Este hotel no tiene armarios
Adi¨®s a viajar con mucho equipaje o no tendr¨¢s d¨®nde colgarlo.
Basado en hechos reales. El viajero llega a un hotel, preferentemente urbano. La habitaci¨®n no es grande. No importa: todo est¨¢ aseado y parece nuevo. Puede que incluso hasta de dise?o. Entonces busca el armario. Palpa todas las paredes, rebusca por todas las esquinas, incluso en el cuarto de ba?o. Nada, no hay armario. Todo lo m¨¢s un discreto perchero. Bienvenido al ¨²ltimo grito en hoteler¨ªa: los hoteles sin armario.
Sus defensores argumentan que muchos hu¨¦spedes no deshacen la maleta. Por falta de ganas o porque con esto de que en las low cost te cobran por facturar hemos aprendido a viajar casi con lo puesto, una muda y un cepillo de? dientes o bien porque para una noche no lo encuentran necesario. Porque, todo sea dicho, estos hoteles sin armario suelen ser hoteles de paso, asequibles, para una noche, un viaje rel¨¢mpago al que uno va con el equipaje justo. Y se da por hecho que adem¨¢s ser¨¢ poco e inarrugable. Pero qu¨¦ menos que un blazer y una camisa limpia para el d¨ªa siguiente. Si se va con acompa?ante, ap¨²ntense dos prendas de abrigo exterior, los consabidos pantalones y las ya mencionadas camisas. Por no hablar del calzado con sus calcetines sobresaliendo, que acaba quedando todo lo discretamente que se puede colocado junto al perchero. O debajo, seg¨²n si el perchero est¨¢ colgado de la pared. El resultado, por coqueto que se pretenda dejar, confiere a la habitaci¨®n un p¨¢lpito similar al de un tenderete de Brick Lane Market.
La opci¨®n perchero es, sin ir m¨¢s lejos, la elegida por la Posada del Drag¨®n, ubicada en pleno barrio de La Latina madrile?o, al que se supone que uno va a echarse a la calle y no a desmontar maletas y montar armarios. Tampoco hay armarios en el Hotel and Go Miranda en Rivabellosa, a las afueras de Miranda de Ebro. Dos perchas, unos estantes y nada m¨¢s. Se define claramente como ¡°hotel low cost, moderno y funcional¡± y los armarios se ve que no responden a esos par¨¢metros. La ventaja es que as¨ª resulta m¨¢s dif¨ªcil dejarnos algo olvidado en la habitaci¨®n por no haber mirado dentro del armario.
Fuera de Espa?a tambi¨¦n optan por eliminar los armarios en las habitaciones ¡°small double¡± del Hotel Harrington de Washington. Y aqu¨ª no valen sobresaltos, que lo advierten al hacer la reserva desde su p¨¢gina web: ¡°Tienen la tarifa m¨¢s barata de nuestro hotel. Estas habitaciones son id¨®neas para el viajero individual sin ganas de gastar de m¨¢s. Todas las habitaciones de esta categor¨ªa tienen una cama doble, ba?o privado pero no hay armario ni escritorio. Hay un perchero en cada habitaci¨®n pero con un espacio de almacenamiento muy limitado. No las recomendamos para m¨¢s de un ocupante¡±. Similar filosof¨ªa muestra el Rica Hotel G20 de Oslo: c¨¦ntrico pero sin armarios. O el Fave Hotel Wahid Hasyim de Yakarta. Tambi¨¦n muchas de las habitaciones del recientemente inaugurado The Out NYC en pleno Manhattan. Y, por supuesto, en todos los Easy Hotels, la marca hotelera que sigue la misma l¨ªnea low cost que su aerol¨ªnea EasyJet: prestaciones esenciales a precios muy econ¨®micos.
Rica Hotel G20 de Oslo: c¨¦ntrico pero sin armarios.
En Trip Advisor hay quienes hasta agradecen la ausencia de los armarios, acaso por oscuros temores infantiles en los que el monstruo siempre se escond¨ªa en el armario o porque a veces se tiene la sospecha de que en la limpieza de la habitaci¨®n el interior del armario no siempre es prioritario. O porque da repel¨²s dejar tu ropa donde ha reposado la de sabe qui¨¦n y con qu¨¦ aseo.
En un punto intermedio se encuentran los hoteles que en sus habitaciones instalan armarios pero sin puertas. Pulcros y efectivos, aunque no desaparece del todo esa sensaci¨®n de tenderete. As¨ª lo hacen en el Ushua?a Ibiza Beach Hotel de Ibiza, donde, a tenor de sus fotos promocionales, se espera que los clientes lleven ropa en tonos blancos para no desentonar ni con el estilo del la isla ni con la decoraci¨®n del hotel. Aqu¨ª ya no se impone el low cost sino el dise?o de vanguardia as¨ª que unos amplios colgadores totalmente vistos han sustituido a los armarios con puertas. Cosas del interiorismo.
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