"Me llam¨® enfermo por ser gay. Que lo echen"
Juan Torres es el primer homosexual que ha presentado una querella contra su empresa por homofobia
Juan Torres no aparenta la edad que tiene. Roza ya los 40, pero su aspecto es el de un hombre m¨¢s joven. Se presenta en el edificio Col¨®n de Barcelona con camisa blanca (rollo ibicenco), tejanos ajustados y unas sandalias m¨¢s elegantes que muchos zapatos. No se siente inc¨®modo ante la c¨¢mara. Al contrario. "Me estoy divirtiendo", dice. Anoche regres¨® de vacaciones y hoy ha explicado su caso. Junto a su ex compa?ero de trabajo, Torres se ha convertido en el primer homosexual que presenta una querella criminal por homofobia contra una empresa en Espa?a.
Torres tiene un objetivo: que lo readmitan en la empresa -la multinacional austriaca del transporte y log¨ªstica Gartner KG- y despidan al delegado en Barcelona. ?ste calific¨® a Torres y a Gerald Rainer de "enfermos" en un correo electr¨®nico que envi¨® a su jefe en Austria. Eso es, al menos, lo que se recoge en la querella criminal presentada por el despacho Aequo Advocats, que ha sido admitida a tr¨¢mite por el juzgado de instrucci¨®n n¨²mero 33 de Barcelona. "Mi jefe me llam¨® enfermo por ser gay. Quiero que lo echen", declara sin tapujos ante la sede de Gartner en la avenida de las Drassanes, cerca del puerto de Barcelona.
Si la empresa no reacciona, en todo caso, quiere que el gerente pague ante la justicia por lo que ha hecho. "Ha cometido un delito. Ha hecho cosas que ni las leyes ni la sociedad del siglo XXI toleran. As¨ª que tiene que pagarlo", insiste. La querella, elaborada por el letrado David Aineto, acusa a los responsables de la firma austriaca de los delitos de revelaci¨®n de secretos -por difundir su condici¨®n de gays- injurias de contenido hom¨®fobo y discriminaci¨®n por raz¨®n de sexo.
Al entrar en la empresa, la relaci¨®n de Torres con su jefe era "impecable". ?ste le hac¨ªa part¨ªcipe de todos sus proyectos y le insist¨ªa en que estaba "muy contento" con su trabajo. Pero el empleado empez¨® a sospechar cuando el gerente, siempre seg¨²n su versi¨®n, le hizo saber que un compa?ero era "mariquita". "Ah¨ª empec¨¦ a mosquearme. ?Qu¨¦ pasa, que me lo dec¨ªa a m¨ª porque se me notaba menos que era gay?".
El a?o pasado, tras las vacaciones, la cosa cambi¨®. "Empez¨® a humillarme p¨²blicamente y a montarme unas broncas espectaculares". La raz¨®n: el jefe hab¨ªa le¨ªdo unos correos que Torres y su compa?ero Rainer se intercambiaban. "Nos explic¨¢bamos qu¨¦ hab¨ªamos hecho el fin de semana, como hace todo el mundo". Como consecuencia del supuesto acoso laboral, Torres tuvo que recibir tratamiento psiqui¨¢trico y cogi¨® la baja por depresi¨®n. La empresa le despidi¨® hace unos meses y ahora est¨¢ en el paro, a la espera de que se solucione esta historia tanto por las dos v¨ªas que tiene abiertas: la penal y la laboral.
La suerte sonri¨® a los dos compa?eros de trabajo. "Un d¨ªa est¨¢bamos solos en la oficina y vimos un papel en la impresora". Ese documento ha resultado de enorme valor para armar la querella. Se trata de una copia del correo electr¨®nico que el gerente envi¨® a su jefe. All¨ª no s¨®lo les llamaba "enfermos", sino que informaba sobre ciertos "e-mails guarros" que ambos se enviaban, por lo que el gerente podr¨ªa haber vulnerado el derecho a la intimidad de los trabajadores. Torres habla alem¨¢n y su compa?ero es austriaco, por lo que pudieron leer el correo sin problema. "Dec¨ªa que hab¨ªa descubierto que desgraciadamente somos gays, y que estaba hartos de nosotros, unos enfermos", detalla indignado.
Torres s¨®lo espera ahora encontrar trabajo. Y se permite bromear: "Espero que no me cojan man¨ªa en las entrevistas de trabajo por haber explicado todo esto".
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