Los nuevos cohetes privados de EE UU preparan ya lanzamientos de prueba

La decisi¨®n de la Casa Blanca de que la NASA traspase al sector privado el transporte a la Estaci¨®n Espacial Internacional (ISS) ahora que se van a jubilar los transbordadores, no se sustenta en estudios preliminares o declaraciones de intenciones, sino, en parte, en lanzadores nuevos cuyo desarrollo est¨¢ ya muy avanzado. El Falcon 9, de la empresa SpaceX , un cohete capaz de colocar en ¨®rbita terrestre baja cargas de hasta 10 toneladas y media, est¨¢ ya en fase de integraci¨®n en la base espacial de Cabo Ca?averal (Florida) para realizar un lanzamiento de prueba. "Esperamos hacerlo en el plazo de uno a tres meses desde que acabemos la integraci¨®n", afirma Brian Mosdell, director de las operaciones de lanzamiento de SpaceX en Florida, en un comunicado de la empresa. Despu¨¦s se realizar¨ªa un lanzamiento del nuevo cohete con la nave Dragon, un veh¨ªculo de carga apto para llevar suministros a la ISS.

Los planes de SpaceX son muy ambiciosos. Seg¨²n sus responsables, la Dragon podr¨ªa desarrollarse y convertirse en un veh¨ªculo tripulado en el que los astronautas de la NASA ir¨ªan a la ISS, y eso tan pronto como 2014, explica Space.com. El programa Constellation de la NASA, descartado ahora por la Casa Blanca, contaba con poder hacer esos vuelos tripulados algo m¨¢s tarde, si no se pod¨ªa contar con fondos extraordinarios, e incluso en 2017, como pronto, seg¨²n los expertos del Informe Augustine que evaluaron dicho programa. Sin embargo, la NASA, de momento, no tiene contratos firmados con ninguna empresa para construir naves tripuladas y s¨®lo ha encargado a algunas empresas trabajos preliminares para ir avanzando hacia ese tipo de misiones.

La otra empresa que est¨¢ dise?ando un nuevo cohete para llevar cargas a la estaci¨®n espacial es Orbital Sciences Corporation , que prepara el Taurus II. A finales del a?o pasado, se realiz¨® con ¨¦xito un ensayo est¨¢tico (no de vuelo) de motor de la segunda etapa (Castor) del cohete y el plan de Orbital es probar la primera etapa del mismo cuanto antes. El primer lanzamiento del Taurus II est¨¢ fijado para 2011, para demostrar la capacidad del sistema de transporte de carga.

Orbital tiene un contrato con la NASA de 1.400 millones de euros para ocho misiones de abastecimiento de la ISS, mientras que el contrato con SpaceX, por 1.177 millones de euros, es para realizar 12 vuelos a la estaci¨®n espacial.

Con la retirada de los transbordadores de la NASA (est¨¢n previstas s¨®lo cuatro misiones m¨¢s antes de cancelar el programa), los suministros a la ISS depender¨¢n de las naves de carga rusas Progress y de las ATV de la Agencia Europea del Espacio, hasta que entren en operaci¨®n estos nuevos sistemas que est¨¢ desarrollando el sector espacial estadounidense. En cuanto a los viajes de las tripulaciones, durante unos a?os depender¨¢n ¨ªntegramente de las naves Soyuz rusas.

SpaceX considera que puede desarrollar naves para los astronautas garantizando todos los par¨¢metros de seguridad exigidos y que la modificaci¨®n esencial que habr¨ªa que hacer en su nave Dragon ser¨ªa a?adir sistemas de escape para los astronautas en caso de emergencia durante el lanzamiento. "Confiamos en ser capaces de hacerlo con un coste de 14,7 millones de euros por plaza en la nave", mientras que en una Soyuz el precio es de 37,5 millones por persona, ha comentado a Space.com Elon Musk, cofundador de SpaceX.

SpaceX tuvo problemas con el cohete anterior de la serie, el peque?o Falcon 1, que fall¨® tres veces en sus comienzos, pero despu¨¦s ha realizado lanzamientos sin problemas. En cuanto al m¨¢s potente Falcon 9, es un cohete de 54,9 metros de altura y 3,6 de di¨¢metro, y la empresa cuenta con desarrollar tambi¨¦n una versi¨®n m¨¢s potente, con dos propulsores a?adidos, capaz de colocar hasta 32 toneladas en ¨®rbita baja.