Pedro S¨¢nchez, cuando ser guapo no es suficiente

El f¨ªsico del nuevo secretario general del PSOE ha sido uno de los temas destacados en la campa?a para designar al sucesor de Rubalcaba y continuar¨¢ siendolo en los pr¨®ximos meses, si nada lo remedia. El asunto no es tan banal como parece porque puede acabar siendo una losa. Va m¨¢s all¨¢ de que Esperanza Aguirre se refiera a ¨¦l como el ¡®guapito¡¯ del PSOE o la prensa af¨ªn al Gobierno se haya decantado por el candidato preferido de Moncloa centr¨¢ndose en su atractivo. En su propio partido es lo que m¨¢s destacan de ¨¦l, con cierto desden por su capacidad intelectual.

S¨¢nchez podr¨ªa ser un guapo despreocupado de su f¨ªsico volcado en resultar un pol¨ªtico cargado de ideas solventes, con criterio propio, capaz de discutir con Pablo Iglesias en las tertulias sin morder el polvo. Pero la realidad es que el nuevo secretario general del PSOE ha jugado a ser el George Clooney de la escena espa?ola, aunque sin las dotes interpretativas del actor estadounidense. Tan pendiente estuvo de no gesticular y de mantener un rictus levemente sonriente en el debate entre los tres candidatos, que los que lo presenciamos en Ferraz, ten¨ªamos que hacer un esfuerzo para no quedarnos solo en la estudiada coreograf¨ªa que le impidi¨® improvisar en alg¨²n momento.

¡°Pedro est¨¢ tan empe?ado en ser todav¨ªa m¨¢s guapo de lo que es, que pierde naturalidad y resulta impostado. Podr¨ªa tener mucha apariencia y un gran discurso, pero lo segundo es muy superficial¡±, dice un compa?ero de partido que le asesora a menudo y que apunta a su favor que ¡°no es mezquino ¨Calgo que abunda en pol¨ªtica¨C y ?es bastante consciente de sus limitaciones. Por lo que es receptivo, tiene olfato para buscar gente que sabe y siempre da las gracias¡±.

Ser como Obama no es f¨¢cil. Jugar con el atractivo personal es una baza que suele dar resultado cuando va unido a un poder de seducci¨®n que tiene m¨¢s que ver con cualidades intelectuales y con la capacidad de transmitir seguridad y generar complicidad con la gente. ¡°Ser atractivo en un mundo como la comunicaci¨®n es, en principio, una virtud. El famoso debate de Nixon contra Kennedy, en el que quienes lo escucharon por la radio dieron vencedor a Nix¨®n y los que lo siguieron en la tele a un apuesto Kennedy ?frente a su sudoroso contrincante, evidencia que tener buena imagen importa. Es un punto positivo pero no es lo fundamental¡±. ?Por si acaso punt¨²a, S¨¢nchez luce un estilo impecable. Camisa blanca, vaqueros Levi?s perfectamente planchados, blazer azul y mocasines oscuros es una de las combinaciones con las que se siente m¨¢s favorecido. Tiene una percha agradecida pero los detalles de su atuendo revelan su coqueter¨ªa. Dos vueltas de manga, dos botones desabrochados y siempre la talla justa.

Las camisas blancas siempre remangadas con dos vueltas y con dos botones desabrochados.

La frase hecha de ¡®es solo una cara bonita¡¯ ha acompa?ado a S¨¢nchez toda su carrera, que comenz¨® hace muchos a?os en el PSOE ¨Cse afili¨® a los 21 a?os y ha sido concejal en el ayuntamiento dos legislaturas y ya va por la segunda en el Congreso¨C, por mucho que ¨¦l se haya empe?ado en decir que hace un a?o y medio no estaba en pol¨ªtica. Cuando anunci¨® que se presentaba, la ¨¦lite socialista ¨Cl¨¦ase ¨¦lite como los dirigentes y fontaneros con m¨¢s cerebro¨C se tomaron a broma el arrojo. Tras darse a conocer el abrumador apoyo de los avales, en los whatsapp de esos mismos que miraban a Madina y S¨¢nchez con id¨¦ntico desd¨¦n, eran la t¨®nica general conversaciones como, por ejemplo, esta ¨Cde un conocido cargo auton¨®mico-:

¨C ¡°Qu¨¦ fuerte, parece que ganar¨¢ Pedro S¨¢nchez¡­ madre m¨ªa, alucino¡±

¨C ¡°Igual le vemos de presidente¡±

¨C ¡°Lo que me fascina es que se levante por la ma?ana y piense: tengo capacidad para presidir Espa?a. Solo hay que ver el discurso vacuo y repleto de t¨®picos que tiene¡±

La leyenda que cuenta que a Adolfo Suarez y a Felipe Gonz¨¢lez las mujeres les votaban por su sex appeal, aparte de machista pues implica que las f¨¦minas no profundizan m¨¢s all¨¢ del aspecto y carecen de criterio, hoy no solo no se sostiene, sino que tratar de sacarle partido se puede volver en contra. En cambio funciona para los rivales. En Moncloa est¨¢n encantados con Pedro S¨¢nchez pues Madina les
resulta mucho m¨¢s agrio. ¡°Rajoy se lo comer¨¢ en los debates pues es muy flojito aunque le acompa?e el porte, adem¨¢s Susana D¨ªaz, a pesar de haberle conducido a la victoria le acabar¨¢ fagocitando¡±, sostiene
un joven asesor del presidente.

La realidad suele contradecir las hip¨®tesis de que los aparentemente m¨¢s d¨®ciles guardan fidelidad eterna a sus mentores. El propio Rajoy es un ejemplo. Aznar le eligi¨® como sucesor frente a Rato porque estaba convencido de que podr¨ªa seguir influyendo en la sombra. ¡°Pedro tiene una ventaja, que no le conoce la gente. Lo cual dado el cabreo ciudadano con los pol¨ªticos, se ha convertido en un valor. En sus manos est¨¢ seguir con un discurso muy voluble y a demanda, o convertirse en un secretario general s¨®lido con una l¨ªnea de actuaci¨®n clara¡±.

Ya no se trata de convencer a la militancia interna, a la que el virus Podemos se le ha metido en el cuerpo. Hay que movilizar a los votantes, decepcionados y descre¨ªdos. S¨¢nchez tiene esa oportunidad ahora. ¡°Habr¨¢ que ver si logra convertirse en algo m¨¢s que un l¨ªder interino¡±, apostilla con desgana un dirigente madrile?o que prefiere que no se sepa que ¨¦l es uno de los que le han votado.

El Pa¨ªs

Pedro S¨¢nchez celebrando su victoria como secretario general del PSOE.

Cordon Press