Mueren m¨¢s dependientes de los que acceden a las ayudas
Los beneficiarios bajan al frenar las autonom¨ªas el desarrollo de la ley pese a la lista de espera Solo en seis regiones el saldo de atendidos es positivo
Ya est¨¢. La dependencia ha entrado en n¨²meros negativos: mueren m¨¢s dependientes que los nuevos que acceden a las ayudas del sistema. Los ¨²ltimos datos muestran 742 personas atendidas menos que el mes anterior, as¨ª que no se est¨¢ cubriendo ni la tasa de reposici¨®n. Esto, que ocurr¨ªa en cuatro comunidades hace un mes, ahora alcanza a 11 de ellas, hasta llevar a saldo negativo las cifras nacionales. La par¨¢lisis que ya se observaba en la implantaci¨®n de la ley muestra ahora s¨ªntomas de agon¨ªa. Los beneficiarios tienen una alta dependencia y la mayor¨ªa son personas mayores de 80 a?os, as¨ª que no cabe pensar en que hayan causado alta por mejoras en su salud.
Con anterioridad, el sistema ha tenido n¨²meros negativos tres veces: en dos de ellas (junio de 2009 y mayo de 2011) porque se limpiaron las estad¨ªsticas para sacar a los fallecidos y otras incidencias; la tercera vez ocurri¨® en agosto del a?o pasado, cuando, de repente, las cifras dieron un baj¨®n, pasando de 35.000 nuevos atendidos a -577. El Gobierno lo achac¨® entonces a que se trataba de un mes vacacional, pero en esta ocasi¨®n no hay agostos que valgan. "Lo que preocupa ahora es la tendencia, en agosto del a?o pasado los datos se recuperaron al mes siguiente, pero ahora la ca¨ªda es imparable, desde junio el descenso es significativo. Si el pr¨®ximo Gobierno tiene intenci¨®n de parar la ley, como se sugiri¨® en la campa?a electoral, las comunidades le van a dar el trabajo hecho", lamenta el presidente de la Asociaci¨®n Estatal de Directoras y Gerentes de Servicios Sociales, Jos¨¦ Manuel Ram¨ªrez.
Este a?o ha sido horribilis para la dependencia,a pesar de que ya hay 741.713 atendidos. Recortes como los del sector educativo o el sanitario tambi¨¦n se han sentido en este campo, aunque quiz¨¢ m¨¢s camuflados, en l¨ªnea con la opacidad de sus estad¨ªsticas. Pero algunos datos son incontestables: el promedio mensual de nuevas personas atendidas, que ven¨ªa siendo en los tres a?os anteriores entre 17.000 y 28.000 ha ca¨ªdo en 2011 hasta 6.600, en n¨²meros redondos. Parecido ocurre con las solicitudes, que han pasado de ser alrededor de 30.000, como promedio mensual en esos a?os previos, a las 10.000 de este. "El descenso de las solicitudes no puede atribuirse solo a la voluntad de los usuarios. La gente solicita una ayuda cuando se le incentiva para ello o cuando consideran que la recibir¨¢n, como ha ocurrido con su vecino. Por otro lado, quiz¨¢ estemos ante unos datos no ajustados a la efectividad de las fechas de solicitud, sino ante un flujo matizado por la capacidad real de absorci¨®n de solicitudes de las comunidades", sugiere Ram¨ªrez.
Tambi¨¦n las personas acreedoras de una ayuda han ca¨ªdo, como promedio mensual en 2011, casi a la mitad que en a?os anteriores. Y, para remate, lo ¨²nico que no desciende es la lista de espera, que est¨¢ cronificada. Si no se cubre la tasa de reposici¨®n (entre los que salen y los que entran al sistema) dif¨ªcilmente se va a desenredar ese nudo. Uno de cada tres dependientes con derecho a una ayuda est¨¢ sin ella.
Algunos dirigentes han dicho que incumplir¨¢n el calendario previsto
Los ¨²ltimos datos que las comunidades han proporcionado al Gobierno indican que solo seis de ellas tienen saldo positivo: Canarias, Cantabria, Castilla y Le¨®n, Catalu?a, Galicia y Pa¨ªs Vasco, "pero, en realidad solo dos, Castilla y Le¨®n y Pa¨ªs Vasco, presentan unos resultados ¨®ptimos", asegura Ram¨ªrez. El retroceso en algunas es, para la corta vida de la ley, casi hist¨®rico: "Arag¨®n y Asturias han vuelto en los ¨²ltimos meses a cifras que solo encontramos un a?o y medio antes, por ejemplo. Y es lamentable ver c¨®mo Castilla-La Mancha, que siempre fue de las mejores, supera por primera vez la media nacional de personas en lista de espera. Adem¨¢s, su n¨²mero de dependientes atendidos retrocede a la cifra que ten¨ªa en febrero de 2011", sigue Ram¨ªrez. "Si se analizan los datos atendiendo al ¨²ltimo semestre, en la mayor¨ªa de las comunidades se ha paralizado el ritmo de crecimiento en la incorporaci¨®n de nuevos beneficiarios al sistema, en otras ha crecido moderadamente, Pa¨ªs Vasco, Andaluc¨ªa, Madrid, Castilla y Le¨®n; y en otro grupo ha bajado, ni siquiera mantienen la tasa de reposici¨®n, es el caso de Arag¨®n, Valencia, Asturias, Navarra, Extremadura y Castilla-La Mancha", resume Ram¨ªrez.
Que el sistema est¨¢ moribundo se hace evidente al ver el desparpajo con el que algunos gobernantes avisan de que se van a saltar la ley. Lo han hecho algunos responsables regionales con los dependientes moderados, que deb¨ªan haber entrado en el sistema en enero de este a?o, pero que han quedado engordando la lista de espera. Catalu?a y Arag¨®n anunciaron p¨²blicamente su negativa a incluirlos por la estrechez que impone la crisis, aunque en la pr¨¢ctica casi todos han claudicado en este extremo.
Dolores de Cospedal, en Castilla-La Mancha, ha anunciado recientemente que revisar¨¢ el baremo de la dependencia. "Quiz¨¢ se refiere a lo que har¨¢ el Gobierno de Rajoy, porque las comunidades no tienen competencias para eso. Adem¨¢s, el nuevo baremo, acordado entre todas, entra en vigor en 2012. Y ya es m¨¢s riguroso y ajustado", dice Mart¨ªnez.
Otro ejemplo de las pol¨ªticas que est¨¢n dando la puntilla a la ley es el de Extremadura, en cuyos presupuestos, presentados por el Gobierno, se reduce un 83% el dinero para equipos de valoraci¨®n de la dependencia. Y ello a pesar de que esta comunidad es la cuarta con peores datos en valoraciones efectuadas respecto a las solicitudes que han presentado los ciudadanos. Est¨¢ por debajo de la media nacional, que es de un 93% de valoraciones respecto a las solicitudes. Extremadura solo alcanza un 89,08%.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.