C¨®mo el pantal¨®n de ch¨¢ndal gris de estar en casa se convirti¨® en el ¨¦xito de la temporada
La prenda m¨¢s denostada del armario, destinada a pasar la tarde en el sof¨¢ o salir a pasear al perro, se convierte este invierno en el ¨²ltimo capricho de las que m¨¢s saben de moda. Incluso combinado con tac¨®n.
Era, hasta ahora, el uniforme m¨¢s c¨®modo para pasar la tarde de domingo en el sof¨¢. Tambi¨¦n para pasear al perro, hacer la compra o rendirse a la cotidianidad sin m¨¢s excusas. El pantal¨®n de ch¨¢ndal gris, esa prenda vilipendiada y situada en las ant¨ªpodas de las tendencias, se convierte este invierno en el ¨²ltimo capricho de las que m¨¢s saben de moda. Y, por raro que pueda parecer, cumple con todas las condiciones para serlo: es el m¨¢ximo esponente del athleisure, a¨²na comocidad y fe¨ªsmo a partes iguales y todo el mundo tiene uno en su armario, requisito destacable en un momento en el que es m¨¢s necesario que nunca consumir con cabeza y no dejarse llevar por las compras compulsivas.
A pesar de que a principios del a?o pasado algunos invitados a las semanas de la moda ya se atrevieron a plantarse en los desfiles con pinta de ir al gimnasio o de que Kim Kardashian o la modelo Gigi Hadid se lo pusieran hace tiempo, el ch¨¢ndal gris alcanza ahora cotas de popularidad inesperadas de la mano de prescriptoras como las danesas Pernille Teisbaek o Jeanette Madsen, la influencer y dise?adora Gilda Ambrosio u otros nombres populares en Instagram como Marie Hindkaer, Sonia Lyson o Stephanie Broek.
Sus perfiles sociales est¨¢n salpicados por ch¨¢ndales grises combinados no solo con sudaderas y zapatillas, sino tambi¨¦n con delicados mules de tac¨®n firmados por Bottega Veneta, sandalias de pelo o botas de piel. Si en 2016 la peor pesadilla de la moda, el ch¨¢ndal con tacones, se hizo realidad, el nuevo reinado del pantal¨®n gris con cinturilla de goma confirma que la tendencia no ten¨ªa nada de pasajera. ?Con mi ch¨¢ndal y mis tacones, arregl¨¢ pero informal?, que dir¨ªa Martirio, las m¨¢s avezadas en cuestiones est¨¦ticas desaf¨ªan las caducas reglas del buen gusto descontextualizando esta prenda e incluso logrando que parezca sofisticada. Iron¨ªas de la moda, resulta que ahora el look de bajar a por el pan (a saber: pantal¨®n de estar en casa, abrigo largo de pa?o colocado por encima y el primer jersey avistado en el armario) es lo ¨²ltimo.
Uno de los primeros en otorgar al ch¨¢ndal gris un inesperado s¨ªmbolo de estatus y elegancia fue Karl Lagerfeld cuando coloc¨® a Linda Evangelista ataviada con esta prenda en una campa?a de Chanel en los noventa. El desaparecido creador, tan contradictorio como pol¨¦mico, dir¨ªa despu¨¦s aquello tan famoso de ¡°El ch¨¢ndal es un signo de derrota. Cuando pierdes el control sobre tu vida, te compras un ch¨¢ndal¡±, como recog¨ªa Leticia Garc¨ªa en un art¨ªculo titulado De los suburbios y las colas de los supermercados a las pasarelas: c¨®mo el ch¨¢ndal se ha convertido en prenda de lujo. M¨¢s tarde volver¨ªa a?contradecirse una vez m¨¢s creando una colecci¨®n con claro protagonismo deportivo en 2015.
Las nuevas fan¨¢ticas de la prenda lo mismo llevan un modelo de Adidas o Nike que parece rescatado de las clases de gimnasia del instituto que se ponen los de la marca n¨®rdica masculina Soulland o versiones tan lujosas como la de Balenciaga. Tampoco pasan desapercibidos los que lucen el logo de la publicaci¨®n Hobnob, especializada en satisfacer las necesidades est¨¦ticas de los nost¨¢lgicos de Chanel vintage ?cuya dieta consiste mayoritariamente en caf¨¦ helado?, seg¨²n se definen ellos mismos. En grandes cadenas como H&M, Zara, Oysho o Mango ya es posible encontrar versiones asequibles tanto en algod¨®n como en punto. Los requisitos para hacerse con uno que pudiera contar con la aprobaci¨®n de las fashionistas de pro pasan por elegirlo en el tono de gris m¨¢s claro y un poco amplio y desali?ado. Si, adem¨¢s, lleva goma en el bajo punt¨²a doble.
La ocurrencia tambi¨¦n ha conquistado el armario de ellos y muchos de los invitados a las recientes semanas de la moda masculina han elegido el pantal¨®n gris como protagonista de su look. Seg¨²n recog¨ªa la web Vox hace unos meses, esta prenda se puso muy de moda en las redes sociales de los hombres por un motivo bien distinto a los dictados de las pasarelas. Resulta que, tanto por su tejido como por su color, permiten marcar paquete con relativa facilidad, raz¨®n suficiente para convertirse en aliados de los que buscaban provocar. Incluso el challenge?#GreySweatpantsChallenge?se convirti¨® en viral y muchos empezaron a ironizar coloc¨¢ndose en la entrepierna objetos tan variopintos como un ¨¢rbol de Navidad.
Dejando a un lado el uso m¨¢s viral y provocador de la prenda, el furor por ella solo viene a confirmar que, de momento, a¨²n est¨¢ lejos el final del streetwear como profetiz¨® recientemente el propio Virgil Abloh, uno de sus grandes impulsores. Quiz¨¢ porque la moda ya se ha vuelto urbana en s¨ª misma y el ch¨¢ndal se despoj¨®, hace tiempo, de su funcionalidad deportiva. Tambi¨¦n el de color gris.
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