El Gobierno argentino crea una ley para controlar el papel prensa
El principal fabricante es propiedad de los diarios cr¨ªticos ¡®Clar¨ªn¡¯ y ¡®La Naci¨®n¡¯
La batalla del Gobierno argentino por el control de la empresa Papel Prensa, propiedad de dos de los diarios m¨¢s importantes del pa¨ªs, Clar¨ªn y La Naci¨®n, est¨¢ a punto de finalizar. En menos de 48 horas, la C¨¢mara de Diputados aprob¨® el texto de la ley que declara de ¡°inter¨¦s p¨²blico¡± la producci¨®n, comercializaci¨®n y distribuci¨®n de papel para diarios y revistas y establece unas condiciones de funcionamiento tales que facilita que el Estado se convierta en el socio mayoritario de esa empresa. Ahora solo falta que, en el plazo obligado de una semana, el pleno del Senado d¨¦ su visto bueno final.
La nueva ley ha sido tramitada a una velocidad inusual, tras la gran victoria electoral de Cristina Fern¨¢ndez de Kirchner, forzando hasta el l¨ªmite las normas procedimentales. El texto legal establece unas condiciones espec¨ªficas para una empresa concreta, Papel Prensa, que fabrica actualmente unas 175.000 toneladas de las cerca de 230.000 que consume todo el sector. El resto, se importa libremente, sin problemas, dado que no existe arancel ni cupos.
La ley obliga a la empresa a ofrecer un precio ¨²nico, al margen del volumen del consumo, y a presentar un plan de inversiones cada tres a?os destinado a alcanzar y garantizar el abastecimiento total de la demanda. Si los accionistas privados no invirtieran, el Estado, que ya posee un peque?o porcentaje, podr¨ªa cubrir esas cantidades, haci¨¦ndose con el control final.
Los actuales propietarios, Clar¨ªn y La Naci¨®n, consideran que se trata de una ley confiscatoria, que atenta contra la propiedad privada y que dejar¨¢ en manos del Gobierno la posibilidad de castigar a los medios cr¨ªticos. El grupo oficialista que defendi¨® el proyecto de ley y que logr¨® que se aprobara, tras siete horas de debate, por 134 votos a favor y 92 votos en contra, asegura, por el contrario, que se trata de garantizar el abastecimiento en igualdad de condiciones a los peri¨®dicos m¨¢s peque?os.
La ley declara "de inter¨¦s p¨²blico" la producci¨®n, venta y distribuci¨®n de papel para diarios y revistas
El portavoz del principal partido de la oposici¨®n, Uni¨®n C¨ªvica Radical, Juan Pedro Tunessi, vaticin¨® que la ley ser¨¢ utilizada ¡°para cercenar ideas y no solo las de Clar¨ªn, sino la de cualquiera que sea distinta al oficialismo¡±. El diputado radical Ricardo Gil Lavedra, prestigioso jurista, adelant¨®, por su parte, que ¡°mientras haya jueces en Argentina¡± la ley no prosperar¨¢, porque ¡°viola la Constituci¨®n y los tratados internacionales firmados por el pa¨ªs¡±.
Julio Saguier, presidente de La Naci¨®n, declar¨® a EL PA?S que su empresa no se opone a que se promueva la instalaci¨®n de otras f¨¢bricas ni a que los diarios m¨¢s peque?os sean subsidiados. ¡°Nos oponemos a que una sociedad an¨®nima privada se vea transformada en un monopolio estatal¡±, asegur¨®. ¡°Para saber c¨®mo va a distribuir el Gobierno el papel prensa, solo hay que observar c¨®mo se ha asignado la publicidad oficial; se premia a quienes publican lo que se les dicta y se castiga a los que no se alinean con el discurso oficial¡±.
Papel Prensa ha sido objeto de una formidable pol¨¦mica, promovida por Cristina Fern¨¢ndez, dentro de la guerra que mantiene con su antiguo aliado, el principal grupo medi¨¢tico argentino, Clar¨ªn. El Gobierno kirchnerista lleg¨® incluso a financiar una miniserie de televisi¨®n sobre el tema, que se emiti¨® recientemente. En un primer momento, la Secretar¨ªa de Comercio, dirigida por Guillermo Moreno, elabor¨® un informe titulado Papel Prensa. La Verdad, en el que se aseguraba que los accionistas actuales se hab¨ªan hecho con la propiedad gracias a un acuerdo con la dictadura militar y de manera coercitiva, mientras se torturaba a la viuda del primer due?o.
El informe, alabado y apoyado por la presidenta, traslad¨® a la Justicia la grave acusaci¨®n de delito de lesa humanidad. El primer juez consider¨® que no hab¨ªa causa para inculpar a los accionistas y aunque el caso permanece abierto en otra instancia judicial, no se ha producido ning¨²n avance significativo. Tampoco prosper¨® el intento de hacerse con el control de Papel Prensa a trav¨¦s de una intervenci¨®n de ¨ªndole comercial, que rechaz¨® el tribunal correspondiente. Seg¨²n Julio Salguier, ¡°el Gobierno mont¨® una patra?a manipulando una causa universal que, como tal, jam¨¢s deber¨ªa ponerse al servicio de persecuciones particulares¡±.
Finalmente, ser¨¢ una ley la que permita al Gobierno controlar la empresa, mediante la declaraci¨®n del papel prensa como un bien de inter¨¦s p¨²blico, la misma figura que se aplic¨® en su d¨ªa a las retransmisiones televisivas de partidos de f¨²tbol, que dejaron de ser de pago y explotadas por el grupo Clar¨ªn, para emitirse en abierto, mediante pago del Estado a la Asociaci¨®n de F¨²tbol Argentino.
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