Vaqueros de aqu¨ª a la eternidad

Corren malos tiempos para los vaqueros de dudosa fabricaci¨®n que est¨¢n para tirarlos tras unos pocos meses de uso. Cada vez son m¨¢s las firmas que eligen materiales y procedimientos sostenibles para elaborar sus tejanos y proclaman larga vida al jean gracias a iniciativas que los hacen inmortales. Una de las primeras fue Nudie Jeans, esta marca sueca nacida en 2001, se empe?¨® en elaborar vaqueros de algod¨®n ecol¨®gico de alta calidad y su compromiso con el medio ambiente les ha llevado a dar un paso m¨¢s bastante significativo: abrir una tienda de reparaci¨®n de jeans en la que se arreglan las prendas de la firma que de otro modo pasar¨ªan a formar parte de la historia de nuestro armario. Afirman que, por encima de seguir vendiendo vaqueros, quieren contribuir a que los consumidores demos mayor durabilidad a la ropa. As¨ª que el 188 de Bowery en Nueva York es la primera tienda a la que llevar unos tejanos rotos y salir con ellos como nuevos sin pagar nada por la reparaci¨®n.

Nudie lleva a?os ensayando la idea de dar valor a su marca a trav¨¦s de la promoci¨®n del arreglo de sus prendas denim. En sus m¨¢s de veinte puntos de venta ofrecen un servicio de arreglo inmediato de vaqueros y a trav¨¦s de su p¨¢gina web puede solicitarse un kit de reparaci¨®n para que, si lo preferimos, los arreglemos nosotros mismos en casa. Desde la tienda que la firma tiene en Barcelona aseguran para S Moda que ¡°cada d¨ªa llegan vaqueros para reparar¡± y que la persona que los arregla trabaja directamente en la tienda donde ¡°el cliente puede tener listos sus vaqueros en apenas horas con un coste de entre 8 y 12 euros. Mucha gente los trae, cada vez m¨¢s, porque los jeans cuanto m¨¢s usados m¨¢s c¨®modos y a menudo da pena tirarlos¡±, nos dicen.

Ante declaraciones de intenciones como la anterior la industria va tomando conciencia de la necesidad urgente de responder a unos consumidores que no quieren seguir sinti¨¦ndose culpables cada vez que se visten. Y hasta las marcas de moda r¨¢pida, criticadas por pr¨¢cticas poco ¨¦ticas y sostenibles, se afanan en limpiar su imagen con colecciones que se dirigen a sus clientes m¨¢s concienciados, admitiendo as¨ª que un cambio que es lento pero imparable.

El ejemplo m¨¢s reciente lo encontramos en los vaqueros sostenibles de H&M. Diecis¨¦is modelos de algod¨®n org¨¢nico y reciclado, provenientes de su iniciativa de recogida de ropa usada y que ya se venden en las tiendas de la marca. Bajo el nombre Re-nace el vaquero, la firma sueca ha encargado a tres j¨®venes dise?adores (Herida de Gato, Leyre Valiente y Juan Carlos Pajares) customizar algunos de esos vaqueros ecofriendly como acci¨®n para promocionar la campa?a que ya lleva tres ediciones en Espa?a.

Pero nuestro pa¨ªs da respuesta a la sensibilidad medioambiental con otras f¨®rmulas enfocadas en los vaqueros. Empresas locales, que saben que el ecojean es un nicho de mercado que re¨²ne todas las condiciones para mantenerse. Los vaqueros Xiro, de dise?o y producci¨®n gallegos se realizan con algod¨®n org¨¢nico y cuentan con el distintivo GOTS, un sello que certifica todos los pasos que se dan en la transformaci¨®n del tejido y garantiza que los residuos se gestionan adecuadamente y que los trabajadores que los realizan tienen asegurados sus derechos fundamentales.

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Como Nudie, Xiro tambi¨¦n ofrece en su web f¨®rmulas encaminadas a completar un c¨ªrculo sostenible para que nuestra ropa genere el menor impacto posible. Apuestan por lavar menos los vaqueros a cambio de meterlos un d¨ªa entero en el congelador y por aprender a distinguir una prenda ecol¨®gica de otra que no lo es.

Ninto Jeans es otra marca ¡®made in Spain¡¯ que defiende jeans ¨¦ticos, ecol¨®gicos, sostenibles y cercanos a la filosof¨ªa slow fashion. Su manifiesto habla del entorno y de los cuidados procesos de fabricaci¨®n. Pero tambi¨¦n habla de ¡°felicidad¡±. Y aunque puede que todav¨ªa no nos haga felices pagar m¨¢s por los vaqueros, una prenda imprescindible de cualquier armario, entender que ese es el gesto con el que podemos contribuir a salvar el planeta tarde o temprano nos sentar¨¢ tan bien como nuestros tejanos favoritos.