Kristen Stewart: ?Necesitamos m¨¢s mujeres fuertes?
La actriz vuelve por la puerta grande con su primer papel plenamente adulto en ¡®On the road¡¯, un condensado de sexo, drogas y poes¨ªa ¡®beat¡¯.
Tras clausurar la saga Crep¨²sculo, Kristen Stewart regresa a la cartelera con uno de sus primeros papeles aut¨¦nticamente adultos. La actriz se mete en la piel de Marylou, principal personaje femenino de On the road (En la carretera), adaptaci¨®n de la m¨ªtica novela de Jack Kerouac que firma el brasile?o Walter Salles, con la que persigue romper con la virginal imagen que le confer¨ªa Bella Swan.
El esc¨¢ndalo provocado por su comentada infidelidad con el director Rupert Sanders se encargar¨ªa de fracturar del todo esa percepci¨®n, convirti¨¦ndola en el blanco de un sistema medi¨¢tico con reflejos morales dignos de los tiempos victorianos. Pero Stewart logr¨® pasar p¨¢gina y se reconcili¨® con su pareja, el actor Robert Pattinson. Se proclam¨® oficialmente que el bache estaba superado. Una idea que parece dudosa, en vista de que la actriz sigue, curiosamente, sin ning¨²n proyecto para los pr¨®ximos meses, tras apearse de Focus, la pel¨ªcula que ten¨ªa que rodar junto a Ben Affleck y, despu¨¦s, con Will Smith. Y, tal vez no por casualidad, una encuesta reciente la acaba de situar entre las celebrities m¨¢s odiadas.
Vestida con camiseta de Blondie, microshorts negros y chaqueta de cuero naranja de Balenciaga (marca que la ha elegido repetidamente como imagen), la actriz acept¨® responder a nuestras preguntas excus¨¢ndose por no quitarse unas enormes gafas de sol, que pretend¨ªan camuflar "un resfriado terrible".
?C¨®mo se mete uno en la piel de un personaje ficticio inspirado por otro de verdad? La responsabilidad debe de ser doble, ya que hay que hacer justicia al libro, pero tambi¨¦n al esp¨ªritu de la aut¨¦ntica Generaci¨®n Beat.
Esa es la palabra que mejor lo resume: responsabilidad. As¨ª me sent¨ª trabajando en esta pel¨ªcula. Le¨ª el libro a los 14 a?os y dir¨ªa que fue la primera vez que disfrut¨¦ con una lectura. Descubr¨ª que leer era algo que me gustaba gracias a este libro. Y me permiti¨® descubrir a muchos otros autores que me han marcado. Leerlo fue el punto inaugural de mi adolescencia, ese momento tan lleno de emociones, de pasi¨®n y de convicciones fuertes.
En la pel¨ªcula abundan el sexo y las drogas. ?Hasta qu¨¦ punto le contrari¨® enfrentarse a esas escenas?
No me incomod¨® en absoluto. Me sent¨ª muy segura y protegida. Sent¨ªa que se lo deb¨ªa al personaje. Soy muy diferente a ella, pero supe que ten¨ªa que perder el control para hacer un buen trabajo. Yo soy bastante introspectiva, mientras que Marylou es mucho m¨¢s abierta. La desnudez y las drogas me dieron igual. Si le digo la verdad, casi lo estaba deseando¡ Dios, esto va a quedar genial en su titular [sonr¨ªe].
?Dir¨ªa que las experiencias de los personajes eran m¨¢s transgresoras entonces que lo que son ahora?
No lo s¨¦. Puede que tomar drogas y practicar el sexo con promiscuidad sea considerado m¨¢s s¨®rdido ahora que en los cincuenta. Dir¨ªa que, para esos personajes, era una manera de exprimir al m¨¢ximo sus vidas.
?Comparte ese impulso por vivir al m¨¢ximo?
Me parece un sentimiento fundamental. Por eso el libro ha logrado conectar con tantos lectores a lo largo de las d¨¦cadas. Suele gustar a gente que se da cuenta de que sus valores, prioridades y fronteras son distintas a las de la mayor¨ªa. Es algo a lo que me sumo.
?C¨®mo se vive al l¨ªmite con todas las miradas encima?
Visto desde fuera, s¨¦ que parece imposible. Pero, al margen de cuando est¨¢s de promoci¨®n, me siento plenamente libre de hacer lo que apetezca. Si act¨²as de manera sincera contigo misma, no hay nada de lo que tengas que avergonzarte. Si la gente te ve, que te vea. No dejan de preguntarme sobre qu¨¦ siento siendo un modelo de conducta para tantas chicas y todas esas cosas. Yo respondo que, si pretendes ser un modelo, tienes que ser fiel a quien t¨² eres en realidad. Si calculas c¨®mo quieres que se perciba tu imagen, est¨¢s mintiendo¡ as¨ª que nunca ser¨¢s un modelo de ning¨²n tipo.
?No le da miedo que, en esta nueva etapa, sus fans le acaben girando la espalda?
No es asunto m¨ªo. Hago lo que quiero y lo que me gusta. Lo repito: lo m¨¢s importante es ser honesto contigo mismo. Si intentas ser algo que no eres, acabar¨¢s siendo una combinaci¨®n de cosas que no pegan juntas y terminar¨¢s no siendo nada de nada¡
En cualquier caso, el riesgo de alienar a sus fans adolescentes es algo que se le debe de pasar por la cabeza cuando acepta participar en una pel¨ªcula como On the road.
No soy consciente de ello. Me compromet¨ª a hacer esta pel¨ªcula antes de que Crep¨²sculo tuviera tanto ¨¦xito. Ya s¨¦ que no se lo creer¨¢, porque es lo que dice todo el mundo, pero no hay ninguna t¨¢ctica escondida en mis decisiones. Aunque s¨¦ que, en el fondo, todo parece muy estudiado: con Blancanieves y la leyenda del cazador debi¨® parecer que me estaba alejando deliberadamente de Crep¨²sculo, y con esta pel¨ªcula, que le estoy gui?ando el ojo al p¨²blico indie¡ Pero no es as¨ª. S¨¦ que cuesta creerlo, pero estoy siendo jodidamente honesta con usted.
?Qu¨¦ gu¨ªa entonces sus decisiones?
[Duda] Tal vez elegir a personajes que sean mujeres fuertes. Creo que en este momento necesitamos m¨¢s mujeres as¨ª.
?Se siente aliviada tras haberse deshecho de Bella?
Es lo que todo el mundo da por sentado, aunque en realidad yo he disfrutado mucho con Crep¨²sculo. Es verdad que podr¨ªa haber perdido la cabeza, pero por suerte no ha sido as¨ª.
?A qu¨¦ se refiere?
El cine es una experiencia muy extra?a, en la que compartes una gran intimidad con miles de espectadores pese a que no los conozcas. Y en el caso de Crep¨²sculo, no fueron miles, sino millones. Si no te afecta en absoluto ese tipo de experiencia, ni que sea un poco, es que est¨¢s mal de la cabeza.
Puede que tengamos una impresi¨®n equivocada, pero sigue pareciendo intimidada por los estrenos y las alfombras rojas. ?Es timidez o disgusto?
No es que no me guste, es que me sigue pareciendo sobrecogedor. ?Qu¨¦ puedo hacer? Me siento inc¨®moda en los lugares donde hay cientos de personas mir¨¢ndome. A menudo me tengo que repetir a m¨ª misma: "Conc¨¦ntrate, que no se te vaya la cabeza a otro lugar". Me resulta muy f¨¢cil encerrarme en m¨ª misma y olvidarme del resto.
Trabaja en el cine desde los nueve a?os y sus padres estaban metidos en el negocio [su padre es productor? de televisi¨®n y su madre, script; se divorciaron en septiembre de 2012 despu¨¦s de 27 a?os juntos]. ?Cree que le ha servido para tomarse a Hollywood menos en serio?
Desde luego, el hecho de crecer en una familia que trabajaba en los rodajes te hace sentir un poco m¨¢s proletaria. As¨ª es como me acerco a mi trabajo: sinti¨¦ndome una peque?a parte de un equipo. S¨¦ que sonar¨¢ muy pretencioso, pero la industria del entretenimiento no me interesa lo m¨¢s m¨ªnimo. No quiero formar parte de ella.. Lo que quiero es hacer pel¨ªculas que sean importantes.
Entre su relaci¨®n con Robert Pattinson, ?dir¨ªa que existe rivalidad profesional? ?O m¨¢s bien emulaci¨®n?
No hay rivalidad ni desaf¨ªos. Estoy muy orgullosa de ¨¦l. En el fondo, los dos estamos aprendiendo.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.