La industria se rinde a las ¡®cougar¡¯
La cosm¨¦tica, la moda y el ¡®show business¡¯ abrazan a las maduras liberadas sexualmente y rehabilitan un t¨¦rmino hasta ahora denostado.
Insulto, reafirmaci¨®n feminista, fantas¨ªa o realidad. Sea como sea, el t¨¦rmino cougar ha calado hondo en la cultura popular. No hay m¨¢s que darse una vuelta por la red para darse cuenta de la pegada de este vocablo, que se refiere a las mujeres maduras que salen con j¨®venes.
El espacio de las mujeres pantera se ampl¨ªa progresivamente. Existen webs de contactos, cruceros, libros-gu¨ªa y fiestas. Se les dedica una serie, Cougar Town, estrenada en 2009 y protagonizada por Courtney Cox. Y Harry Styles, pin up del grupo para adolescentes One Direction, es un admirador confeso de las mujeres mayores.
Aunque Joan Collins, Elizabeth Taylor o Mae West ya se enamoraron de hombres m¨¢s j¨®venes, famosas como Demi Moore, Sharon Stone, Susan Sarandon o Madonna han dado visibilidad a este tipo de parejas. ¡°Somos felices ?por qu¨¦ tengo que tengo que defenderme o pedir disculpas?¡±, ha declarado la artista Sam Taylor Wood que a los 46 a?os tiene dos hijas con el actor Aaron Johnson, m¨¢s de dos d¨¦cadas menor que ella.
Sam Taylor Wood y Aaron Johnson, una pareja con hijos que se inici¨® cuando ella le dirigi¨® a ¨¦l en ¡®Nowhere boy¡¯.
Getty
Una industria tan conservadora como la cosm¨¦tica tambi¨¦n muestra inter¨¦s por las cougars. La marca ?ber ha lanzado un v¨ªdeo para promocionar su nueva crema anti envejecimiento cuyas im¨¢genes muestran una bisabuela con el cutis de una mujer de cuarenta que se despierta junto a un jovenzuelo. Una campa?a pol¨¦mica (el making of se puede ver aqu¨ª) que ha dado que hablar y sobre todo demuestra que el fen¨®meno ha llegado al punto en el que se utiliza para vender productos.
Hace tan s¨®lo cuatro a?os el t¨¦rmino no se usaba de manera tan l¨²dica. Google lleg¨® a bloquear los anuncios de las webs de b¨²squeda de pareja para cougars, releg¨¢ndolos a la secci¨®n de adultos. El spot televisivo de una aerol¨ªnea neozelandesa que comparaba a las mujeres con depredadoras fue retirado despu¨¦s de que llovieran las protestas. El spot presentaba a estas mujeres como parte de una fantas¨ªa calenturienta. Las describ¨ªa como ¡°demasiado mayor para ser tu novia, demasiado joven para ser tu madre¡±. Un animal ¡°que no ha probado carne en d¨ªas¡± y que lleva a su presa ¡°a un apartamento donde le forzar¨¢ a escuchar a Enya o Eurythmics¡±. Como si los veintea?eros se fueran con ellas a punta de pistola.
El apetito exagerado ¨Cy algo salaz- por todo lo cougar ha presentado a sus hermanas peque?as, conocidas en Estados Unidos como ¡°pumas¡±. Treinta?eras que no preguntan la edad a los chulazos, v¨¦ase Eva Mendes y Ryan Gosling o Jennifer Aniston en la ¨¦poca en la que sal¨ªa con John Mayer. Ya son ganas de etiquetar.
Harry Styles, admirador de las mujeres maduras.
Getty
Bromas gruesas y estereotipos aparte, el t¨¦rmino est¨¢ siendo rehabilitado. Equiparar a mujeres como animales salvajes porque se comportan de la misma manera que muchos hombres rezuma sexismo. Pese a todo muchas dan la vuelta a la tortilla y reivindican la palabra como una manera de negarse a ocultar la sexualidad femenina pasada cierta edad, tal y hacer o¨ªdos sordos a la presi¨®n de las convenciones sociales.
Las diferencias entre las d¨¦cadas de los veinte y los cuarenta cada vez est¨¢n m¨¢s difuminadas y en una ¨¦poca de eternos adolescentes, donde la juventud es el¨¢stica, cobra sentido ese clich¨¦ que reza que la edad es s¨®lo un n¨²mero. Al fin y al cabo, todos estamos enganchados a Juego de Tronos, diferentes generaciones se unen frente a la consola y madres e hijas comparten los vaqueros pitillo de Trafaluc. ?Qu¨¦ m¨¢s da si tu novio tiene 15 a?os menos?
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