Y Luther king se convirti¨® en un icono del estilo protesta
La directora de vestuario de la pel¨ªcula Selma revela c¨®mo los l¨ªderes adoptaban un aspecto pulcro y pulido para reivindicar respeto.
La pel¨ªcula Selma, que recrea las marchas por los Derechos Civiles que tuvieron lugar en esa ciudad del Sur de Estados Unidos en 1965, empieza con una conversaci¨®n sobre la ropa. En la escena, Martin Luther King se dispone a recoger el Premio Nobel de la Paz en la Universidad de Oslo. Mira en el espejo su fina corbata de seda, echa un vistazo a su esposa, la deslumbrante Coretta, y sospecha que se est¨¢n pasando. Sus seguidores no van a entender tanta ostentaci¨®n. Ella le despeja las dudas: no se recoge un premio hist¨®rico vestido de cualquier manera y los King, elocuentes, elegantes, con todo el peso de la historia sobre sus hombros pese a tener en ese momento treinta y pocos a?os, son el orgullo de la comunidad.
Primera escena de Selma, en la que los protagonistas se visten para recoger el Nobel de la Paz
Cordon Press
La directora de vestuario del filme nominado a los Oscar, Ruth E. Carter, admite que tuvo que ?caminar sobre una l¨ªnea muy fina? a la hora de recrear a esos personajes hist¨®ricos. Con el vestuario del protagonista, al que da vida el actor David Oyelowo, quer¨ªa reflejar que a pesar de ser ?un gigante entre los hombres, alguien con l¨ªnea directa con el presidente de EE UU?, tambi¨¦n era ?un hombre sencillo, un pastor del Sur?. Con su mujer, en cambio, se dej¨® llevar: ?Carmen Ejogo ¨Cactriz que la interpreta¨C y yo quer¨ªamos subir el nivel. Fue al investigar para la pel¨ªcula cuando vimos que ella era un icono de estilo y quisimos darle una presencia notable?. Eso se traduce en trajes de chaqueta, guantes blancos, faldas tubo, tacones discretos y peinados impecables.
King luce trajes y corbata durante toda la pel¨ªcula excepto en la marcha final. ?El presidente Lyndon B. Johnson hab¨ªa enviado a la Guardia Nacional para proteger a los manifestantes, el tiempo se hab¨ªa vuelto m¨¢s c¨¢lido, marchaban familias enteras con ni?os cantando y sonriendo¡ La camisa azul p¨¢lido y la gorra que luce en la cinta son exactamente como las que llev¨® King, y para m¨ª significan algo muy bello: el principio del cambio?, explica Carter.
El rapero Common interpreta a James Bevel.
Cordon Press
Los manifestantes luc¨ªan su mejor ropa para protestar. Sombreros para las se?oras y abrigos pensados para protegerse de la violencia policial. Los miembros de la SNCC (Comit¨¦ de Estudiantes No Violentos, en sus siglas en ingl¨¦s) llevaban un look caracter¨ªstico de camisa, corbata y peto tejano, en solidaridad con los granjeros pobres del Sur. ?Los activistas vest¨ªan as¨ª para tumbar las ideas de supremac¨ªa blanca. Su imagen evocaba un est¨¢ndar de respetabilidad de clase media?, apunta Jeffrey Ogbar, autor del libro Black Power: Radical Politics and African American Identity.
Incluso la Naci¨®n del Islam, de Malcolm X, quien aparece como opositor al doctor King, trataba de proyectar, seg¨²n Ogbar, ?un sentido de unidad, ¨¦xito y disciplina? que se reflejaba en sus pajaritas blancas. Todo eso cambi¨® con la llegada de los Panteras Negras. Con sus peinados afro, sus chaquetas de piel y sus boinas pretend¨ªan meterle el miedo en el cuerpo a la mayor¨ªa blanca. ?Su look era medio beatnik, medio cubano revolucionario. Suger¨ªa que la pol¨ªtica radical tambi¨¦n pod¨ªa ser cool?, resume Ben Arogundade, autor del libro Black Beauty. ?Usaban el estilo para distinguirse de la formalidad de Luther King y para atraer gente joven al movimiento. Los trajes eran para los viejos, las boinas para los hipsters?.
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