Amable Li?¨¢n recibe el homenaje de los ingenieros aeron¨¢uticos

Amable Li?¨¢n, un cient¨ªfico de renombre mundial, contin¨²a siendo, a pesar de los continuos reconocimientos y homenajes recibidos, como el que la Universidad Polit¨¦cnica de Madrid le acaba de conceder en la Escuela T¨¦cnica Superior de Ingenieros Aeron¨¢uticos, un hombre cercano, atento, solidario, agradecido, humilde, cualidades que configuran una gran personalidad m¨¢s all¨¢ de su perfil como investigador.

Li?¨¢n (Noceda, Le¨®n, 1934) curs¨® sus estudios universitarios en la Escuela T¨¦cnica Superior de Ingenieros Aeron¨¢uticos (ETSIA) de Madrid, entre 1955 y 1960, y estudios de postgrado en el California Institute of Technology (Caltech). Entre 1963 y 1974 fue investigador del Instituto Nacional de T¨¦cnica Aeroespacial (INTA), y desde 1965, catedr¨¢tico de Mec¨¢nica de Fluidos en la ETSIA, sucediendo a Gregorio Mill¨¢n, una figura ¨²nica en el panorama cient¨ªfico espa?ol de la ¨¦poca. En la actualidad, es Profesor Em¨¦rito de la Universidad Polit¨¦cnica de Madrid. Adem¨¢s, ha ejercicio la docencia entre otras, en las universidades de California, Michigan, Princeton, Stanford y Yale, en Estados Unidos, y en las de Marsella y Pierre et Marie Curie en Europa.

Entre otras distinciones, Amable ha recibido la Zeldovich Gold Medal, la m¨¢xima distinci¨®n en el campo de la Combusti¨®n, y el Premio de Pr¨ªncipe de Asturias de Investigaci¨®n Cient¨ªfica y T¨¦cnica. Desde los a?os noventa del pasado siglo, Li?¨¢n es considerado el mejor te¨®rico vivo de la Combusti¨®n, a nivel mundial. Por ejemplo, existe una ecuaci¨®n de Li?¨¢n, un esquema cin¨¦tico de Li?¨¢n-Zeldovich, y un r¨¦gimen de llama premezclada de Li?¨¢n, que pasar¨¢n a los libros de texto. Es miembro de la Real Academia de Ciencias Exactas, F¨ªsicas y Naturales y de la Academia de Ingenier¨ªa de Espa?a, as¨ª como miembro asociado de la Academia de Ciencias de Francia y miembro correspondiente de la Academia de Ingenier¨ªa de M¨¦jico.

El talento de Li?¨¢n fue ya reconocido en sus a?os de estudiante, en que empez¨® a colaborar con un grupo muy activo a nivel internacional, liderado por Gregorio Mill¨¢n. El ambiente cient¨ªficamente estimulante que se daba en ese grupo (?durante los a?os cincuenta del pasado siglo!) se deb¨ªa, en parte al menos, a las visitas peri¨®dicas de Theodore von K¨¢rm¨¢n, una figura central en la historia de la mec¨¢nica de fluidos, del que Mill¨¢n era colaborador cercano. Amable reconoci¨® muy pronto el papel crucial de la mec¨¢nica de fluidos en el estudio de una considerable variedad de fen¨®menos naturales, problemas cient¨ªficos y procesos industriales. Y ha sabido tambi¨¦n reconocer el papel de las matem¨¢ticas como lenguaje e instrumento esencial de la ciencia y la tecnolog¨ªa. Su uso de las herramientas matem¨¢ticas, en fusi¨®n perfecta con la compresi¨®n de los mecanismos f¨ªsicos, le permiten una aproximaci¨®n muy natural a los problemas, sean estos cient¨ªficos o tecnol¨®gicos, reconociendo muy r¨¢pidamente la esencia de los fen¨®menos, y buscando siempre una soluci¨®n sencilla y rigurosa. Quiz¨¢ por ello, la comunidad matem¨¢tica le considera uno de los suyos, como tambi¨¦n sucede con f¨ªsicos e ingenieros. Esta visi¨®n unificadora de la actividad cient¨ªfica y tecnol¨®gica, tan alejada del ambiente academicista, acient¨ªfico en cierto modo, de la Espa?a en que se educ¨®, dan un valor a?adido considerable a su trayectoria cient¨ªfica y docente.

Como maestro, Li?¨¢n ha sabido transmitir a sus alumnos su incansable entusiasmo y su ilimitada curiosidad. Tiene una capacidad innata para reconocer el talento, y una disposici¨®n natural para motivar e impulsar la dedicaci¨®n a la investigaci¨®n cient¨ªfica. Adem¨¢s de sus alumnos directos, a quienes dirigi¨® personalmente la tesis doctoral, son muchos los que se consideran antiguos alumnos suyos, bien porque dieron con Li?¨¢n sus primeros pasos en la investigaci¨®n cient¨ªfica, o porque gracias a su apoyo expl¨ªcito pudieron realizar sus estudios de postgrado en las mejores universidades del mundo. Algunos de ellos son hoy figuras de primer orden, a nivel mundial, en campos tan variados como la combusti¨®n, biof¨ªsica, fusi¨®n nuclear, turbulencia, microflu¨ªdica, propulsi¨®n espacial y el dise?o de aeronaves, y ocupan c¨¢tedras en universidades tales como la de California (en Berkeley y San Diego), Polit¨¦cnica de Madrid, Sevilla, Yale y el Massachusetts Institute of Technology (MIT), o cargos internacionales de primer nivel en compa?¨ªas como Airbus e IBM.

Li?¨¢n es tambi¨¦n un comunicador entusiasta, que sabe captar la atenci¨®n de la audiencia, sea ¨¦sta experta (en congresos o reuniones cient¨ªficas) o compuesta por alumnos. Su paciencia para explicar e ilustrar los conceptos m¨¢s intrincados del modo m¨¢s natural posible es legendaria, como lo es su generosidad para dedicar su tiempo a alumnos y colegas. Ha sido y es muy frecuente, durante toda su trayectoria docente, ver a Li?¨¢n rodeado de alumnos al terminar las clases (para disgusto, a veces, del profesor al que preced¨ªa en el horario), tanto en las aulas como en los pasillos de la Escuela T¨¦cnica Superior de Ingenieros Aeron¨¢uticos. Y es constante el recuerdo cari?oso que tienen de ¨¦l sus antiguos alumnos, y el modo convencido en que ilustran la utilidad que ha tenido en su vida profesional (en los campos m¨¢s diversos) lo que aprendieron de ¨¦l. Esto es as¨ª quiz¨¢ porque, adem¨¢s de conocimientos concretos, ¨²tiles en s¨ª mismos, aprendieron una actitud ante lo nuevo. Aprendieron a aprender, a entender, a reconocer lo esencial, y a abordar los problemas sin enmascarar su complejidad, sin hacer trampas. Amable es, en cambio, mucho menos paciente con las aproximaciones chapuceras a los problemas, con los atajos tramposos, con la prepotencia vana, con el lenguaje grandilocuente y con la pereza intelectual.

Desde el punto de vista humano, Amable hace honor a su nombre de pila. Sus maneras son siempre cordiales, consideradas, atentas. Sus comentarios, aunque incisivos, van vestidos de una exquisita educaci¨®n. A pesar de lo que pueda sugerir el aspecto un tanto ensimismado que puede tener a veces, siempre est¨¢ atento en reuniones sociales a las personas que puedan sentirse desplazadas en alg¨²n sentido. Junto con su esposa, Rosa, es un anfitri¨®n considerado, que sabe reunir y atender en su casa a grupos de amigos en veladas que siempre se hacen cortas. Desde una curiosidad genuina, encuentra f¨¢cilmente intereses comunes, resultando un conversador ameno, que sabe escuchar. Quiz¨¢ sea precisamente esa actitud humilde ante la realidad vital la que, unida a su inteligencia natural (en el mejor y m¨¢s amplio sentido de esta palabra), hacen de ¨¦l una fuente continua de inspiraci¨®n, y una referencia, profesional y humana.

Amable Li?¨¢n es una de esas personas que siempre dejan su entorno mucho mejor de c¨®mo lo encontraron.

Jos¨¦ Manuel Vega es catedr¨¢tico de Matem¨¢tica Aplicada de la Universidad Polit¨¦cnica de Madrid