El nuevo acelerador de part¨ªculas LHC ya es el m¨¢s potente del mundo

Los ingenieros y f¨ªsicos del nuevo acelerador de part¨ªculas europeo LHC siguen trabajando a toda m¨¢quina para ponerlo a punto y esta madrugada, s¨®lo diez d¨ªas despu¨¦s de inyectar los primeros haces de part¨ªculas, han logrado acelerarlos hasta una energ¨ªa de 1,8 teraelectronvoltios (TeV), que es el record mundial. El LHC se ha convertido as¨ª en el acelerador m¨¢s potente que se ha construido nunca, superando al Tevatron de Fermilab (Chicago, EEUU) que ten¨ªa el r¨¦cord hasta hoy con casi 1 TeV por haz. "Todav¨ªa estamos haci¨¦ndonos a la idea de los bien que est¨¢ transcurriendo esta fase de puesta a punto del LHC", ha dicho esta ma?ana Rolf Heuer, director del Laboratorio Europeo de F¨ªsica de Part¨ªculas (CERN, junto a Ginebra, en cuyo t¨²nel de casi 27 kil¨®metros de circunferencia est¨¢ instalado en nuevo acelerador. "Es fant¨¢stico", a?ade Heuer. "Sin embargo, seguimos haciendo todo paso a paso y todav¨ªa queda mucho antes de que podamos empezar los experimentos de f¨ªsica, en 2010. Yo guardo el champagne en hielo hasta entonces".

El CERN est¨¢ realizando todas las operaciones sin compromisos previos, es decir, sin avisar exactamente cu¨¢l es el siguiente paso, en cierta medida porque cada paso a dar depende de c¨®mo haya ido el precedente. Lo cierto es que el plan para esta semana era aumentar la intensidad de los haces, pero no se hab¨ªa planteado expresamente el objetivo de aumentar tanto la energ¨ªa. Los ingenieros han visto esta madrugada que todo iba bien y han decidido dar un paso m¨¢s, el de los 1,8 TeV por haz. El plan oficial, mucho m¨¢s conservador era alcanzar 1,2 TeV por haz antes de finalizar el a?o, pero en los ¨²ltimos d¨ªas hab¨ªa rumores en el CERN acerca de superar incluso ese nivel inmediatamente, llegando a 2 TeV esta semana. Ya hoy lunes ha quedado el list¨®n muy cerca. El calendario oficial es ahora aumentar la intensidad de los haces y dentro de unos d¨ªas dedicar una semana a provocar colisiones abundantes en los puntos de intersecci¨®n de los haces, en el centro de cada uno de los cuatro grandes detectores, para ir calibr¨¢ndolos. En el LHC, cuando est¨¦ a pleno rendimiento, se generar¨¢n 600 millones de colisiones de protones por segundo.

"Hace 20 a?os pusimos en marcha aqu¨ª el m¨¢s grande acelerador del CERN, el LEP [para el que se construy¨® el t¨²nel de 27 kil¨®metros que ahora ocupa el LHC]", ha comentado Steve Myers, director de Investigaci¨®n y Tecnolog¨ªa del laboratorio europeo. "El LEP fue una gran m¨¢quina pero esta es algo m¨¢s", contin¨²a Myers. "Lo que nos llevaba d¨ªas o semanas con el LEP lo vamos a hacer en horas con el LHC, as¨ª que todo augura un gran programa de investigaci¨®n".

El encendido del acelerador comenz¨® el pasado d¨ªa 20 con la inyecci¨®n de un haz de part¨ªculas en el tubo de alto vac¨ªo del acelerador, enfriado hasta 271 grados cent¨ªgrados bajo cero (temperatura obligada dado que los grandes imanes que forman la m¨¢quina son superconductores). Enseguida se prob¨® con el haz que circula en sentido contrario y a los dos d¨ªas ya estaban circulando los dos haces simult¨¢neamente. Pero en ese momento el LHC no aceleraba las part¨ªculas todav¨ªa, sino que ¨¦stas circulaban por ¨¦l a la energ¨ªa de entrada procedente de los aceleradores previos, a 450 GeV. El lunes pasado y casi por casualidad, cuando se estaban alineando los haces, se produjeron las primeras colisiones de part¨ªculas, que vieron perfectamente los cuatro detectores. Poco despu¨¦s comenz¨® la aceleraci¨®n realmente en la nueva m¨¢quina, llegando a 540 GeV.

Si todo marcha tan bien como hasta ahora, el LHC alcanzar¨¢ a principios del a?o que viene una energ¨ªa por haz de 3,5 TeV, y los f¨ªsicos consideran que entonces ya podr¨¢n empezar a obtener datos cient¨ªficos. los expertos consideran que desde la inyecci¨®n de los primeros haces a esa alta energ¨ªa hasta las primeras colisiones con ella pasar¨¢n en torno a cuatro semanas. El nuevo acelerador est¨¢ dise?ado para alcanzar colisiones a 14 TeV, 7 por haz, pero esto ser¨¢ m¨¢s tarde.