Se puede saber idiomas sin viajar (pero no igual)
La m¨¢xima inmersi¨®n en otra lengua se consigue con estancias largas en el extranjero La relaci¨®n profesor-alumno no reproduce del mismo modo situaciones reales en otra sociedad
?Se puede dominar un idioma sin viajar? S¨ª, seg¨²n el ministro de Educaci¨®n, Jos¨¦ Ignacio Wert. No del todo, seg¨²n la mayor¨ªa de los expertos. Lo importante para aprender cualquier lengua es la exposici¨®n a la misma. Se puede conseguir un buen nivel, dicen, sin necesidad de vivir en el extranjero, con tes¨®n e inter¨¦s por aprender. Pero la mayor¨ªa coincide en apuntar que para alcanzar un nivel alto ¡ªfluido¡ª es preciso viajar a un pa¨ªs donde se hable y vivir situaciones reales. Es necesario que la persona est¨¦ obligada a comprar el pan de verdad, reiteran. Esto contradice la afirmaci¨®n de Wert, que ha dicho esta semana que son "m¨¢s eficientes los cursos de inmersi¨®n ling¨¹¨ªstica que se realizan en Espa?a, que los de turismo ling¨¹¨ªstico que llevan a lugares como Australia, Nueva Zelanda o EE UU". Este fue su argumento para justificar el recorte en las becas para estudiar cursos de idiomas en verano, que este a?o est¨¢n dotadas con la mitad de presupuesto y que el pr¨®ximo no significar¨¢n viajar al extranjero.
"La inmersi¨®n en otro idioma en Espa?a tiene sus l¨ªmites", explica Eusebio de Lorenzo, profesor de Filolog¨ªa inglesa en la Universidad Complutense de Madrid. "Casi todos los alumnos son espa?oles y, una vez terminadas las horas de su intensivo, socializan y se comunican en espa?ol". Esto no ocurre, dice, si esos cursos se hacen en el extranjero, donde la mayor¨ªa de alumnos son de nacionalidades distintas y la ¨²nica v¨ªa para comunicarse entre ellos es la lengua com¨²n que est¨¦n estudiando. Esto no quiere decir que no se pueda aprender un idioma en Espa?a, seg¨²n el experto, pero asegura que para "pasar del eterno nivel intermedio es imprescindible vivir en la cultura que hable ese idioma".
Carl Davies, arque¨®logo de nacionalidad inglesa y residente en Espa?a, ten¨ªa ese nivel medio de espa?ol gracias a sus estudios en el instituto. Pero reconoce que su castellano lo ha aprendido en sus cuatro a?os aqu¨ª. "La diferencia es el lenguaje de la calle", dice, "el verbo que nos ense?aban para lo que vosotros entend¨¦is por molestar era fastidiar, que casi no se usa". Algo parecido le pas¨® a Nieves Ramos, licenciada en Traducci¨®n e Interpretaci¨®n, durante el a?o que vivi¨® en Alemania con una beca Erasmus. En clase hab¨ªa aprendido que ¨¹berqueren significa "cruzar la calle" y era la palabra que utilizaba aunque los alemanes no la usan habitualmente. "Un d¨ªa andando con una amiga me sali¨® dr¨¹ber gehen sin pensarlo ni nada, que es el t¨¦rmino que ellos dicen", recuerda. "Para que te pase esto, tienes que estar all¨ª escuchando a gente decir dr¨¹ber gehen una y otra vez".
El aprendizaje es menor si al salir de clase solo se habla espa?ol
El nivel de dominio de un idioma, qu¨¦ se considera saber otra lengua, es dif¨ªcil de definir. El marco com¨²n europeo de referencia divide en seis los grados de conocimiento de un idioma, que se acreditan con un examen. Este baremo distingue entre usuario b¨¢sico, independiente y competente, con dos subniveles cada categor¨ªa (A1-A2-B1-B2-C1-C2). Xavier Ballesteros, director de marketing de la School of Languages (ESOL) de la Universidad de Cambridge en Espa?a, sostiene que establecer lo que significa "saber un idioma" depende de "para qu¨¦ se quiere usar". Pero apunta que un nivel B1 ser¨ªa "operativo". Esto es: comprender los puntos principales de un escrito sobre cuestiones conocidas, desenvolverse en la mayor parte de las situaciones durante un viaje y poder producir textos sencillos y coherentes sobre temas familiares.
Los expertos coinciden en que "es posible aprender" idiomas sin viajar. "En Espa?a hay excelentes profesionales", recalca m¨¢s de uno. La diferencia de opiniones surge cuando se trata de establecer si es m¨¢s efectivo, como afirm¨® Wert, estudiar en casa. Cristina Naupert, profesora de alem¨¢n en la Universidad Complutense, lo tiene claro: "Si quieres dominar un idioma es mejor vivir en el pa¨ªs donde se habla. Ir a trabajar o estudiar, pero comunicarte en la vida real". Ballesteros, de Cambridge ESOL, cree que se puede dominar un idioma sin necesidad de viajar, pero con esfuerzo. Un criterio intermedio es el de Julio Larr¨², profesor de ingl¨¦s (recientemente jubilado) con 46 a?os de experiencia en la Escuela Oficial de Idiomas, que afirma que se puede alcanzar un nivel "bastante bueno si se empieza desde peque?o", pero considera que la pr¨¢ctica en otro pa¨ªs es necesaria para "soltarse".
El ministro Wert cree m¨¢s eficaces los cursos que las estancias fuera
Alba Mart¨ªn, estudiante de Derecho y Pol¨ªticas en la Universidad Aut¨®noma, no cree que le haga falta vivir en Estados Unidos para perfeccionar su ingl¨¦s, que considera "consolidado". Tiene un nivel certificado C2 (el m¨¢s cercano al biling¨¹ismo) y su estancia m¨¢s larga en el extranjero ha sido unos d¨ªas de vacaciones en Londres. Pero no lo ha conseguido sin esfuerzo y una inversi¨®n econ¨®mica que no est¨¢ al alcance de todos: ha tomado clases semanales con un profesor particular desde los tres a?os. Ahora mantiene su ingl¨¦s con una cita mensual, leyendo y viendo pel¨ªculas en versi¨®n original. Estudi¨® en el Colegio Alem¨¢n, donde asegura que el m¨¦todo para aprender idiomas es m¨¢s eficaz que en el sistema educativo espa?ol, que "se centra en la gram¨¢tica y el nivel es m¨¢s bajo".
Noem¨ª M., periodista, ha elegido una opci¨®n "asequible" para estudiar ingl¨¦s. Este a?o ha empezado el tercer curso en la Escuela Oficial de Idiomas (OIE). Aunque reconoce que recibe "una ense?anza muy correcta y bastante completa", cree que lo mejor para "desenvolverse" es viajar. "En la EOI aprendes lo acad¨¦mico: hablar ya es otra cosa...", comenta. "Sin pr¨¢ctica continua, el ingl¨¦s no se aprende".
El aprendizaje de idiomas es un "objetivo fundamental en la formaci¨®n integral del alumnado", seg¨²n indica el Ministerio de Educaci¨®n en la convocatoria de las becas de estudios ling¨¹¨ªsticos. Pero no est¨¢ al alcance de numerosas familias sufragar el coste de las clases, los viajes y los programas en el extranjero. Por eso se establecen ayudas econ¨®micas, que este a?o llegar¨¢n a menos estudiantes. El presupuesto para estudiar ingl¨¦s, franc¨¦s o alem¨¢n en verano se ha reducido a la mitad respecto al a?o pasado (de 51 millones de euros a 24,5). La dotaci¨®n m¨¢s importante (20 millones) es para universitarios que quieran realizar esta formaci¨®n en el extranjero. Modalidad que desaparecer¨¢ en 2013.
"Llegamos a una situaci¨®n en la que solo se ir¨¢n chicos de familias que puedan pagarlo", comenta Naupert, profesora de alem¨¢n. Esta situaci¨®n ya ocurre con las becas Erasmus, conocidas como las "de los padres", porque son los que completan la dotaci¨®n de 105 euros al mes que aporta la Comisi¨®n Europea, m¨¢s una cantidad subvencionada por el Ministerio de Educaci¨®n ¡ª172 euros mensuales en 2011¡ª y otra que pone la universidad y que var¨ªa seg¨²n el centro. Andrea Castell¨® pas¨® medio a?o en Hungr¨ªa con los 390 euros al mes de su beca. "Me pod¨ªa apa?ar porque es m¨¢s barato, el piso me costaba 60 euros", dice. Para ella fue "fundamental" vivir fuera para aprender h¨²ngaro, idioma que nunca hab¨ªa estudiado. "Ahora puedo mantener una conversaci¨®n perfectamente de cualquier tema".
Pero viajar no es una receta m¨¢gica. Tambi¨¦n requiere esfuerzo. No vale solo con estar. "Es necesario que la persona se integre totalmente en la cultura del idioma. Cuanto m¨¢s lo haga, mayor profundizaci¨®n idiom¨¢tica alcanzar¨¢ el estudiante", dice el profesor De Lorenzo. As¨ª lo cree tambi¨¦n Mar¨ªa del Rosario Coronado, auxiliar de conversaci¨®n en un instituto en Francia, pa¨ªs donde curs¨® su ¨²ltimo a?o de carrera con una beca Erasmus. "Un idioma no es solo un sistema de signos, letras y palabras ordenadas, es el reflejo de una forma de pensar, entender la vida y comportarse en el mundo. Un idioma forma parte de ese todo, y es preciso conocerlo para entender por qu¨¦ expresamos algo de una determinada manera y no de otra". Vivir en otro pa¨ªs es adem¨¢s una experiencia de vida que no viene en los libros, comentan los estudiantes que lo han experimentado.
En la pr¨¢ctica, saber idiomas, es ¨²til para viajar y buscar trabajo. Un 27,5% de las ofertas de empleo de 2011 requer¨ªan el conocimiento de otra lengua, seg¨²n un estudio de la empresa de recursos humanos Adecco. De ellas, la mayor¨ªa (72%) solicitaba candidatos con dominio de ingl¨¦s. Para Nieves Ramos, licenciada en Traducci¨®n e Interpretaci¨®n, fue fundamental saber idiomas para conseguir su puesto. Trabaja en Escocia en el servicio de atenci¨®n al cliente de una empresa de venta de productos por Internet al Reino Unido, Alemania y Espa?a. "No podr¨ªa desempe?ar esta labor si no hubiera vivido dos a?os en Alemania".
Las empresas demandan cada vez m¨¢s trabajadores multiling¨¹es. Seg¨²n Nuria Rius, directora de Servicios de Adecco, no dan m¨¢s importancia a un t¨ªtulo que a una estancia en el extranjero para escoger un candidato u otro. "Un certificado es una prueba objetiva de que la persona tiene un determinado nivel, pero eso no significa que otra pueda tener un ingl¨¦s m¨¢s fluido", observa Rius. Lo esencial es que tenga el nivel que demanda la empresa, independientemente de si lo ha aprendido en una academia o durante un viaje de estudios.
Los niveles de idiomas en la UE
Usuario b¨¢sico.
Usuario independiente.
Usuario competente.
A1. Comprende y utiliza expresiones sencillas para satisfacer necesidades inmediatas.
A2. Entiende frases cotidianas sobre cuestiones conocidas (familia, compras, ocupaciones, lugares)
B1. Conversaci¨®n: sabe desenvolverse en la mayor parte de situaciones durante un viaje. Lectura: comprende textos en lenguaje est¨¢ndar si son cuestiones conocidas. Redacci¨®n: puede producir escritos coherentes de temas familiares.
B2. Conversaci¨®n: puede relacionarse con nativos en un grado suficiente de fluidez. Lectura: entiende las ideas principales de textos complejos tanto de temas concretos como abstractos. Redacci¨®n: es capaz de defender puntos de vista de temas generales en un escrito.
C1. Conversaci¨®n: sabe expresarse de manera fluida y espont¨¢nea sin muestras de esfuerzo. Puede hacer un uso flexible del idioma para fines sociales, acad¨¦micos y profesionales. Lectura: puede reconocer los sentidos impl¨ªcitos en textos con cierto nivel de exigencia. Redacci¨®n: sabe escribir textos bien estructurados sobre temas de cierta complejidad.
C2. Es capaz de comprender con facilidad pr¨¢cticamente todo lo que oye y lee. Sabe reconstruir la informaci¨®n y los argumentos de diferentes fuentes, ya sean orales o escritas. Puede expresarse espont¨¢neamente, con gran fluidez y gran precisi¨®n en los matices.
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