Buscamos a los l¨ªderes del futuro

Cuando los responsables de las escuelas de negocio y de la internacionalizaci¨®n de las universidades responden por qu¨¦ es una buena idea para un alumno latinoamericano estudiar en Espa?a dan una lista larga: es una puerta para conocer Europa en su mismo idioma; tienen oportunidades de formaci¨®n que est¨¢n muy bien reconocidas en algunos de sus pa¨ªses; cualquier empresa valora una experiencia intercontinental; tendr¨¢n oportunidad de relacionarse con las centrales de empresas que tienen un importante papel all¨ª. Pero paralelo a este discurso, todos reconocen que la lista es igual o mayor para los propios centros. Buscan internacionalizaci¨®n, captar talento, el contacto de muchos de los que pasar¨¢n a ser l¨ªderes en un continente en plena expansi¨®n, un intercambio cultural del que tambi¨¦n se aprovechan los estudiantes locales.

La b¨²squeda de talento es un camino bidireccional, de ida y vuelta. Hay tres ¨¢reas que son especialmente fecundas en el flujo internacional de estudiantes con respecto a Espa?a, seg¨²n explica Alfonso Jim¨¦nez, socio director de PeopleMatters y l¨ªder del proyecto Recruiting Erasmus, que trabaja poniendo en valor la experiencia internacional de los estudiantes ante las empresas. Son aquellas en las que Espa?a destaca en t¨¦rminos educativos superiores: los estudios t¨¦cnicos de ingenier¨ªa, las ciencias de la salud y las escuelas de negocio. ¡±Llama especialmente la atenci¨®n esto ¨²ltimo. Tener tres escuelas de negocio entre las mejores del mundo no nos corresponde ni por tama?o ni por potencia econ¨®mica. Como ejemplos, el Reino Unido tiene una, igual que Francia; Alemania ninguna¡±, resalta Jim¨¦nez.

Y si estos pueden ser atractivos para los estudiantes, Jim¨¦nez explica tambi¨¦n los del camino inverso. ¡°Las universidades tienen cada d¨ªa menos estudiantes por la ca¨ªda de natalidad y lo cubren con latinoamericanos que no tienen problema de idioma. Los centros cada vez hacen m¨¢s campa?as en el continente porque para ellos es muy importante la participaci¨®n de sus alumnos.

Es un colectivo muy atractivo para las empresas que se est¨¢n internacionalizando y necesitan buenos conocedores de la realidad en destino. Muchas compa?¨ªas reclutan a esos estudiantes para mandarlos de vuelta tras el periodo de aprendizaje. Son gente local que ha vivido unos meses en la sede central espa?ola, ha adquirido cultura corporativa, conocimientos, estrategia y puede desarrollarlos mejor que un espa?ol en sus respectivos pa¨ªses¡±.

¡°El valor de la atracci¨®n de talento es clave con una visi¨®n de futuro amplia¡±, argumenta Manuel Fern¨¢ndez Iglesias, vicerrector de Relaciones Internacionales de la Universidad de Vigo. ¡°Atrayendo a estudiantes punteros, lo l¨®gico es que cuando vuelvan a sus pa¨ªses de origen tengan cierto poder de decisi¨®n. La capacidad de impacto para llegar a acuerdos con esas sociedades ser¨¢ mejor. Si has recibido formaci¨®n en un pa¨ªs y haces bien las cosas, la visi¨®n ser¨¢ positiva.

La imagen de Espa?a podr¨¢ mejorar y no desde el rancio punto de vista de conquistadores, sino para colaborar en el enriquecimiento de las dos sociedades¡±, explica.

Los alumnos latinoamericanos en clases espa?olas retroalimentan tambi¨¦n a los propios estudiantes locales, facilita que tengan un mejor conocimiento de otra realidad y una visi¨®n internacional imprescindible en el mundo globalizado. ¡°Se logra un ambiente internacional sin salir de clase¡±, a?ade Fern¨¢ndez Iglesias.

Adem¨¢s, los estudiantes latinoamericanos en Espa?a aportan un extra, seg¨²n coinciden la mayor¨ªa de los consultados: una ilusi¨®n, una alegr¨ªa, unas ganas de participar y una capacidad de trabajo que es m¨¢s infrecuente entre los espa?oles. Arturo de las Heras, director general del Centro de Estudios Financieros (CEF), asegura que para muchos de los estudiantes ir a Espa?a supone un gran esfuerzo econ¨®mico. ¡°Eso se nota con respecto a otros, van entusiasmados y con ganas, como esponjas, con ganas de aprender de todo, de apuntarse a todo y de disfrutar al m¨¢ximo de una realidad distinta. Esa actitud no ha variado con la situaci¨®n econ¨®mica, que empeora en Espa?a al tiempo que crece en Latinoam¨¦rica. Lo que s¨ª ha cambiado es lo que hacen despu¨¦s. Antes hab¨ªa much¨ªsima facilidad para emplearse aqu¨ª, un mercado laboral muy activo y ten¨ªan muy f¨¢cil entrar a hacer pr¨¢cticas en empresas, encadenar un contrato y conseguir su permiso de residencia. En la actualidad esto no se produce. Ahora vuelven, los pa¨ªses latinoamericanos est¨¢n creciendo y tienen carest¨ªa de gente de nivel alto¡±, a?ade.

C¨¦sar Beltr¨¢n, director de IESE Brasil, matiza que la intenci¨®n ¨²ltima de la mayor¨ªa de los alumnos suele ser volver a sus pa¨ªses, pero que el destino no es algo importante a la hora de la formaci¨®n. ¡°Estos chicos que hacen un programa, sobre todo los MBA, son ciudadanos del mundo. Vuelven a sus pa¨ªses, s¨ª, o van a trabajar a Londres, Suiza o Singapur. Lo que conseguimos y el objetivo que ellos tienen es esa globalidad, la capacidad de ir a otros mercados¡±. Resalta tambi¨¦n la gran demanda de profesionales preparados que existe en Latinoam¨¦rica y pone un ejemplo: los sueldos de ejecutivos m¨¢s altos del mundo est¨¢n ahora en S?o Paulo. Pero tambi¨¦n hay grandes demandas en Per¨², Colombia, Brasil, M¨¦xico.

Para seleccionar a personas que lleguen a cumplir el perfil que requieren las empresas, ¡°el conocimiento del ingl¨¦s se presupone¡±, seg¨²n Beltr¨¢n. ¡°M¨¢s all¨¢ del curr¨ªculo previo, lo que buscan en ellos es que tengan las aptitudes para ser grandes directores de personas, motivadores, ilusionadores de la gente, capaces de generar valor, con ideales, de mejorar¡±, concluye.