L¡¯Wren Scott, mucho m¨¢s que la novia de Mick Jagger

El suyo es uno de esos nombres poco conocidos para el gran p¨²blico pero enormemente respetados dentro de la industria. L¡¯Wren Scott no solo vest¨ªa con sus creaciones a las celebridades m¨¢s poderosas y respetadas ¡ªde Oprah a Madonna, pasando por la mism¨ªsima Michelle Obama¡ª, tambi¨¦n ejerc¨ªa como estilista de muchas de ellas. La ex cr¨ªtica del New York Times Cathy Horyn afirmaba que sus consejos de imagen ¡°eran los mejores y m¨¢s codiciados del mundillo¡±. Ser amiga de L¡¯Wren era casi como formar parte del club m¨¢s exclusivo y glamouroso. Tambi¨¦n te aseguraba apariciones estelares en la alfombra roja ¡ªque se lo digan, si no, a Pen¨¦lope Cruz, Christina Hendricks o Nicole Kidman, que no daban un paso sin dejarse asesorar antes por ella.

Su m¨¢s de metro noventa de estatura y su largu¨ªsima melena negra le valieron el sobrenombre de glamazona en los medios especializados. Mucho antes, le sirvieron para que Bruce Weber la descubriera en su Utah natal. Tenia veinte a?os y ya desfilaba para Chanel o Mugler y protagonizaba sesiones con Guy Bourdin o Herb Ritts. Fue este ¨²ltimo el que le dio su primera oportunidad como asistente y estilista. ¡°No me gustaqaba ser tratada como un objeto¡±, afirmo Scott en una ocasi¨®n en el diario Telegraph.

En una de esas sesiones conoci¨® a Mick Jagger, su pareja desde hace m¨¢s de una d¨¦cada. Desde entonces viv¨ªa a caballo entre los dos barrios de Chelsea, el londinense y el neoyorquino, y aunque comenz¨® a presentar sus aclamadas colecciones en el marco de la New York Fashion Week y pertenece al consejo de dise?adores americanos (CFDA), desde hace alg¨²n tiempo sus propuestas se trasladaron a la semana londinense, donde se la podia ver casi siempre junto a Victoria Beckham, Daphne Guinness y otros personajes relevantes de la moda brit¨¢nica. Scott y su marca hom¨®nima sab¨ªan hacer coincidir la idiosincrasia de ambos pa¨ªses: el glamour del Hollywood de los 50 y la vertiente m¨¢s estilizada del rock ingl¨¦s eran la base de sus colecciones y de su propia imagen.

La dise?adora y Mick Jagger llevaban juntos m¨¢s de un d¨¦cada.

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De formaci¨®n autodidacta, comenz¨® a estudiar patronaje y confecci¨®n cuando se dio cuenta de que no le era suficiente con ser una estilista de prestigio. Hoy, no hay alfombra roja en la que no firme alguno de los trajes m¨¢s rese?ados por los medios, del ajustad¨ªsimo rojo con el que Pen¨¦lope Cruz acudi¨® a los Oscars tras dar a luz al imponente vestido de pedrer¨ªa con el que deslumbr¨® Nicole Kidman en la ceremonia de 2013.

Pen¨¦lope Cruz y Nicole Kidman vestidas por L¡¯Wren Scott para acudir a los Oscar.

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A las 10 de la ma?ana de ayer el New York Post anunciaba que L¡¯Wren Scott hab¨ªa sido encontrada muerta en su apartamento de la 11th Avenida y que, a la espera de las investigaciones concluyentes, la causa del fallecimiento habr¨ªa sido el suicidio. El mismo d¨ªa en que los Rolling Stones comenzaban su gira en Australia y el mismo en que Alexander McQueen habr¨ªa cumplido 45 a?os. Incluso se baraja la posibilidad de que la dise?adora muriera ahorcada, como el creador ingl¨¦s. Cuentan que el tr¨¢gico desenlace de McQueen estuvo motivado por la reciente muerte de su madre y otro suicidio, el de su madrina y amiga Isabella Blow. Hace poco m¨¢s de un a?o, la industria nacional vivi¨® conmocionada la noticia del suicidio de Manuel Mota, director creativo de Pronovias que, tambien presuntamente, sufr¨ªa un grave cuadro de depresi¨®n.

Se habla de presi¨®n, de altos niveles de estr¨¦s y de exigencias enfermizas. De un ¨¢mbito implacable, atado a las cifras de ventas, a las incontables colecciones que hay que crear al a?o y a una exposici¨®n medi¨¢tica feroz. Es pronto para hablar de las causas de la muerte de L¡¯Wren Scott, pero el debate sobre si la industria de la moda es cada vez m¨¢s despiadada con sus creadores ha vuelto desgraciadamente a la palestra.

En 2011, Balmain anunciaba que Christophe Decarnin, su director creativo, dejaba la firma para ingresar en una instituci¨®n psiqui¨¢trica. Algo que tambien conoci¨® Yves Saint Laurent, que vivi¨® largas y constantes crisis depresivas. Y que tampoco es ajeno a John Galliano, que achac¨® sus problemas con el alcohol a esa falsa torre de marfil en la que vivi¨® durante los a?os que estuvo al frente de Dior. Es m¨¢s, cuando el creador gibraltareno se confes¨® p¨²blicamente en el programa del presentador americano Charlie Rose, afirm¨® comprender a McQueen y su tr¨¢gico final.

En cualquier caso, y sean cuales sean las causas del fallecimiento, la moda ha vuelto a perder a otra de sus figuras con m¨¢s talento. L¡¯Wren Scott quiz¨¢ no tuviera el derroche de creatividad del que gozaban McQueen o Galliano, pero contaba con el respaldo incondicional de la cr¨ªtica y el p¨²blico, y representaba mejor que nadie esa fusi¨®n magistral entre el glamour y el negocio, el espect¨¢culo y la industria que a d¨ªa de hoy tanto escasea.

Alexander McQueen habr¨ªa cumplido ayer 45 a?os.

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