Kristen Stewart, una belleza rentable

En el coraz¨®n de Kristen Stewart hay sustituto para Robert Pattinson. Pero no es un nombre cualquiera. La estrella de Crep¨²sculo, ¨ªdolo de adolescentes y nueva Blancanieves en la peculiar adaptaci¨®n del popular cuento de hadas Blancanieves y la leyenda del cazador ¨Cque se estrenar¨¢ en Espa?a el pr¨®ximo 1 de junio¨C, no se ha caracterizado precisamente por mencionar en p¨²blico el nombre de su compa?ero de reparto y c¨®mplice en la vida real, que interpreta al seductor vampiro Edward Cullen en la millonaria saga. Pero ahora Stewart no puede parar de hablar a su otro nuevo y gran amor: Balenciaga. ??Lo hemos conseguido!?, anuncia divertida esta actriz que desata pasiones. Habla de su asociaci¨®n con la prestigiosa firma de moda para la que acaba de rodar una campa?a publicitaria como rostro de su nuevo perfume. Es la primera vez que KStew, como la conocen sus seguidores, comercializa su imagen fuera de la gran pantalla. ?Es interesante la relaci¨®n que los actores mantenemos con la moda y c¨®mo disfrutamos de ella?, comenta mientras recuerda su paso a principios de a?o por la pasarela de Par¨ªs, sentada en primera fila junto a la todopoderosa Anna Wintour. ?Me encanta rodearme de gente creativa: esa energ¨ªa, esa ebullici¨®n, la pasi¨®n que siente por el arte gente como Nicolas es totalmente contagiosa?. Se refiere a Nicolas Ghesqui¨¨re, director creativo de Balenciaga. Pero tambi¨¦n podr¨ªa estar hablando de Walter Salles, al que respeta y admira. El director se ha encargado de la adaptaci¨®n de la obra clave de la contracultura, On the Road, que Kristen, como protagonista, acaba de presentar en Cannes. Una ciudad de la que habla con el mismo entusiasmo que de Madrid:? ??Tengo tantas ganas de volver! All¨ª nunca se agota el d¨ªa, te faltan horas para vivir esa ciudad!?, asegura.

Si fuera otra actriz, pensar¨ªa que est¨¢ intentando dorarle la p¨ªldora al p¨²blico espa?ol, pero, trat¨¢ndose de Stewart, es dif¨ªcil asociar su comentario a una actitud complaciente o incluso hip¨®crita. Desde el comienzo de su carrera, hace tan solo 10 a?os, ha sabido transmitir honestidad, paciencia y verdad a los periodistas. En aquel momento supo medirse, sin perder la cabeza, a la actriz de actrices, Jodie Foster, en La habitaci¨®n del p¨¢nico (2002). ?Fue genial tenerla a ella como primer ejemplo de lo que se supone que debe ser una estrella de cine. Despu¨¦s he trabajado con muchas otras que no se le parecen en nada. Yo estoy en esta profesi¨®n porque me gusta mi trabajo y siempre quise formar parte de un rodaje. Al igual que Jodie, no tengo ning¨²n inter¨¦s por la fama. Quiero ser una m¨¢s en el equipo?, comenta atropellada.

A Kristen a menudo se le agolpan los pensamientos cuando habla, intenta ponerlos en orden entre frases que no termina y otras en las que se enfada consigo misma por no poder expresarse con la claridad que querr¨ªa. Transparente; una vez m¨¢s.
Sorprende su pureza cuando hablamos de cifras, porque no ha permitido que se modifique ni un ¨¢pice su personalidad a pesar de ser una de las actrices mejor pagadas del mundo. A sus 22 a?os disfruta ya de un sueldo de 20 millones de d¨®lares por pel¨ªcula. ?A nadie le vienen mal los millones de fans que la siguen?, justifica Joe Roth, productor de Blancanieves y la leyenda del cazador. Sus compa?eros de pel¨ªcula, Charlize Theron y Chris Hemsworth ¨Cpap¨¢ de India Rose, el beb¨¦ de Elsa Pataky¨C tambi¨¦n hablan maravillas de ella. ?La lanzaron de cabeza a una franquicia millonaria que podr¨ªa haber ensombrecido su carrera. Y, sin embargo, fue capaz de salir victoriosa como actriz y como persona. Fue lo suficientemente cabezota para demostrar que ella es lo que es y no lo que los dem¨¢s quer¨ªan ver?, ha comentado el actor.
Kristen habla de la candidez de Blancanieves, de lo sorprendente que es interpretar a alguien que no sabe lo que es la vanidad, alguien que no es consciente del poder que tiene. Y, mientras la escuchas, dir¨ªas que se est¨¢ describiendo a s¨ª misma. La inocencia se ve interrumpida cuando, de pronto, un paparazi nos ciega a ambas con un flash en el castillo de Arundel, un para¨ªso medieval en medio de la campi?a brit¨¢nica donde se ha presentado el filme.

??A que a ti tampoco te gusta??, me pregunta con iron¨ªa. Aun siendo perseguida por cientos de periodistas, Stewart no est¨¢ dispuesta a renunciar a la naturalidad y me recibe con zapatillas. Justo antes se hab¨ªa subido a unos imponentes stilettos de Casadei para unas fotos donde luc¨ªa un vestido azul y naranja de Preen. Se ve¨ªa guap¨ªsima, pero confiesa que estaba helada de fr¨ªo: ?Es rid¨ªculo. No s¨¦ por qu¨¦ me lo he puesto. No me gusta entrar en este juego?, y a¨²n se estremece tiritando.
La belleza tiene un precio, lo sabe. Y tambi¨¦n es consciente de que forma parte del mundo de la industria de Hollywood, aunque prefiere mantener las distancias. De ah¨ª que se niegue a hablar de su vida privada y que est¨¦ siempre preocupada por no dar la imagen equivocada. ?Ahora predomina esa tendencia que llaman girl power, y que hace que las chicas adopten una actitud masculina que glorifica la violencia. Pero esa no es la mujer fuerte que yo quiero ver?, dice Kristen, que odia perpetuar estereotipos. ?Yo soy una persona de camiseta y vaqueros; s¨ª, alguien a quien le gusta sentirse fresca y limpia. De hecho, me lavo todos los d¨ªas (risas). Y claro que me cuido. Uso Proactive para limpiar mi piel. Si alguna chica padece acn¨¦, que sepa que es un tratamiento genial. Y que conste que no le hago publicidad al producto. ?Es la verdad! De todos modos, tengo un buen consejo para quienes pasan por esto: no hay que preocuparse nunca por un grano, el problema est¨¢ en los ojos de quien lo mira?.

Con el mundo por montera y sinti¨¦ndose en el mejor momento de su vida ¨C?muy afortunada y feliz; mucho m¨¢s segura y disfrutando de todo?¨C, Stewart ha aterrizado en Cannes vestida para ganar. Tras pasar varios meses trabajando en Londres, esta californiana se ha reunido de nuevo en la rom¨¢ntica ciudad francesa con su verdadero amor, Robert Pattinson. ?l tambi¨¦n ha presentado all¨ª su ¨²ltima pel¨ªcula, Cosmopolis, la muestra de que hay vida despu¨¦s de Crep¨²sculo. ?No pod¨ªa haber estado mejor acompa?ada?, dice Stewart con doble intenci¨®n, porque en realidad se refiere a sus compa?eros de viaje en On the Road. ?Lo digo de verdad, porque deber¨ªa haber estado de los nervios trat¨¢ndose de una cita as¨ª. Sin embargo, me he sentido segura y fuerte, orgullosa y muy mujer. Sonar¨¢ tonto, pero as¨ª es como me veo. Labr¨¢ndome mi propio camino?.