44 a?os y 5.000 millones: as¨ª levant¨® este visionario portugu¨¦s un imperio de moda online

De un software para ayudar en la fabricaci¨®n de zapatos en Oporto, a la principal plataforma de venta de moda de lujo en internet. En apenas una d¨¦cada, el empresario portugu¨¦s Jos¨¦ Neves ha conseguido que Farfetch se convierta en un referente. Con presencia en 190 pa¨ªses, da servicio a 375 marcas de lujo y a 614 minoristas, tiene empleadas a m¨¢s de 1.000 personas y cuenta con unos 2,3 millones de consumidores. Ahora se acaba de estrenar en la bolsa estadounidense por valor de 5.000 millones de d¨®lares (en 2016 se valoraba a la empresa en 1.600 millones) y se desmarca de la mal colocada etiqueta de ¡®minorista¡¯ para posicionarse como gran plataforma cuyo valor reside no en vender productos, sino en conectar. ¡°Facilita intercambios entre dos o m¨¢s grupos independientes, generalmente consumidores y productores¡±, pero sin un stock propio, como explicaba Alex Moazed, fundador de Applico y coautor de Monopolios Modernos: C¨®mo Dominar la Econom¨ªa del Siglo 21, a Forbes. Y lo consigue dentro del pr¨®spero mercado del lujo.

La historia de la compa?¨ªa, con sede brit¨¢nica, est¨¢ ligada a la historia personal de su CEO y fundador. Para Neves, de 44 a?os, la dificultad reside en haber combinado dos mundos que, a priori, no guardan conexi¨®n: moda y tecnolog¨ªa. Mientras estudiaba econom¨ªa en Oporto, Jos¨¦ desarroll¨® el software Gray Matter para las f¨¢bricas portuguesas de calzado y moda que a¨²n hoy se usa all¨ª. Siguiendo el patr¨®n familiar y, a pesar de haber ¡°empezado a programar a los ocho a?os¡±, a mediados de los 90 se lanz¨® a dise?ar calzado con la firma Swear y, ya en Londres, cre¨® B-store, una tienda de ropa masculina que en 2006 se llev¨® el premio a minorista del a?o a nivel nacional. ?Sab¨ªa que no era el mejor dise?ador de zapatos del mundo, ni el mejor programador, pero muy pocas personas tienen conocimiento de ambas ¨¢reas¡±, contaba a BBC. As¨ª, durante la Semana de la Moda parisina fue como surgi¨® su idea de emprender en el comercio electr¨®nico de moda: ?Conoc¨ªa muchas boutiques y not¨¦ que las que estaban creciendo ten¨ªan operaciones en l¨ªnea s¨®lidas¡±, explicaba al mismo medio.

El momento no acompa?aba. Apenas dos semanas despu¨¦s del lanzamiento de Farfetch, estallaba la crisis con la quiebra de Lehman Brothers. Durante tres a?os, la empresa que hoy vende sus acciones a 20 d¨®lares, se autofinanci¨® y a Jos¨¦ Neves conseguir clientes que quisieran vender en su plataforma se le hizo cuesta arriba: ¡°Solo cuando uno se inscrib¨ªa convenc¨ªa al resto para que lo siguiera¡±, explicaba. Dentro de esos clientes, dos grupos. Las grandes firmas de moda que apuestan por la web para llegar a ciudades m¨¢s all¨¢ de sus grandes avenidas, como Valentino, Gucci, Prada, Balenciaga o Alexander McQueen. Y por otra parte, la apuesta personal de Neves brindando apoyo a aquellas marcas peque?as e independientes que quieren hacerse un poco m¨¢s fuertes vendiendo fuera de su barrio y con una proyecci¨®n mundial, como hace Amazon.

Una de las 24 empresas espa?olas que en 2015 colaboraban con esta f¨®rmula Farfetch es la sastrer¨ªa madrile?a Yusty. Decid¨ªa unirse por la complejidad de desarrollar su propia p¨¢gina web y, como contaba su director Daniel Yusty a El Pa¨ªs, en la actualidad, gracias a la plataforma, ?vendemos a 30 pa¨ªses, es el 15% del negocio¡±. La media de ingreso para las empresas presentes es mayor, de un 30%, y de sus ventas, entre las que destacan Yves Saint Laurent, Dolce & Gabbana, Valentino y Givenchy, Farfetch se lleva un 22% de comisi¨®n.

Aunque sus ingresos aumentan: en lo que va de 2018 las ventas han subido un 55% respecto a los 386 millones de d¨®lares que ingres¨® en 2017. Tambi¨¦n han aumentado sus p¨¦rdidas con 67,7 millones de momento frente a los 112 millones en total del a?o anterior. Pero, seg¨²n apunta Forbes, es su modelo de negocio lo que le da valor (5.000 millones): ¡°Bain & Company pronostica que el mercado de art¨ªculos personales de lujo ser¨¢ un mercado de 446.000 millones para el a?o 2025, frente a los 307.000 millones actuales. Se espera que la porci¨®n para ese modelo en l¨ªnea sea precisamente su segmento de m¨¢s r¨¢pido crecimiento, pasando de aproximadamente el 9% de cuota de mercado en 2017 al 25% en 2025¡±.

A lo largo de esta d¨¦cada, el equipo y el consejo de Farfetched se han ido nutriendo de profesionales potentes de la industria provenientes de otras grandes empresas del sector e-commerce y de la moda, como el actual Director de Operaciones Andrew Robb (eBay), la Directora de Estrategia y Marca, Susanne-Tide (Harrods, Selfridge, Victoria Beckham), Natalie Massenet (Net-A-Porter y Yoox) o Jonathan Newhouse (Cond¨¦ Nast Internacional). Ahora, con oficinas repartidas por todo el mundo m¨¢s all¨¢ de su sede londinense (Estados Unidos, Jap¨®n, China, Rusia y Portugal y Brasil), Farfetch se sigue haciendo grande. Desde 2015 est¨¢ considerada por Private Eye como una de las 225 empresas Unicornio. Esas startups de un valor superior a 1.000 millones de d¨®lares entre las que se encuentran gigantes como Uber, Airbnb o Pinterest, de las cuales Europa est¨¢ a la cola con solo 13, entre ellas la de Jos¨¦ Neves.

Farfetch ha conseguido que compradores privilegiados de todo el mundo conf¨ªen en su plataforma para gastar una media de 650 euros por persona y compra, 472 euros en el caso espa?ol y, sobre todo, ha revolucionado el concepto del consumo de lujo descontextualiz¨¢ndolo. Ya no hace falta ataviarse para recorrer las tiendas m¨¢s sofisticadas de los 35 pa¨ªses con los que trabaja la plataforma, ahora tambi¨¦n es posible responder a uno de esos impulsos consumista de s¨ªndrome dominical haci¨¦ndose con un Louis Vuitton sin moverse del sof¨¢ (si puede pagarse, claro).