Juana Acosta: ¡°Deber¨ªan prohibir tener detr¨¢s paparazis¡±

Cuando Juana Acosta (Cali, 44 a?os) lleg¨® a Espa?a, all¨¢ por los 2000, tuvo que trabajar el acento y cultivar la paciencia para no rendirse y abandonar. ?La diversidad no era un valor al alza en Espa?a por aquel entonces?, confiesa la actriz que, 20 a?os despu¨¦s, exhibe una prol¨ªfica carrera en la misma industria que la acogi¨® con timidez. En su nuevo proyecto, la adaptaci¨®n de La templanza, la novela de Mar¨ªa Due?as ¨Cel 26 de marzo en Amazon Prime Video¨C, da vida a Carola, uno de esos personajes ?valientes y desacomplejados? que la int¨¦rprete abraza, reivindica y demanda. ?Por favor, m¨¢s puntos de vista femeninos en la ficci¨®n espa?ola, menos estereotipos y m¨¢s humanidad?.

?Ha tenido que luchar contra el estereotipo de la mujer?latina dulce y cari?osa?
Me he encontrado con todo lo contrario, imagino que por mi personalidad. Personajes fuertes, independientes y libres¡­ ser¨ªa muy pobre afirmar que las latinas solo somos dulces y cari?osas.

?Qu¨¦ cualidad del car¨¢cter espa?ol ha asimilado como propia?
Me gusta su pragmatismo y no tener miedo a llamar las cosas por su nombre; he aprendido a ser m¨¢s directa y a no darle tantas vueltas a todo. Siento que me he europeizado mucho.

Afirma seguir trabajando con un foniatra para perfeccionar el acento castellano. ?Hay alguna palabra que se le siga resistiendo?
Llevo muchos a?os trabaj¨¢ndolo y particulariz¨¢ndolo en cada personaje. Ya no tengo problema en cambiar el ¡®chip¡¯ y pasar de un acento a otro, pero todav¨ªa hay ciertas uniones de letras tipo la ¡®s¡¯ y la ¡®c¡¯ que cuando se juntan en palabras como ¡°piscina¡± requieren de m¨¢s horas de trabajo.

La reina Letizia calific¨® su cabello de ?pelazo? en una recepci¨®n. ?C¨®mo reaccion¨® usted?
Lo gracioso es que antes de decirlo meti¨® su mano en mi pelo para sentir la cantidad¡­ ?y afirmarlo con conocimiento de causa! Me pareci¨® una mujer encantadora, cercana. Mi reacci¨®n fue natural, como no crec¨ª con la monarqu¨ªa me cuesta considerarla como algo tan protocolario.

?Hay algo en Madrid que la lleve hasta su Colombia natal?
El centro de la ciudad a veces me recuerda al barrio de La Candelaria, en Bogot¨¢, con sus casas coloniales, sus ventanas de madera y sus alegres colores.

Dice no ser un icono de estilo, pero ?cree que tiene alg¨²n peso en el ¨¦xito profesional?
Para nada. Lo ¨²nico que habla de una int¨¦rprete es su trabajo, todo lo dem¨¢s es adorno. Cuidar las apariciones p¨²blicas solo te posiciona de cara a la publicidad, pero no a la interpretaci¨®n.

Tiene m¨¢s de 420.000 seguidores en Instagram. Si ma?ana decidiera cerrar su cuenta, ?afectar¨ªa a su carrera como actriz?
Quiero pensar que no, me parecer¨ªa muy triste que nos eligieran por la cantidad de seguidores que tenemos en Instagram. De lo que s¨ª estoy convencida es que para poder seguir trabajando con marcas en temas publicitarios o de promoci¨®n debo conservar la cuenta y cuidarla muy bien.

Su vida personal tambi¨¦n copa titulares. ?Sufren las actrices un mayor escrutinio que sus compa?eros?
Es algo que me incomoda bastante. No entiendo por qu¨¦ despu¨¦s de mi separaci¨®n mi vida privada pas¨® a ser tan comentada. Es muy violento tener paparazis detr¨¢s, incluso dentro de los restaurantes mientras como. Deber¨ªa estar prohibido.

?Cu¨¢nto le dura el cabreo despu¨¦s de no haber conseguido un papel?
Manejar la frustraci¨®n es algo que deber¨ªan ense?arnos en la escuela. Por lo general lo llevo bien, pero a veces cuesta colocarlo cuando el proyecto es maravilloso y sientes que te lo mereces. El d¨ªa que entiendes que un ¡°no¡± no significa que eres mejor o peor actriz, sino que buscan algo muy especifico y que elegir¨¢n a quien m¨¢s se acerque a lo que el director se imagina, vives mucho mas tranquila.

?Qu¨¦ novela adaptar¨ªa al cine o a la televisi¨®n si surgiera la ocasi¨®n?
De las que he le¨ªdo ¨²ltimamente hay dos que me parecen id¨®neas. Feliz final, de Isaac Rosa, que habla sobre una ruptura contada desde el final hacia el principio, un viaje sobre la transformaci¨®n del amor, las relaciones de pareja y la familia. Tambi¨¦n C¨®mo mat¨¦ a mi padre, de la autora colombiana Sara Jaramillo Klinkert, una historia que me conmovi¨® profundamente y con la que me sent¨ª identificada de principio a fin.