Activismo y renovaci¨®n de su marca: c¨®mo Paris Hilton ha transformado su influencia sobre los dem¨¢s
¡°Las activistas deber¨ªan ser las nuevas influencers¡±, defiende la empresaria y Dj, que en los ¨²ltimos meses ha dejado a un lado la frivolidad que la hizo famosa para abrazar su papel como defensora de causas sociales.
Renovarse o morir. Ese es el dilema cl¨¢sico que debi¨® espolear a Paris Hilton un par de a?os atr¨¢s. Por aquel entonces, su rostro ya no era el m¨¢s reclamado por las revistas o cadenas de televisi¨®n, sus franquicias o l¨ªneas de producto solo segu¨ªan reuniendo p¨²blico en lugares como China y Dub¨¢i, diferentes medios publicaban extensos reportajes teorizando sobre los motivos de su desaparici¨®n y una horda de influencers de todo el mundo superaban en notoriedad y seguidores a la considerada como inventora de este tinglado. La primera ¡°famosa por ser famosa¡± hab¨ªa dejado de serlo, palideciendo su imagen de alocada heredera privilegiada ante la llegada de movimientos como el #MeToo o Black Lives Matter y la creciente demanda del p¨²blico de que los personajes conocidos exhiban conciencia social. Pero, en un ejemplo de lo que cualquier experto en marketing calificar¨ªa como rebranding, la empresaria aparc¨® el esp¨ªritu fr¨ªvolo y controvertido que la convirti¨® en una multinacional global para abrazar un lado activista nunca antes explorado. Y el cambio de estrategia parece haberle funcionado.
La celebraci¨®n este 17 de febrero del 40 cumplea?os de Paris Hilton ser¨¢ bien distinta al derroche fiestero con el que se hizo un nombre a golpe de vodka, brilli brilli y tarima en la escena nocturna de todo el mundo. No solo la crisis sanitaria provocada por la pandemia del coronavirus ha frenado la agenda de la socialit¨¦ ¨Cocupada con viajes ¡°hasta 250 d¨ªas al a?o¡±¨C, ha sido la propia influencer la que ha apostado por aprovechar el forzado par¨®n social para redibujar su proyecci¨®n medi¨¢tica. El pasado 8 de febrero, Hilton viaj¨® hasta el Estado de Utah para testificar en los juzgados contra la escuela Provo Canyon, un internado para j¨®venes ¡°dif¨ªciles¡± en el que estuvo internada a los 16 a?os y cuyos responsables, seg¨²n declara, abusaban a diario verbal, f¨ªsica y mentalmente de ella y de otras compa?eras. ¡°Durante los ¨²ltimos 20 a?os he tenido una pesadilla recurrente en la que era raptada por dos extra?os en mitad de la noche, me registraban desnuda y me encerraban en una instalaci¨®n. Me gustar¨ªa decirles que es un sue?o, pero no lo es¡±, declar¨® Hilton, que se califica como ¡°una superviviente del abuso institucionalizado¡± y actualmente lucha junto a otras exalumnas por una reforma legislativa que aumente la supervisi¨®n y el control de este tipo de centros.
La neoyorquina habl¨® por primera vez sobre un trauma que le ha causado insomnio cr¨®nico en el documental This is Paris (La verdadera historia de Paris Hilton), emitido en septiembre en Youtube ¨Clogrando 19 millones de reproducciones¨C y que supuso su ruptura definitiva con el ¡°personaje¡± que dice haber interpretado durante dos d¨¦cadas y que ya no era tan lucrativo. ¡°Viajo por el mundo y solo veo habitaciones de hotel, discotecas y tiendas. A veces no s¨¦ ni qui¨¦n soy. Siempre tengo esta fachada de ser feliz y de vida perfecta. Cre¨¦ esta marca y este personaje, y me he quedado atrapada en ¨¦l desde entonces. Yo no sol¨ªa ser as¨ª¡±, explicaba.
Paris Hilton ha estrenado estos meses su nuevo rol como activista, pero adapt¨¢ndolo a las necesidades de su perfil medi¨¢tico. La socialit¨¦ aprovech¨® su visita judicial para protagonizar un reportaje en la revista People en el que posaba junto a su novio, el empresario Carter Reum, y festejaba el apoyo que este le ha brindado durante la lucha reciente. En las im¨¢genes, tomadas en la escalinata del Capitolio de Utah, la pareja posa sonriente, inaugurando el concepto ¡®proceso judicial¡¯ como motivo para vender una exclusiva a la prensa rosa tras las ya pret¨¦ritas pedidas de mano, presentaciones de beb¨¦s o inesperados divorcios. Sus posados dignos de photocall chocan con la naturalidad de sus acompa?antes en las manifestaciones convocadas para concienciar sobre la necesidad de cerrar las escuelas que maltratan a sus alumnos internos. Para que la renovaci¨®n de imagen fuera integral, tambi¨¦n ha refinado la tipograf¨ªa de su logo personal y este 22 de febrero estrenar¨¢ su primer podcast, de nuevo bajo el nombre de This is Paris, en el que promete abrirse, a¨²n m¨¢s si cabe, a sus potenciales oyentes.
Consciente de que si una celebrity quiere seguir siendo relevante en 2021 debe promover alguna causa social, Hilton riega ahora su cuenta de Instagram, poblada todav¨ªa por selfis en lujosos escenarios y seguida por m¨¢s de 14 millones de usuarios, de diferentes actualizaciones sobre el caso. Ella misma ha sido vocal al respecto de esta transici¨®n: ¡°Creo que las activistas deber¨ªan ser las nuevas influencers. Veo a mucha gente usando sus plataformas para tener una voz y marcar la diferencia en las cosas de que de verdad importan, y lograr un cambio positivo en el mundo. Aplaudo y elogio todo eso y espero ver a m¨¢s gente as¨ª¡±, evoc¨® la otrora ep¨ªtome del exceso en la edici¨®n estadounidense de Vanity Fair y que ahora aspira a seguir los pasos de Greta Thunberg o Emma Gonz¨¢lez.
Fue precisamente su amiga Kim Kardashian, que salt¨® a la fama ejerciendo como estilista de Paris Hilton, una de las primeras grandes estrellas digitales en aparcar la superficialidad de sus perfiles p¨²blicos y tratar de reconducir su imagen hacia aventuras m¨¢s solidarias. La influencer estren¨® en 2018 una agenda pol¨ªtica que la llev¨® a centrarse en las injusticias vinculadas al sistema penitenciario estadounidense. Kardashian ha conseguido que se revisen las condenas a cadena perpetua de decenas de presos, promover mejoras en la reinserci¨®n e incluso lleg¨® a reunirse en un par de ocasiones con el expresidente Trump en la Casa Blanca. Lo logrado no escap¨® al foco de Hilton, que confirm¨® a Variety que sus respectivas familias hab¨ªan infundido en ellas, desde muy temprana edad, la importancia de amparar a los m¨¢s desfavorecidos. ¡°Me encanta usar mi plataforma para arrojar luz en causas que lo necesitan y admiro y aplaudo a Kim por todo el trabajo que est¨¢ haciendo¡±, a?ade.
La reinvenci¨®n de Paris Hilton ya ha dado sus primeros frutos. Un par de semanas despu¨¦s del estreno del documental, la neoyorquina firmaba un contrato con la prestigiosa agencia de representaci¨®n UTA (United Talent). El CEO de la misma, Jeremy Zimmer, reconoc¨ªa que era esta nueva narrativa socialmente consciente la que hab¨ªa llamado su atenci¨®n. ¡°Despu¨¦s de que mis hijas insistieran en que viera This is Paris, tengo un mayor aprecio por ella como persona y por el poder de su historia. Este nuevo cap¨ªtulo en su carrera cuenta con nuevas capas de autenticidad que permitir¨¢n al p¨²blico conectar con ella de formas muy significativas¡±, aleg¨® en el comunicado oficial del acuerdo. Si es para beneficio de diferentes causas sociales, bienvenida sea la Paris 2.0.
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