Florence Welch: ?Cre¨ªa que el amor estaba en las drogas?

Golpea el aire, pega saltitos cubri¨¦ndose el rostro con su melena pelirroja, rodeada de bailarinas que, como ella, se deslizan sobre el agua. As¨ª, segura, firme y bajo control, se muestra la brit¨¢nica Florence Welch ¨CFlorence and the Machine¨C en Big God, su ¨²ltimo v¨ªdeo, vestida de seda y encaje beis, que se funde con su piel, sin accesorios ni maquillaje, casi desnuda. Es la met¨¢fora visual de una etapa, la iniciada con su nuevo trabajo, High as Hope (Universal Music), que supone un punto de inflexi¨®n en su carrera. Y en su vida. ?Quiz¨¢ se deba a que he madurado, a que he pasado los 30 [el 28 de agosto cumple 32 a?os], pero he sentido mucha menos presi¨®n al hacer este disco. Sab¨ªa lo que me tra¨ªa entre manos. Antes siempre me preguntaba: ¡®Oh, Dios m¨ªo, ?qu¨¦ estoy haciendo?¡¯, y en esta ocasi¨®n no dud¨¦, pens¨¦: ¡®S¨¦ lo que quiero hacer¡¯. Ahora s¨¦ lo que soy capaz de conseguir como artista, tengo m¨¢s confianza?, explica.

Parece salida de un cartel de Alfons Mucha o de un cuadro prerrafaelita. Se crio en un ambiente bohemio y creativo, y su est¨¦tica la lig¨® desde su debut en 2009 ¨Ccon Lungs¨C al mundo de la moda: en 2011 actu¨® durante un desfile de Chanel en Par¨ªs y ha sido musa de Alessandro Michele (Gucci). No se perd¨ªa una fiesta. Ahora eso ha cambiado. ?En los ¨²ltimos tiempos he empezado a descubrir qu¨¦ me hace feliz. Antes pensaba en salir, asistir a inauguraciones, las alfombras rojas¡­ y me he dicho: ¡®Esto no me llena¡¯. Me siento orgullosa, porque al no beber he podido ver las cosas de otra manera, tengo la sensaci¨®n de que realmente no me atraen las pasarelas, dan miedo. No me gusta ir a las grandes ceremonias de premios, son aterradoras. Al empezar en este mundo solo pensaba en que ¡®iba a lograr ir a tantos eventos que parecer¨ªa incre¨ªble¡¯. Pero ya no es as¨ª?. Porque Welch representaba la imagen de artista tr¨¢gica, rodeada de malditismo: voz de mezzosoprano, composiciones desgarradoras, noches sin fin¡­

Recuerda que consigui¨® convencer a su representante, Mairead Nash, de que la fichara persigui¨¦ndola mientras cantaba en los ba?os de un club; la leyenda cuenta que cerraba todos los locales de Londres y que la juerga continuaba despu¨¦s en su casa. Pero ha dejado atr¨¢s ese desfase. High as Hope refleja su reci¨¦n estrenada sobriedad con letras como la de Hunger: ?Cre¨ªa que el amor estaba en las drogas, pero cuantas m¨¢s tomaba, m¨¢s me lo quitaban?. En este tema habla por primera vez de los des¨®rdenes alimenticios que ha sufrido toda su vida: ?Empez¨® como un poema que estaba escribiendo solo para m¨ª. Buscaba el origen de mi carencia de amor propio, d¨®nde busqu¨¦ el amor y las cosas que quiz¨¢ no eran amor, y la canci¨®n vino a m¨ª. Mi hermana me pregunt¨®: ¡®?Por qu¨¦ has volcado todo esto en un tema pop? Son cosas de las que no has podido ni hablar durante a?os¡¯. Lo s¨¦, estoy loca. Pero me gusta la idea de incluir una gran pregunta sin respuesta en una melod¨ªa, porque t¨² puedes no ser capaz de hallar una soluci¨®n, pero puedes bailar sobre ella, celebrar esa soledad colectiva y hablar a la gente de una forma real, conectar porque ha sentido lo mismo?.

Exorcizar esos demonios le ha ayudado a descubrir aficiones, a canalizar su energ¨ªa. ?Lo hice todo a?icos. Ha sido importante parar y darme cuenta de que en realidad lo que me complace es leer, montar en bicicleta, estar con mi familia y mis amigos, ser creativa¡­ Cosas m¨¢s tranquilas. En la danza he encontrado una v¨ªa de expresarme a m¨ª misma que siempre he amado, y ahora este inter¨¦s se ha hecho mucho m¨¢s fuerte, ha cobrado importancia, mientras que el resto de los motivos por los que comenc¨¦ en este negocio han deca¨ªdo. Pero creo que este es un punto vital realmente agradable en el que estar?.

Aunque no todo es optimismo. Welch tiene tatuado en el brazo ¡®Always lonely¡¯ (¡®Siempre sola¡¯) y ese sentimiento envuelve el ¨¢lbum y su primer libro de poes¨ªa, Useless Magic (Penguin). ?Hay soledad en este disco y hay problemas y dolor, y asuntos con los que he tenido que lidiar, pero el hilo conductor predominante es la esperanza sobre esos temas?, asegura. Tambi¨¦n hay un homenaje a uno de sus referentes, Patti Smith: ?Aunque me sent¨ª algo intimidada al hacerlo, escrib¨ª esta canci¨®n, llamada Patricia, porque ella es mi hero¨ªna personal, una artista que vive para su trabajo, que tiene un respeto y una gran comprensi¨®n de lo que es la vida. Otra gente se obsesiona con sus logros o sus ¨¦xitos, pero ella se aferra a esta idea de que la cotidianidad tangible, como tomar un caf¨¦ o visitar la tumba de tu escritor favorito, es lo realmente milagroso?. Adem¨¢s, en el ¨¢lbum, Florence ha reivindicado su papel en todo el proceso creativo, al exigir firmar como productora junto a Emile Haynie (que ha trabajado junto a Lana del Rey o Lady Gaga). Otra forma de autoafirmaci¨®n, de reclamar su espacio: ?Sent¨ª que era importante figurar. Ten¨ªa que estar implicada en cada detalle, porque este proyecto es muy valioso para m¨ª?.