Gloria Allred: de chiste de ¡®Los Simpson¡¯ a azote de los depredadores poderosos
El documental ¡®Seeing Allred¡¯ redime la imagen de la pol¨¦mica abogada feminista que ha peleado contra Bill Cosby, Trump, O.J. Simpson, Harvey Weinstein o Polanski.
?As¨ª aprendes?. Las dos palabras que le dijo la enfermera al despertar en el hospital por una hemorragia y altas fiebres que le hab¨ªan causado un inseguro aborto ilegal son, en palabras de una de las abogadas m¨¢s conocidas de EEUU, ?lo peor que me ha pasado en la vida?. Gloria Allred interrumpi¨® su embarazo, antes de la despenalizaci¨®n en EEUU (1973), porque un hombre la hab¨ªa violado de viaje con amigas en unas vacaciones en M¨¦xico. Apenas ten¨ªa 20 a?os. Cinco d¨¦cadas despu¨¦s de aquel humillante?incidente en un hospital, la mujer menuda que se sienta encima de un list¨ªn telef¨®nico cuando habla con la prensa para imponer presencia ante la c¨¢mara se ha convertido en el azote de todo violador o depredador sexual sin importar el poder que ostente. Es la soldado legal de las mujeres. Ha litigado contra OJ Simpson, contra Harvey Weinstein, contra Donald Trump o contra Bill Cosby. Antes de la epifan¨ªa global del #MeToo, ella llev¨® a juicio las acusaciones de violaci¨®n a Polanski o las denuncias de acoso sexual de Arnold Schwarzenegger y Shaquille O¡¯Neal. El documental Seeing Allred (disponible en Netflix) cuenta su historia y redime la caricatura de mujer enfadada y codiciosa que los medios de comunicaci¨®n han construido sobre la abogada feminista que escuch¨® a las mujeres y les puso micr¨®fonos y c¨¢maras para que todos las escuch¨¢semos antes del despertar del ¡®yo tambi¨¦n¡¯.
Ser la castigadora legal (y medi¨¢tica) de los sexistas no ha sido tarea f¨¢cil. Allred lleva desde los 70 dando la cara en la televisi¨®n en debates o en programas (lleg¨® a tener el suyo propio), adem¨¢s de organizar sonadas ruedas de prensa cada vez que se hace cargo de un caso para visibilizar su activismo. Llam¨® a las c¨¢maras cuando se plant¨® en los 80 por los derechos de manutenci¨®n de las madres separadas, cuando exigi¨® que un club de caballeros de Los ?ngeles aceptase a mujeres ¨Cacabar¨ªa siendo la primera socia¨C, cuando consigui¨® cambiar la ley para amparar a actrices embarazadas (arranc¨® una indemnizaci¨®n de 8 millones a Aaron Spelling para una int¨¦rprete despedida de Melrose Place) o cuando, a?o tras a?o, acompa?aba a una pareja de amigas lesbianas a intentar registrarse como matrimonio en los juzgados, sin ¨¦xito, hasta la legalizaci¨®n de 2015.
Su insistencia en visibilizar su lucha acompa?ada de las c¨¢maras no ha gustado a todos. Durante d¨¦cadas, los medios han proyectado en ella la narrativa de feminista enfadada y gritona. ?Har¨ªa cualquier cosa por poner mi rostro feo delante de las c¨¢maras?, dec¨ªa su imitadora en el Saturday Night Live. En Los Simpson ejerci¨® de abogada de Lisa voceando ??Esto es acoso!? sin motivo aparente (en South Park gritar¨ªa ??Homofobia!? antes de parapetarse frente un nido de flashes). Para cuando empez¨® a llevar a mujeres ante la prensa para que contaran su experiencia con Bill Cosby ¨Cantes de que la opini¨®n p¨²blica se volcase a favor de las v¨ªctimas¨C, Jimmy Fallon la desacreditar¨ªa diciendo en su programa que ?Gloria Allred es el demonio personificado?. Ella hace o¨ªdos sordos a las cr¨ªticas. ?Creo que hay gente que me entiende muy bien y quien no me entiende, es porque no quiere entenderme porque tenemos intereses distintos. En realidad, me da igual?, resuelve ella ante los que desconf¨ªan y dudan de sus motivaciones durante toda su carrera.
?Hay una guerra contra las mujeres. Es real y puede ponerse fea. Las mujeres me necesitan para ser fuertes, para no tener miedo y para asegurar sus derechos?, cuenta esta mujer que empez¨® como profesora en Pennsylvania y acab¨® liderando el primer bufete de EEUU especializado en casos de discriminaci¨®n y acoso sexual. Allred sabe c¨®mo batallar esa guerra: adem¨¢s de su constante presencia medi¨¢tica, desprende una imagen de mujer herm¨¦tica (tiene una regla de no llorar frente a las c¨¢maras) y siempre ofrece apoyo visual y contacto continuo cuando sus defendidas narran sus experiencias traum¨¢ticas en televisi¨®n. Una estrategia que ha copiado su hija, la tambi¨¦n abogada Lisa Bloom (y que fue pol¨¦mica por aceptar inicialmente defender a Harvey Weinstein, despu¨¦s se retirar¨ªa y su madre defender¨ªa a varias de las presuntas v¨ªctimas del productor). ?El paso final de la sanaci¨®n es usar lo que te pas¨® a ti para ayudar a otras personas?, dice de ella la activista Gloria Steinem en la cinta. Una sanaci¨®n que se materializa cada vez que Allred pone la mano sobre el hombro de otra v¨ªctima que busca sobrevivir a su trauma.
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