Rouco advierte de que la salida de la crisis es imposible "sin hombres rectos"

El cardenal Antonio Mar¨ªa Rouco expuso ante la Conferencia Episcopal su hoja de ruta para afrontar las crisis religiosa, social y econ¨®mica que sufre Espa?a. El l¨ªder de los obispos lleva semanas con una actividad fren¨¦tica, en varios campos, pero le faltaba presentar su estrategia a la jerarqu¨ªa del catolicismo, reunida en asamblea en Madrid. Lo hizo con un discurso de 5.016 palabras. Le escuch¨® el nuevo nuncio (embajador) del Papa en Espa?a, el arzobispo italiano Renzo Fratini, pero hubo ausencias sonadas. No estaban el hasta ahora obispo de San Sebasti¨¢n, Juan Mar¨ªa Uriarte, ni su predecesor, Jos¨¦ Mar¨ªa Seti¨¦n. Tampoco el cardenal em¨¦rito de Sevilla, Carlos Amigo, al que el jueves hay que sustituir, en votaci¨®n secreta, como miembro del Comit¨¦ Ejecutivo de la Conferencia Episcopal.

Los prelados abordan una agenda apretada, por iniciativa de Rouco. Lo hacen en un ambiente de cambios profundos, liderados por el cardenal de Madrid con mano firme. Hay una decena de sedes diocesanas vacantes, y ya es evidente que los nombramientos ser¨¢n impulsados por Rouco. El relevo de Uriarte en San Sebasti¨¢n por el obispo de Palencia, Jos¨¦ Ignacio Munilla Aguirre, es un s¨ªntoma. Un moderado ha sido relevado por un predicador rocoso, tachado de ultra conservador. El cardenal Rouco est¨¢ escogiendo a eclesi¨¢sticos con un perfil muy se?alado, con la idea fuerza de poner coto en Espa?a a lo que la jerarqu¨ªa considera "s¨ªmbolo universal de un laicismo feroz". Se equivocan quienes juzguen los cambios con valoraciones ideol¨®gicas cl¨¢sicas -nada se parece m¨¢s a un obispo que otro obispo-, pero s¨ª es posible analizarlos en t¨¦rminos de pastoral. Rouco busca la unidad de acci¨®n y que los peones de esa acci¨®n planten cara a la crisis eclesial sin desentonar en la contundencia del discurso o introduciendo matices nacionalistas.

Pero los obispos son pastores. Poco podr¨¢n contra el supuesto laicismo reinante si les flaquea el reba?o. El primer punto del debate abord¨® la crisis de vocaciones. Rouco dio datos sobre la profundidad de esa crisis. "Los sacerdotes somos menos y de m¨¢s edad que hace algunos a?os", dijo. En Espa?a hay 23.059 parroquias; 10.615 no tienen sacerdote titular. Lo peor es que la situaci¨®n lleva camino de empeorar, a juzgar por este dato que Rouco subray¨®: la media de edad de los curas en activo es de 63,3 a?os. "En alguna zona alcanza los 72,04 a?os", a?adi¨®. Tampoco es mejor la media de edad de los obispos.

El cardenal propuso, adem¨¢s, una reflexi¨®n a fondo sobre la crisis social y econ¨®mica que vive Espa?a. Este es el contexto del debate: "La crisis econ¨®mica persiste y, entre nosotros, el desempleo no retrocede, sino que aumenta. Los fr¨ªos datos no deben ocultarnos lo que las cifras representan para las personas: familias en dificultades para hacer frente a las necesidades elementales de alimentaci¨®n, vivienda y educaci¨®n; j¨®venes que ven retrasado su acceso al primer trabajo, e inmigrantes que se encuentran desamparados por hallarse con menos respaldo familiar y social".

Tambi¨¦n aludi¨® a la crisis de valores. "Los an¨¢lisis de las causas econ¨®micas, sociales y pol¨ªticas son imprescindibles. Pero no son suficientes por s¨ª mismos. El sistema financiero y econ¨®mico se ha visto afectado por quiebras de orden ¨¦tico y, por tanto, dependientes de la conducta de las personas. Sin motivaciones adecuadas es dif¨ªcil alimentar y sostener conductas ¨¦ticas. El desarrollo es imposible sin hombres rectos. Lamentablemente hay corrupci¨®n e ilegalidad tanto en el comportamiento de sujetos econ¨®micos y pol¨ªticos de los pa¨ªses ricos, nuevos y antiguos, como en los pa¨ªses pobres", agreg¨®.

Esta apelaci¨®n a la "crisis moral y econ¨®mica por la que atraviesa la sociedad espa?ola" condujo el discurso del cardenal a asuntos de preocupaci¨®n constante entre la jerarqu¨ªa. Rouco volvi¨® a insistir en su condena al aborto voluntario. "Cuando una sociedad se encamina hacia la supresi¨®n de la vida acaba por no encontrar la energ¨ªa necesaria para esforzarse en el servicio del verdadero bien del hombre. La apertura a la vida es una riqueza social y econ¨®mica. Grandes naciones han podido salir de la miseria gracias al gran n¨²mero y a la capacidad de sus habitantes. Al contrario, naciones en un tiempo florecientes pasan ahora por una etapa de incertidumbre, y en alg¨²n caso de decadencia, precisamente a causa del bajo ¨ªndice de natalidad. Es el caso de las sociedades europeas y, en particular, de Espa?a", dijo.

Tambi¨¦n arremeti¨® contra el Gobierno socialista, sin citarlo, por la actual pol¨ªtica educativa. Antes de reclamar un "pacto escolar" nacional, el cardenal expres¨® su decepci¨®n "por la deficiente regulaci¨®n jur¨ªdica de la ense?anza de la religi¨®n y moral cat¨®lica en la escuela". "Los problemas se remontan a la aplicaci¨®n normativa de la LOGSE y siguen sin ser resueltos y, por tanto, agravados. La regulaci¨®n vigente sobre esta materia no se adecua a lo previsto en el Acuerdo sobre Educaci¨®n y Asuntos Culturales entre la Santa Sede y Espa?a. La carencia de una verdadera alternativa acad¨¦mica coloca a los profesores y alumnos de religi¨®n y moral en una situaci¨®n de verdadera heroicidad pedag¨®gica", sentenci¨®.