?Hac¨ªa Jaycee una 'vida normal'?
Sus hijas iban a fiestas de cumplea?os y ella siempre ten¨ªa una sonrisa en la cara, seg¨²n sus conocidos
A pesar de que su casa era el interior de un sucio cobertizo, Jaycee Lee Dugard, la mujer secuestrada en 1991 que fue localizada la pasada semana, y las dos hijas que presuntamente tuvo con su secuestrador, hac¨ªan una vida de lo m¨¢s normal, seg¨²n han asegurado conocidos del detenido y clientes de su empresa, en la que ella lleg¨® a trabajar.
No s¨®lo ella. Sus hijas, de 15 y 11 a?os, iban a fiestas de cumplea?os y mostraban gran afici¨®n por la serie infantil Hannah Montana, seg¨²n ha dicho al canal CNN Cheyvonne Molino, amigo de los sospechosos del caso. "Los medios de comunicaci¨®n hacen que parezca como si estas ni?as vivieran como lobos o ni?os de la jungla en una especie de mazmorra. Puede que fuera as¨ª, pero a m¨ª no me daba esa impresi¨®n", ha se?alado Molino, quien ha dicho que Garrido se refer¨ªa a las peque?as por los nombres de Starlet y Angel.
La peque?a Allissa
"Eran educadas, con buenos modales", ha indicado Molino. Por su parte Dugard, secuestrada hace 18 a?os en la localidad de South Lake Tahoe (California), ayudaba a Phillip Garrido, su supuesto secuestrador, a administrar una peque?a imprenta desde su casa en Antioch, al este de San Francisco, donde los clientes la conoc¨ªan por el nombre de Allissa, que dec¨ªa ser hija de Garrido. Ten¨ªa acceso a Internet e incluso envi¨® correos electr¨®nicos. "Siempre ten¨ªa una sonrisa hermosa en la cara", ha explicado Deepal Karunaratne, uno de los clientes. "Era una chica muy guapa", ha a?adido.
Ben Daughdrill, otro visitante asiduo, ha apuntado que nada llamaba la atenci¨®n en el negocio y que Dugard siempre tuvo acceso a un tel¨¦fono y a un ordenador en la tienda. "Obviamente algo deb¨ªa pasar que a¨²n no sabemos", ha manifestado en alusi¨®n a las razones por las que Dugard nunca denunci¨® los hechos. Karunaratne, no obstante, ha comentado que a veces s¨ª resultaba chocante la vestimenta de las ni?as.
"No iban como ni?as adolescentes", ha indicado, para agregar que "vest¨ªan de forma muy conservadora". Garrido, de 58 a?os, y su esposa Nancy, de 54, que se declararon no culpables, fueron acusados la pasada semana de cargos m¨²ltiples por violaci¨®n, actos lascivos y secuestro con objetivos sexuales contra Dugard.
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