¡®Llueven vacas¡¯: las miserias del maltratador espa?ol hechas pel¨ªcula

?Pareces una puta?. ?Eres tonta?. ?A veces me pregunto qu¨¦ ver¨ªa en ti?. ?Bastante tengo con aguantarte?. ?Para qu¨¦ me casar¨ªa contigo?. Puede que a Laia Marull aqu¨ª ni la apalicen ni se orine encima aterrorizada como la Pilar de Te doy mis ojos (Ic¨ªar Bolla¨ªn, 2003), pero a su Margarita de Llueven Vacas (Fran Arr¨¢ez, 2017) tambi¨¦n la ningunean, menosprecian y le aplican un angustioso luz de gas sin descanso. Como si de un eterno retorno se tratara, Marull sirve de nexo simb¨®lico entre dos mujeres del celuloide muy distintas, pero igual de atrapadas y despose¨ªdas de poder en una relaci¨®n de maltrato. Han pasado casi 15 a?os desde que la catalana le dedicase su Goya ?a todas las Pilares de Espa?a? y aqu¨ª est¨¢ de nuevo, poni¨¦ndose en la piel de otra mujer abusada para probar que nada cambia en las din¨¢micas de sumisi¨®n y control en la violencia de g¨¦nero. Lo hace en Llueven vacas, la pel¨ªcula que se estrena el pr¨®ximo 8 de diciembre en salas. Los ingresos de taquilla, adem¨¢s, ir¨¢n destinados la Fundaci¨®n Themis de mujeres juristas para asistir judicial y legalmente a las v¨ªctimas de violencia de g¨¦nero sin recursos.

Marull no es la ¨²nica Margarita de la cinta. Son seis actrices ¨CMaribel Verd¨², Gloria Mu?oz, Mar¨ªa Barranco, M¨®nica Regueiro y Gemma Charines¨C las que se ponen en la piel de este personaje basado en el texto original de Carlos Be que public¨® la editorial Arola en 2008 y en el que se narra la claustrof¨®bica, cruda y fatalista historia de Margarita y Fernando (en la pel¨ªcula tambi¨¦n hay seis hombres interpretando al maltratador: Victor Clavijo, Secun de La Rosa, Pedro Miguel Mart¨ªnez, Asier Etxeand¨ªa, Sergio Peris-Mencheta y Eduardo Noriega). Fernando manda y Margarita obedece. Tanto, que hasta la realidad se alterar¨¢ si a este se le antoja. ?Podr¨ªan llover vacas? Si lo dice Fernando, s¨ª. A borbotones. Las consecuencias de esta violencia psicol¨®gica en una relaci¨®n de sometimiento les llevar¨¢n a un cat¨¢rtico final.

Estructurada en seis partes con una narrativa y est¨¦tica teatral en la que estos actores se ponen en la piel de la pareja en distintos momentos de su relaci¨®n, la pel¨ªcula, que cuenta con el sello del Ministerio de Sanidad, busca con este casting diverso ?demostrar que no hay un perfil definido, ni edad, ni aspecto, entre maltratador y v¨ªctima?. Lo explica al tel¨¦fono Fran Arr¨¢ez, director, que firma aqu¨ª su ¨®pera prima cinematogr¨¢fica tras pasar casi toda su vida en el mundo del teatro como actor? y productor en Producciones OFF. ?He sido feminista desde siempre, la lucha por la igualdad no debe ser solo una cosa de mujeres?, apunta. Junto a M¨®nica Regueiro, productora de la cinta, decidieron adaptar la crudeza de esta obra ?porque quer¨ªamos contar que el maltrato no es solo la violencia f¨ªsica en s¨ª, quer¨ªamos mostrar qu¨¦ sucede para que ¨¦sta llegue y hasta qu¨¦ punto puede llegar. Si en una violaci¨®n sin lazos afectivos el sentimiento de culpa de la v¨ªctima sigue existiendo durante mucho tiempo, imagina en una relaci¨®n de pareja. Quer¨ªamos desentramar los mecanismos que llevan a la dependencia y anulaci¨®n de la mujer?.

Activista del movimiento He For She en Espa?a, Arr¨¢ez aclara desde el principio la elevada cuota femenina de la cinta: ?Yo dirijo y est¨¢ basada en un texto escrito por un hombre, pero la pel¨ªcula est¨¢ hecha mayoritarimente por mujeres sin las que no hubiese sido posible, tanto en los puestos de ayudantes de direcci¨®n, direcci¨®n de fotograf¨ªa o de distribuci¨®n, por ejemplo. El equipo es eminentemente femenino y tiene un sentido que sea as¨ª?. Tanto ¨¦l como Regueiro se plantearon adaptar el texto en su h¨¢bitat natural, el teatro, para despu¨¦s pensar en una webserie, pero decidieron decantarse por una pel¨ªcula tras comprobar que las partes funcionaban mucho mejor juntas por separado. La simbolog¨ªa est¨¦tica tambi¨¦n es muy significativa. El vestuario est¨¢ inspirado ?en esas amas de casa siempre perfectas de los a?os 50 de los anuncios de Coca Cola o los inicios de Mad Men, mujeres que viv¨ªan recluidas en su hogar con una sumisi¨®n y una esclavitud pintada de colorines?. El decorado es una casa que combina elementos de los a?os 50 y 60 con piezas de dise?o art¨ªstico contempor¨¢neo, para desposeer de una ¨¦poca determinada a la cinta. Coral, la amante de Fernando interpretada por Carmen Mayordomo, combina una est¨¦tica de los 50 con tatuajes a la vista para acentuar a¨²n m¨¢s este anacronismo temporal.

Fue Maribel Verd¨² la que abri¨® las puertas a que en este proyecto se hayan involucrado altruistamente parte de la plana mayor de la interpretaci¨®n espa?ola. ?Conoc¨ªa a Maribel del teatro, se ley¨® el texto porque me lo pidi¨® prestado tras verme ley¨¦ndolo en un rodaje en el que yo ayudaba a unos actores italianos con la dicci¨®n. Pas¨® un tiempo y un d¨ªa, tomando unas cervezas, le dije que iba a dirigirlo y me dijo ¡®venga, pues lo hago¡¯. Le estar¨¦ eternamente agradecido?, cuenta Arr¨¢ez, abrumado por c¨®mo se ha involucrado todo el equipo. ?En total han participado unos 30 profesionales de forma totalmente desinteresada, profesionales que han trabajado con Milos Forman o Daniel Carlpasoro. La casa en la que rodamos es el estudio de Kikekeller en Madrid, junto al teatro Lara, que nos lo cedi¨® gratis?.

llueven vacas-trailer

Tras pasar por varios festivales, entre ellos el de M¨¢laga, la cinta ya cuenta con varias inclusiones en la lista de candidatos a nominaciones de los Goya ¨Cse anunciar¨¢n el d¨ªa 13¨C. En ella est¨¢ Gemma Charines, en como actriz revelaci¨®n. A sus 50 a?os y tras pasar media vida en el teatro, Charines ¨Cque cierra la pel¨ªcula junto a Eduardo Noriega¨C, se estrena en el cine y se siente ?emocionada? y ?agradecida? por esta distinci¨®n de la Academia. Su conexi¨®n con el personaje fue crucial. ?He sufrido maltrato psicol¨®gico y fue justo en el momento que est¨¢bamos rodando, ah¨ª me di cuenta lo que me estaba pasando y lo pod¨ªa extrapolar a mi vida?, apunta.

El director certifica que cada Margarita lo vivi¨® de forma distinta. ?A cada una le preguntaba ¡®?Llueven vacas?¡¯. Maribel me dijo ¡®No, es imposible¡¯. Cuando le dije que por qu¨¦ entonces su personaje dec¨ªa que s¨ª, ella me contest¨®: ¡®Por miedo a que me haga da?o¡¯. Laia Marull estaba convencida que s¨ª que pod¨ªan llover vacas porque ¡®el amor nos puede hacer que psicol¨®gicamente creamos en algo imposible?. Y ah¨ª es donde el director se?ala el t¨®xico legado dell mito del amor rom¨¢ntico. ?Tenemos tan asimiladas la sumisi¨®n y el amor incondicional por culpa de todas esas pel¨ªculas y canciones con las que nos hemos criado que ya va siendo hora de remediarlo?. Su pel¨ªcula lo intentar¨¢, con una f¨®rmula poco convencional pero con la voluntad de salir de ?esa anestesia que Espa?a tiene frente a la violencia de g¨¦nero. Estamos tan acostumbrados a las cifras y los n¨²meros de asesinadas que parece que no nos afecte. Quiz¨¢ se pueda conseguir con la poes¨ªa y el teatro?.