De tel¨¦fono a empaste dental
Pr¨¢cticamente, cada una de las partes de un m¨®vil se puede reutilizar. Un proceso minucioso en el que todos ganan
En Espa?a hay m¨¢s tel¨¦fonos m¨®viles que habitantes: unos 53 millones de ter?minales aproximadamente, por poco m¨¢s de 47 millones de personas. A nivel mundial, la cifra asciende a 4.700 millones de personas conectadas a trav¨¦s de tel¨¦fonos m¨®viles. La vida media de cada dispositivo, que deber¨ªa ser de 7 a?os, ronda los 15 meses en Europa, 9 en Jap¨®n o 18 en Estados Unidos. Productos de corta vida que acaban olvidados en el fondo de un caj¨®n, arrinconados por sus veloces sucesores.
Pero cuando se cambia el tel¨¦fono m¨®vil, se puede acudir a un establecimiento y depositar el viejo en unos buzones. De ah¨ª son trasladados a f¨¢bricas que los desguazan y separan en distintos materiales. Seg¨²n un estudio, el 80% de los espa?oles reciclar¨ªa su tel¨¦fono si supiera que lo puede hacer. "Hay que acabar con la mentalidad del todo a la papelera", subraya el director de Nokia Care en Espa?a y Portugal, Jes¨²s Iglesias. La gente desconoce c¨®mo deshacerse de sus aparatos y la gran mayor¨ªa, un 44%, los guarda. Uno de cada cuatro se lo entrega a un conocido y el 16% lo vende. Muy pocos deciden reciclarlo. Nokia investiga para que sus aparatos sean cada vez m¨¢s verdes, indica Iglesias, y pr¨¢cticamente el 100% de los materiales que la compa?¨ªa emplea es reciclable. El impacto medioambiental de sus tel¨¦fonos m¨®viles se ha reducido un 65% en la ¨²ltima d¨¦cada: han sustituido el PVC por biopl¨¢sticos y el modelo Nokia C7 es el primer dispositivo en utilizar biopinturas.
Los establecimientos de telefon¨ªa disponen de buzones para depositar los aparatos viejos
Los trabajadores desguazan los aparatos a mano y separan sus distintos materiales
Cada ciudadano produce 14?kilos de basura tecnol¨®gica al a?o y se prev¨¦ que en 2017 la cifra se triplique
Cada aparato est¨¢ compuesto de pl¨¢sticos, vidrios, metales -un 16% de ellos muy valiosos, como el colt¨¢n, el paladio, el oro o la plata- y sustancias altamente contaminantes si no se tratan correctamente, como el litio, el cadmio o el n¨ªquel. Por ello, el reciclaje se antoja fundamental.
La Fundaci¨®n Tragam¨®vil, sin ¨¢nimo de lucro, dispone ya de un millar de puntos de entrega de aparatos en Espa?a y en sus ocho a?os de vida ha reciclado m¨¢s de 40 millones de terminales, unas 4.200 toneladas. El director de promoci¨®n de la fundaci¨®n, Julio Lema, asegura que con la crisis econ¨®mica han frenado algo el ritmo, dado que se compran menos tel¨¦fonos, pero, no sin esfuerzo, van concienciando a la poblaci¨®n y a las compa?¨ªas telef¨®nicas.
En Espa?a, la f¨¢brica que m¨¢s tel¨¦fonos m¨®viles recicla se ubica en Loiu (Bizkaia). Indumental Recycling procesa 30.000 toneladas anuales de aparatos electr¨®nicos, y los dispositivos m¨®viles suponen una gran parte de esta cantidad. Sobre una superficie de 40.000 metros cuadrados, distribuidos en distintos pabellones, la f¨¢brica recicla hasta el 90% de cada unidad, cuando habitualmente la reutilizaci¨®n solo alcanza el 70%.
Los tel¨¦fonos llegan en camiones y se amontonan en una nave. Un 15% de esa pila est¨¢ compuesto por impropios, como auriculares, term¨®metros, cartones de embalaje o incluso cepillos de dientes, que son retirados antes del proceso de reciclaje.
Varios trabajadores despedazan manualmente cada uno de los dispositivos. Separan los pl¨¢sticos de la carcasa del vidrio de la pantalla y de los metales de los circuitos, para despu¨¦s ir distribuy¨¦ndolos en nuevos montones. Unas m¨¢quinas separan despu¨¦s m¨¢s a fondo cada componente. Los pl¨¢sticos que no se pueden reutilizar se env¨ªan a instalaciones espec¨ªficas, en las que se incineran y se obtiene energ¨ªa de su combusti¨®n.
Finalmente, los metales, los vidrios y los pl¨¢sticos se funden, convirti¨¦ndose en una fina arenilla negruzca que se manda a otras industrias para su reutilizaci¨®n. Las virutas de esta?o, cobre o aluminio resultantes se transportan a fundiciones y refiner¨ªas, que transforman el material semipuro en materia prima. Estos metales suelen ser empleados, en su mayor¨ªa, en la automoci¨®n o en la fabricaci¨®n de objetos como bicicletas, empastes o altavoces.
Seg¨²n indica el director de la planta, Carlos Goiti, la parte m¨¢s complicada del proceso radica en la individualizaci¨®n de cada metal preciado. La cantidad de oro, paladio, plata o colt¨¢n -que soporta una alta carga el¨¦ctrica y permite que las bater¨ªas duren m¨¢s- obtenida por cada unidad es escasa, pero en conjunto la suma de metales preciosos, que tambi¨¦n se env¨ªan a refiner¨ªas y pueden acabar convertidos en joyas, es realmente alta.
La principal competencia a la que se enfrenta el reciclaje de tel¨¦fonos m¨®viles es la de aquellas asociaciones, entre ellas Greenpeace, que abogan por fomentar el alargamiento de la vida de los aparatos. Seg¨²n un estudio de la asociaci¨®n Global System for Mobile Communications, el 70% de los terminales que se depositan en puntos de reciclaje se puede reutilizar. En este sentido, se prev¨¦ que para 2012 se env¨ªen 100 millones de m¨®viles usados a zonas subdesarrolladas de Sudam¨¦rica, Europa del Este, China, India y ?frica.
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