La cooperaci¨®n no es una causa perdida
Un pol¨¦mico libro sostiene que medio siglo de ayuda occidental al desarrollo ha sido un fracaso - Las ONG reivindican sus logros aunque admiten que faltan soluciones pol¨ªticas
Si por algunas de las personas consultadas para este art¨ªculo fuera, al antrop¨®logo Gustau Ner¨ªn habr¨ªa que darle una colleja. No por nada personal, no; solo por el libro que acaba de publicar en castellano (ya lo hizo en catal¨¢n en la primavera con gran revuelo), Blanco bueno busca negro pobre (Roca Editorial). El t¨ªtulo ya dice mucho. Y su contenido ha ofendido y dolido al gremio de las ONG y la cooperaci¨®n internacional, porque carga contra su l¨ªnea de flotaci¨®n: la labor de muchos durante mucho tiempo. "50 a?os despu¨¦s de su inicio", escribe Ner¨ªn, "la cooperaci¨®n al desarrollo es una causa in¨²til, un fracaso".
En la introducci¨®n se?ala: "El continente africano es un inmenso cementerio plagado de proyectos abandonados: hospitales que nunca llegaron a ser inaugurados, letrinas, fuentes, pozos... All¨ª todo el mundo sabe que las pol¨ªticas de cooperaci¨®n no funcionan... Pero esto no llega a Occidente, donde la acci¨®n humanitaria se presenta como la soluci¨®n a todos los problemas africanos. En realidad, la mayor¨ªa de los ciudadanos no sabe nada de lo que pasa en ?frica, y no lo sabe, b¨¢sicamente, porque no le importa demasiado". Y a lo largo y ancho de 219 p¨¢ginas, ataca asuntos que hemos resumido en seis (eficacia, objetivos, modelo, figura del cooperante, campa?as y complicidad con los medios) y enviado a un organismo internacional, Unicef, y a ocho personas de organizaciones no gubernamentales para el desarrollo (ONGD) o con experiencia de gesti¨®n y de campo para su reflexi¨®n. Sus respuestas se resumen en estas l¨ªneas y completas pueden ser consultadas en la web de EL PA?S.
Unicef afirma que la cooperaci¨®n ha salvado millones de vidas
Argumentos propios de debate de barra de bar. As¨ª define Montse Santolino desde la Federaci¨®n catalana de ONGD, los del africanista Ner¨ªn respecto a la cooperaci¨®n. "Esta es tan in¨²til y tan fracaso para el desarrollo global como el propio capitalismo que la origin¨®, ?podemos impugnarlo por eso? ?Lo hace Ner¨ªn? ... Las fuentes y los pozos son la an¨¦cdota de la cooperaci¨®n. Esta no es solo eso, y no la hacen solo las ONG". Y la pone en contexto: "Desde el presidente Truman, que se invent¨® lo del subdesarrollo en su discurso de investidura, los gobiernos han instrumentalizado el sistema de ayuda. En ¨¦l tambi¨¦n entraron las ONG, muchas y distintas, que han ido modificando sus roles y puntos de vista. Como ocurre en todo sector, algunas prefieren hacer de tontas ¨²tiles, otras cambiar las cosas desde dentro, y otras son cr¨ªticas y lo cuestionan".
Para Josep Giralt, anta?o en Ayuda en Acci¨®n y hoy en la Fundaci¨®n Vicente Ferrer, ninguna causa que busque mejorar las condiciones de vida de las personas es in¨²til. "El enfoque caritativo asistencial al que se refiere Ner¨ªn surgi¨® en los a?os cuarenta y cincuenta, y efectivamente no funcionaba, pero los modelos han ido evolucionando y ahora cohabitan con otros basados en la justicia social y el respeto, la protecci¨®n y la promoci¨®n de los derechos humanos. Hoy las personas son el centro de toda acci¨®n a trav¨¦s de procesos participativos y del fortalecimiento de la sociedad civil".
Las organizaciones han avanzado del asistencialismo a la alianza local
?Es eficaz la ayuda internacional?
- Las ONG se indignan con la menci¨®n siquiera de que la cooperaci¨®n al desarrollo sea ineficaz. Unicef apunta: "Hay datos sobre su eficacia que no son fruto de la casualidad (de hecho, con la poblaci¨®n mundial creciendo, si se queda en manos de la casualidad, ?cu¨¢l habr¨ªa sido la evoluci¨®n?) sino del trabajo com¨²n entre Gobiernos de pa¨ªses en desarrollo, de pa¨ªses industrializados, ONU, ONG, comunidades, aldeas, pueblos y habitantes", dicen en Unicef. Y enumeran: En 1990, perdieron la vida por causas evitables m¨¢s de 12 millones de ni?os menores de cinco a?os. En 2010, 7,6. El n¨²mero de ni?os que no pudieron empezar la escuela pas¨® de m¨¢s de 100 millones en 2002 a 67 en 2010. M¨¢s de 1.600 millones de personas obtuvieron acceso a agua potable de 1990 a 2006. M¨¢s de 6.000 comunidades africanas abandonaron la pr¨¢ctica de la mutilaci¨®n genital femenina en 12 pa¨ªses en los ¨²ltimos 3 a?os. Y las campa?as de vacunaci¨®n consiguen que millones de ni?os sobrevivan a enfermedades como el sarampi¨®n. Se han reducido un 74% las muertes desde 2000.
- "La cooperaci¨®n ha sido determinante para sostener servicios sociales b¨¢sicos en buena parte del continente africano (ver los ejemplos de Mozambique, Burundi o Tanzania), por no hablar de reducir el impacto de las crisis humanitarias" (Gonzalo Fanjul). - "Hay un progresivo avance comprobable en educaci¨®n primaria universal (alcanzada en Burundi, Tanzania, Ruanda, Togo, Ben¨ªn), reducci¨®n de muerte por malaria (un 20%). Reducci¨®n de infecci¨®n por VIH-sida en un 21% y de muerte por VIH-sida en un 19%. La estrategia para combatir la tuberculosis ha salvado seis millones de vidas", dice Plan.
- "En los ¨²ltimos 10 a?os hemos visto progresos en el bienestar de los ni?os y ni?as en muchos pa¨ªses de la regi¨®n. En Angola, Cabo Verde, Rep¨²blica Democr¨¢tica del Congo, N¨ªger y Sud¨¢frica entre 2005 y 2008 se ha elevado la cobertura de vacunas entre un 40% y un 75%. De la misma forma pa¨ªses como Liberia, N¨ªger y Sierra Leona han conseguido reducir sus elevadas tasas de mortalidad infantil", seg¨²n Save the Children.
- "Al a?o, m¨¢s de 100 millones de personas se empobrecen por los gastos sanitarios. En los ¨²ltimos a?os, la idea de introducir mecanismos de protecci¨®n sanitaria ha ido ganando posiciones en pa¨ªses de ingresos bajos. Desde 2005, N¨ªger ha introducido medidas para eximir del pago a embarazadas y menores de 5 a?os con exitosos efectos: el 85% de las embarazadas ya disfrutan de un seguimiento frente al 40% en 2005", dicen en M¨¦dicos del Mundo.
Las ONG, dice el presidente de M¨¦dicos del Mundo, ?lvaro Gonz¨¢lez, aportan soluciones concretas a un nivel local que pueden ampliarse en el ¨¢mbito regional o estatal de los pa¨ªses en desarrollo, aunque para ello hacen falta muchos m¨¢s recursos de los que cuenta una ONG. "De ah¨ª a hablar del fracaso de la Cooperaci¨®n al Desarrollo (as¨ª de forma gen¨¦rica) hay mucha diferencia. Esta no funciona, en los casos que no, porque choca con otras pol¨ªticas de los Estados en los que se aplican intereses comerciales, pol¨ªticos, energ¨¦ticos... que lo impiden". "Las ONGD tienen un rol residual, son, sin duda, pieza importante de la cadena, la pieza que coloca la sociedad civil para contrarrestar esas reglas injustas que mantienen la pobreza. Incluso si hablamos del llamado sistema de cooperaci¨®n, las ONG son un elemento m¨¢s dentro de un contexto en el que intervienen distintos actores. El mismo Ner¨ªn as¨ª lo reconoce cuando afirma que las ONG espa?olas solo controlan un 10% del presupuesto destinado a tal fin; la mayor¨ªa queda en manos de Gobiernos e instituciones internacionales", remata Yolanda Polo de Coordinadora de ONGD.
En Blanco bueno busca negro pobre, se discute la eficacia y objetivos de la cooperaci¨®n al desarrollo (COD): "Esta se ha convertido en icono incuestionable, pero... no hay ning¨²n pa¨ªs que se haya desarrollado gracias a ella. Lo que se necesita son medidas y acciones pol¨ªticas que las mismas ONG no parecen dispuestas a exigir, prefieren mantenerse neutrales". Cuestiona el modelo actual: "Refuerza el sentimiento de superioridad del Norte, pero tambi¨¦n el de inferioridad del Sur: el europeo da; el africano solo recibe". Arremete contra la figura del cooperante ("Vivir como un blanco en un pa¨ªs de negros", titula uno de los cap¨ªtulos) y las campa?as para captar fondos: "Mensajes con im¨¢genes pat¨¦ticas, los africanos siempre v¨ªctimas; publicidad enga?osa". Y para el antrop¨®logo catal¨¢n el de la cooperaci¨®n es un show mantenido con la complicidad de los medios: "Las ONG los usan para hacerse propaganda...".
Torpedos en mal momento para un sector con 3.000 organizaciones en Espa?a: crisis global, recortes generalizados, imposible siquiera contar con mantener presupuestos y personal, y por lo tanto, objetivos, y a¨²n menos so?ar con ese 0,7% del PIB que los Estados prometieron aportar para el desarrollo de los m¨¢s desfavorecidos. El libro es tan demoledor que, opinan algunos, no deber¨ªa merecer siquiera estas l¨ªneas. "Estamos prest¨¢ndole una atenci¨®n que no reciben los ¨²ltimos recortes en Cooperaci¨®n de Catalu?a (descenso del 55%), Galicia (40% y eliminaci¨®n de las partidas para ayuda humanitaria), Canarias (descenso del 37%) o Navarra (recorte de un mill¨®n de euros). Lejos queda ya cuando el Ayuntamiento de Madrid elimin¨® el a?o pasado los fondos destinados a COD", apunta Gonz¨¢lez.
Ner¨ªn denuncia que ?frica est¨¢ llena de pozos y hospitales sin terminar
Unicef, que es agencia de la ONU, da cifras de avances y sale al paso de Ner¨ªn: "La COD no es una causa perdida. Unida a la voluntad de Gobiernos y otros aliados bienintencionados, ha salvado las vidas de millones de personas. El autor dice que el trabajo en desarrollo ha transformado a la gente de ?frica en pasivos perceptores de caridad. Vamos a dejar a la gente de ?frica que responda en su propio nombre. A la afirmaci¨®n de que no hay pa¨ªs en ?frica que haya cambiado gracias al desarrollo, no es verdad. Hay varios que atraviesan un profundo cambio. Ghana es uno de los que est¨¢n en el camino de alcanzar el Objetivo de Desarrollo del Milenio 1, que apunta a erradicar pobreza y hambre para 2015. A¨²n as¨ª, todas las cr¨ªticas son bien recibidas y tambi¨¦n las propuestas para mejorar".
Algunos libros
- La carga del hombre blanco, Bill Easterly. Hace una valoraci¨®n muy negativa de la ayuda y asegura que formenta la dependencia.
- Ayuda muerta. Por qu¨¦ la ayuda no funciona..., de Dambisa Moyo, un cl¨¢sico de referencia en el an¨¢lisis de la materia.
- Los hombres leopardo se est¨¢n extinguiendo, Chema Caballero, 2011: "La salvaci¨®n de ?frica no vendr¨¢ ni de expertos ni de ONG, sino de los propios africanos".
- Anticooperaci¨®n, David Llistar (2009) y La ayuda del siglo XXI. Informe Oxfam 2010.
Pero propuestas Ner¨ªn no hace. "Es que solo hay una: soluciones pol¨ªticas", dice desde Bata (Guinea Ecuatorial), desde donde va y viene desde hace dos d¨¦cadas. Asegura que, habiendo sido consultor como ha sido de la Agencia Espa?ola de Cooperaci¨®n Internacional para el Desarrollo (AECID), la Generalitat de Catalu?a o el Ayuntamiento de Barcelona, ya hab¨ªa realizado estudios cient¨ªficos con mucha cifra y propuesta y poca repercusi¨®n para el Centro de Estudios Africanos y ahora quer¨ªa "un libro m¨¢s divulgativo". Tanto, que irresponsable le ha salido, opinan unos; sin fuentes, referencias, con ambig¨¹edad y muchas contradicciones, otros. "El autor tiene un desconocimiento notable de las pol¨ªticas de desarrollo y del funcionamiento de las ONG y otros organismos de la cooperaci¨®n (tampoco dice nada de ?frica y de su pol¨ªtica que no podamos leer en Mundo Negro). El hecho de vivir en Bata no garantiza nada, porque eso es tanto como pontificar sobre las complejidades de la UE desde un apartamento en M¨®stoles", afirma Gustavo Fanjul, ex de Oxfam y autor del blog 3.500 millones en EL PA?S. "No hace falta dar la vuelta al mundo para saber que los recursos p¨²blicos (propios o donados) son infinitamente m¨¢s eficaces en un contexto institucional y legal s¨®lido. La corrupci¨®n o mal gobierno no son inventos de la ayuda. Y este libro en ocasiones es insultante. Sugerir que los t¨¦cnicos de captaci¨®n de las ONG se frotan las manos cada vez que se produce una cat¨¢strofe (p¨¢g. 31) es simplemente miserable", denuncia. De acuerdo con Ner¨ªn est¨¢ Chema Caballero, ex sacerdote javeriano, un cuarto de siglo en Sierra Leona, en lo relacionado con la ayuda internacional en may¨²sculas, que se ha convertido, dice, en un medio m¨¢s de Occidente para controlar y acceder a materias primas. "No hay m¨¢s que ver los pa¨ªses que se eligen como prioritarios en cooperaci¨®n. En el caso de Espa?a no son los m¨¢s necesitados, sino aquellos donde operan empresas espa?olas y es necesaria una actuaci¨®n policial para frenar la llegada de inmigrantes subsaharianos a la pen¨ªnsula".
La ayuda oficial al desarrollo es un instrumento de la pol¨ªtica exterior
Les duele, y rechazan la acusaci¨®n de neutralidad pol¨ªtica (algo que s¨ª mantienen Unicef y ONG asistenciales como Cruz Roja o M¨¦dicos Sin Fronteras): "Forma parte de nuestro quehacer diario. Prueba de ello es que algunas ONG han sido expulsadas de pa¨ªses por denunciar violaciones de derechos" (Polo). Otros ejemplos, cita: campa?as exitosas sobre el control de armas, la Tasa Tobin, la especulaci¨®n alimentaria o el acaparamiento de tierras. "Llevamos a?os denunciando la incoherencia de pol¨ªticas de subvenciones agr¨ªcolas, aranceles comerciales, ayudas a la exportaci¨®n... A?os lanz¨¢ndole al sistema sus propias contradicciones", dice Gonz¨¢lez en M¨¦dicos del Mundo.
"Esos h¨¦roes modernos", ironiza Ner¨ªn sobre los cooperantes. Y esto ha gustado menos a¨²n que los chistes sobre pozos y fuentes. "No son santos laicos, ni mercenarios. Pero afirmar que ganan 10.000 d¨®lares [7.400 euros] al mes... es falso e irresponsable", opina. Mucho m¨¢s trat¨¢ndose de personas que ponen, muchas veces, en peligro sus vidas. "Los expatriados son pocos y cada vez menos. Las ONG que trabajan bien lo hacen con locales. Sin negar que pueda haber gente impresentable, Ner¨ªn es injusto al no distinguir entre cooperantes (blancos) de organismos oficiales internacionales y cooperantes (blancos) de ONG", opina Santolino. Solo en condiciones laborales, la diferencia entre ellos es un mundo. "He conocido a muchos que no responden a lo que se describe en ese libro", afirma Caballero. Ner¨ªn asegura que no pretende criticarlos y que algunos han colaborado en la redacci¨®n de su obra desde Camer¨²n o Zanz¨ªbar. Pero preguntado, no identifica a nadie. "No quise personalizar, sino plantear problemas generales, qu¨¦ persigue la COD y qu¨¦ es el desarrollo mismo". Para Save The Children, la seguridad de su personal es fundamental, eso supone, por ejemplo, que deban vivir en barrios determinados, que se respeten los derechos laborales del pa¨ªs de origen. Y existe un estatuto del cooperante que las ONG deben cumplir.
Respecto a im¨¢genes, campa?as y transparencia, en las ONG Plan o Save the Children se suman a las opiniones de la Coordinadora y a lo que indica su C¨®digo de Conducta con pautas de comunicaci¨®n y uso de im¨¢genes. "Nos esforzamos por presentar a las personas con dignidad, evitando im¨¢genes catastrofistas, id¨ªlicas o discriminatorias". "Desde las ONG se env¨ªa a los donantes y en las memorias anuales el uso exacto de los fondos y qu¨¦ proyectos concretos han financiado. Nuestros informes de campa?as recogen la medici¨®n de impacto de las acciones. No hablamos de una ?frica pasiva y menos a¨²n de que el africano sea incapaz de desarrollarse por s¨ª mismo". Y acerca de los medios aseguran que es tema permanente de reflexi¨®n interna. Existe, aseguran, un imaginario sobre la cooperaci¨®n que est¨¢ a a?os luz de las pr¨¢cticas reales del trabajo. En Plan concluyen: "Los ciudadanos exigen a los medios que informen y que aporten su parte en la difusi¨®n de temas de derechos. Si no lo hicieran les criticar¨ªamos por lo contrario".
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