impactante: no deber¨ªa ser de una forma para los personajes importantes y las celebridades y otra para todos los dem¨¢s?, dijo el l¨ªder de la oposici¨®n y miembro de la asamblea de Queensland, Deb Frecklington, al Sydney Morning Herald?sobre el caso Hanks. ?Todos los d¨ªas, los australianos no pueden elegir d¨®nde se ponen en cuarentena, ni tampoco las celebridades?, apostill¨®. Este y otros fen¨®menos de los vac¨ªos legales de los famosos y poderosos que viajan a sitios prohibidos lo recog¨ªa el Washington Post?hace unos d¨ªas, donde destacaba en un reportaje?el aumento de alquileres de jets privados y de empresas de lujo para poder moverse por el mundo sin apenas restricciones.
Seg¨²n recog¨ªa Brad Japhe en el Post, existen ?empresas de gesti¨®n de destinos? que ayudan a poner en regla la documentaci¨®n de trabajo esencial para la entrada a pa¨ªses cuyas fronteras est¨¢n cerradas a los que viajan como turistas, siempre que se puedan desembolsar algunas decenas de miles de d¨®lares por la gesti¨®n. El negocio de alquiler de jets privados premium ha aumentado en EEUU desde la pandemia. En Espa?a, Cinco D¨ªas informaba de que la compa?¨ªa de jets privados GestAir cerrar¨¢ su ejercicio en n¨²meros negros y mantiene ?un optimismo inusual entre las aerol¨ªneas? ante la bajada del turismo.
En el pr¨®logo actualizado del recientemente traducido?Un Para¨ªso en el infierno (Capit¨¢n Swing, 2020), Rebecca Solnit sostiene que los desastres son ?cursos intensivos de identificaci¨®n de conexiones?. Que es en los momentos de grandes cambios, como el que estamos viviendo con el coronavirus, cuando observamos con renovada lucidez los sistemas ¨Cpol¨ªticos, econ¨®micos, sociales, ecol¨®gicos¨C y es ah¨ª donde somos plenamente conscientes de todo m¨¢s que nunca. ?Vemos lo que es fuerte y vemos lo que es d¨¦bil?, escribe. Tan evidente como una foto de Instagram de la influencer de turno llegando donde el resto, especialmente ahora, sabe que ya no podr¨¢.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.