Josep Font conquista Manhattan

Con solo dos colecciones al frente de la firma, Josep Font ha conseguido llevar DelPozo a otro nivel. Ahora juega en la liga de los grandes: desfila en la semana de la moda neoyorquina, una de las cuatro pasarelas de referencia en el circuito mundial, y sus dise?os se miden en la alfombra roja con los de Givenchy, Dior Haute Couture, Giambattista Valli y Alexander McQueen. Y sin nada que envidiarles. La ¨²ltima edici¨®n de la gala del Metropolitan Museum of Art de Nueva York, el evento m¨¢s sonado de la industria de la moda, ha sido la confirmaci¨®n. Dicen que todos los vestidos que pasan por el photocall deben tener antes el benepl¨¢cito de la mism¨ªsima Anna Wintour. Los que el modisto cre¨® en exclusiva para la actriz Kate Mara e Indra Rockefeller, directora de pr¨ºt-¨¤-porter de Moda Operandi (la web de venta online de referencia), debieron de gustarle, porque acapararon tantos flashes como el arriesgado estilismo de Sarah Jessica Parker, cresta incluida, o el revelador vestido de gasa transparente que luci¨® Anne Hathaway, obra de Valentino Garavani.

El proceso de creaci¨®n de los dise?os empez¨® en febrero, en el desfile de oto?o-invierno 2013/2014 de la firma en Nueva York. ?Desde la primera vez que vi sus vestidos, la impecable construcci¨®n y la visi¨®n sofisticada de Josep me cautivaron?, cuenta Rockefeller. ?Pero con la colecci¨®n de invierno super¨® todas mis expectativas.

Me di cuenta de que ¨¦l dise?a para la mujer que quiero ser?, comenta la editora de moda. ?Y hubo un look en concreto que me enamor¨®?. Se trataba de un vestido de gasa vaporoso y largo hasta los pies, con la falda en un tono verde intenso y un cuerpo drapeado de color nude que dejaba la espalda al aire. ?Cuando elegimos los dise?os para Indre y Kate, nos pareci¨® indispensable adaptarlos a sus respectivos estilos y a la ocasi¨®n?, explica Font a esta revista. Teniendo en cuenta que la tem¨¢tica de la gala, que tuvo por nombre Punk: Chaos to Couture, era un homenaje a la influencia de este movimiento en la moda, hicieron falta algunas modificaciones. ?Discutimos c¨®mo pod¨ªamos transformarlo en una traducci¨®n de la est¨¦tica punk que fuera sutil y elegante. Sopesamos varias opciones: cambiar los colores, a?adir bordados, llevarlo con o sin guantes¡­ Pero en cuanto recib¨ª el primer boceto supe que era lo que deseaba?, confiesa Rockefeller.

?Se trata de un movimiento que buscaba expresar la individualidad?, explica Font. ?Eso es lo que quer¨ªamos conseguir con el vestido de Indre. Decidimos destacar su personalidad con una silueta femenina, interpretando el punk desde su perspectiva m¨¢s rom¨¢ntica?. El verde y el nude cambiaron por el negro y el azul noche. El drapeado de la espalda se acentu¨® con varias hileras de cadenas. Y uno de los hombros se cubri¨® de clavos y tachuelas que recuerdan a una armadura. Igual que con el vestido de Kate, ?la idea era reinterpretar el concepto de la gala y unificar los detalles couture, caracter¨ªsticos de DelPozo, con la fuerza inconformista del movimiento punk?.

A partir de uno de los dise?o de la colecci¨®n de O-I 2013/14 de DelPozo, Font y Rockefeller trabajaron para crear el vestido que ella llev¨® en la gala.

Cortes¨ªa de DelPozo y Moda Operandi

Y empez¨® la fiesta. Como cada a?o, la noche result¨® un espect¨¢culo. ?Es una verdadera ceremonia. Nada m¨¢s entrar, saludas formalmente a las anfitrionas?. En esta ocasi¨®n, fueron la actriz Rooney Mara, la empresaria Lauren Santo Domingo y Riccardo Tisci, director creativo de Givenchy, sin olvidar a Anna Wintour. ?Unas trompetas anunciaron la cena, y comenz¨® el recorrido por unos largos pasillos custodiados por aut¨¦nticos punks. La escena daba un poco de miedo, la verdad?, nos cuenta entre risas el dise?ador. ?Todo estaba estudiado?. Incluso los ba?os. Vestidos para la ocasi¨®n, luc¨ªan grafitis, paredes de ladrillo y urinarios m¨¢s propios de un club nocturno de los a?os 70 que de un museo de arte.

Dif¨ªcil fijarse en el decorado con tanta celebridad deslumbrando alrededor. ?Tropezarse con Beyonc¨¦ era de lo m¨¢s normal?. Aunque no todo fueron formalidades. La verdadera fiesta vino despu¨¦s. ?Al acabar la cena?, en la que Font comparti¨® mesa con Karolina Kurkova, Anja Rubik y Coco Rocha, ?pasamos a una sala donde tocaba Debbie Harry. Todo el mundo se volvi¨® loco. No paramos de bailar?. Pero el momento m¨¢s divertido fue otro: ?La foto que me hice con Madonna. No pod¨ªa irme de la fiesta sin esa imagen. Aunque lo mejor fue encontrar a una de las se?oras m¨¢s elegantes de la noche con uno de nuestros vestidos de la colecci¨®n de oto?o-invierno 2013/2014. Y yo no lo sab¨ªa?, cuenta el dise?ador.

Nada de esto habr¨ªa sido posible sin el apoyo de Moda Operandi. El proyecto, que tiene detr¨¢s a las empresarias Lauren Santo Domingo y ?slaugh Magn¨²sd¨®ttir, supuso una revoluci¨®n en el mundo de las compras online. Su ¨¦xito fue adaptar el concepto de trunkshow a la Red: adem¨¢s de vender prendas de temporada y ediciones exclusivas, ofrece la posibilidad de hacerse con piezas de pasarela en el mismo momento del desfile, seis meses antes de que lleguen a la tienda. Aunque solo durante un tiempo limitado: apenas unos d¨ªas. Una estrategia ideada para crear deseo ¨Cal fin y al cabo, de eso trata la industria de la moda¨C.

Los detalles transformaron el vestido de DelPozo en una revisi¨®n sofisticada del movimiento al que rinde homenaje la exposici¨®n del MET.

Cortes¨ªa de DelPozo y Moda Operandi

Como orgullosa patrocinadora de esta edici¨®n de la gala del MET, Moda Operandi cre¨® una colecci¨®n tem¨¢tica con piezas de edici¨®n limitada ¨Ccomo la imponente cresta que luci¨® Sarah Jessica Parker¨C firmadas por Vivienne Westwood, Riccardo Tisci, Eddie Borgo y Olivier Rousteing, de Balmain, entre otros. Dise?adores que transformaron la est¨¦tica subversiva del punk en la base de su ¨¦xito comercial y tambi¨¦n, apenas 24 horas despu¨¦s, pusieron a la venta algunos de los vestidos que desfilaron por la alfombra roja del evento. Incluidos los de DelPozo.

Entre todos los creadores que podr¨ªan haber apadrinado, Font fue el elegido. Desde que vieron su primer desfile en el jard¨ªn de El Capricho en septiembre de 2012 ¨Cviajaron expresamente a Madrid para conocer de primera mano la colecci¨®n¨C, Rockefeller y Magn¨²sd¨®ttir se enamoraron. ?Uno de los aspectos que diferencia a Moda Operandi es que ofrece la posibilidad de descubrir. Mucha gente entra en nuestra web para conocer nuevas firmas. DelPozo es el ejemplo perfecto. Fuimos los primeros en vender sus dise?os?. El placer de encontrar nuevos talentos (?la mejor parte de trabajar en la industria de la moda?, en palabras de Rockefeller) es algo que en Espa?a a¨²n no hemos interiorizado. ?Probablemente sea cultural?, explica Font. ?En Estados Unidos se valoran las iniciativas y a las personas emprendedoras. Les es m¨¢s f¨¢cil arriesgar por algo nuevo?. Un acierto. La web Net-a-Porter, referente de las compras?online, no tard¨® en seguir sus pasos. Despu¨¦s vinieron los grandes almacenes y tiendas multimarca de Hong Kong, Kuwait, Arabia Suad¨ª, Tailandia, Qatar, Los ?ngeles, Reino Unido¡­

Desde el principio, Font ten¨ªa claro que la clave era la internacionalizaci¨®n. ?Sab¨ªamos que deb¨ªamos desfilar en la semana de la moda de Nueva York, y seguimos todos los pasos para conseguirlo?. Fue as¨ª como decidieron ponerse en contacto con Moda Operandi. Y ah¨ª empez¨® el romance. ?No recuerdo cu¨¢les fueron exactamente las palabras de Indre, pero, cuando vino a la inauguraci¨®n de nuestra?boutique?en Madrid, nos explic¨® que ven much¨ªsimos desfiles cada a?o y en pocas ocasiones viven ¡°una experiencia de moda ¨²nica e irrepetible¡±. El nuestro en El capricho fue una de esas ocasiones?.

?Hay un punk dentro de cada mujer?, comenta Rockefeller. ?Es un esp¨ªritu de independencia y libre pensamiento; y experimentar con ¨¦l a trav¨¦s de la moda es interesante?.

Cortes¨ªa de DelPozo y Moda Operandi

No fueron solo la calidad y elegancia innata de sus dise?os las que llamaron la atenci¨®n de Rockefeller. La visi¨®n hol¨ªstica que Font tiene de la firma termin¨® de convencerla de que DelPozo era perfecta para la web. ?Compartimos la forma de entender la moda?, explica el modisto. ?Al igual que ellos, hemos renunciado al modelo habitual del?pr¨ºt-¨¤-porter.?Aunque, en realidad, han rescatado una idea muy cl¨¢sica. Antes, los desfiles de costura se celebraban con las clientas, y ellas, al momento, decid¨ªan qu¨¦ prendas iban a encargar. Moda Operandi ha reciclado ese concepto y lo ha llevado a Internet. La clave es la exclusividad. Son prendas casi ¨²nicas, al alcance de muy pocos. Con esta filosof¨ªa permiten hacer un sue?o realidad sin apenas despertar?. Rockefeller lo explica de una forma menos po¨¦tica. ?Hoy el consumidor de lujo no solo busca calidad e innovaci¨®n, sino algo aspiracional. Para triunfar en esta industria, el objetivo de una firma debe estar alineado con el del cliente en ese sentido?.

A juzgar por su mete¨®rico recorrido, el de DelPozo lo est¨¢. ?Como creador, Font tiene los pies en la tierra?, contin¨²a Rockefeller. ?Sus?looks?son vendibles porque, de una manera impl¨ªcita, sabe hacer que una mujer se vea y se sienta exquisita?. Una etiqueta que el modisto no desprecia. ?No por ser comercial un dise?o deja de ser especial?, nos dice convencido el dise?ador.

El proceso creativo no es tan diferente al de un desfile?, explica el modisto. ?La clave es no perder de vista a la mujer y la funci¨®n que tendr¨¢ el dise?o. Siempre se trata de hacer que la persona se vea y se sienta especial?.

Cortes¨ªa de DelPozo y Moda Operandi