¡°Me gusta el ambiente familiar del f¨²tbol aqu¨ª¡±

Los embajadores ¨¢rabes en Madrid tienen por costumbre ir al aeropuerto de Barajas a recibir a cada nuevo hom¨®logo enviado de la regi¨®n. Un detalle que la embajadora de Emiratos ?rabes Unidos, Hissa al Otaiba, agradeci¨® al llegar, en 2008. Es una peque?a tradici¨®n de la que ahora participa y que solo hab¨ªa visto antes en Brasil. All¨ª aprendi¨® un portugu¨¦s que seguro le ha ayudado con el castellano, que practica con entusiasmo y quiere expandir en su patria. De entrada, ofrece caf¨¦ ¨¢rabe, suave, en tacita sin asas, y d¨¢tiles.

La se?ora Al Otaiba pronto menciona el f¨²tbol como ejemplo del mimo que hay en Espa?a por la familia y por los ni?os. ¡°Si voy a un partido, veo que van con la esposa, con los ni?os, a veces con la abuela. Es todo muy respetuoso, van a animar, a divertirse¡±. La embajadora, doctorada en Empresariales, madre de dos hijas y de cuatro hijos, simp¨¢tica, ten¨ªa previsto ver la final de la Eurocopa en Madrid, acompa?ada del embajador de Emiratos en Italia, que ven¨ªa de Roma: su marido.

Tras muchos a?os de embajadora consorte (en Suiza, Brasil, Francia o Nueva York), se convirti¨® en la primera emirat¨ª al frente de una Embajada. ¡°Es m¨¢s responsabilidad y es un honor¡±. Destaca de estos a?os en Madrid logros variopintos, que, precisa, no son personales, sino de su equipo: vuelos diarios de Dubai a Espa?a, el proyecto conjunto Gemasolar, la primera planta del mundo que genera energ¨ªa solar sin sol, ubicada en Sevilla ¡ª¡°los espa?oles sois los primeros en energ¨ªas renovables¡±, insiste¡ª y que inauguraron el Rey y el pr¨ªncipe heredero de Abu Dabi; varias semanas culturales...

Asegura que su pa¨ªs (un mill¨®n de nacionales y cuatro millones de extranjeros) est¨¢ ahora muy centrado en Espa?a. ¡°Nuestro ministro de Exteriores lo dijo: ¡®Sabemos que hay crisis en Espa?a, la hay en todo el mundo, y estamos muy muy dispuestos a apoyar y a trabajar con los espa?oles para ayudar a los dos pa¨ªses, aqu¨ª o all¨¢¡±. Aunque aqu¨ª no vive ning¨²n compatriota suyo ¡ª¡°vienen empresarios, sobre todo a Barcelona, y turistas... a veces a un Real Madrid-Barcelona, incluso en el d¨ªa, les encanta el f¨²tbol en mi pa¨ªs¡±¡ª, en Dubai y los otros seis emiratos ¡°viven unos 3.000 espa?oles y hay unas 120 empresas espa?olas¡±.

Se le nota m¨¢s a gusto hablando de la presencia femenina en la vida p¨²blica de su pa¨ªs (¡°el 20% de los parlamentarios son mujeres, hay cuatro ministras y tres embajadoras¡±) que de la primavera ¨¢rabe.

Fiel a la costumbre ¨¢rabe, al cabo de un rato ofrece zumo, agua fresca y m¨¢s d¨¢tiles en su despacho de la reci¨¦n estrenada Embajada, donde un enorme televisor emite im¨¢genes desde La Meca. Al Otaiba es tambi¨¦n la representante ante el Vaticano y Andorra, precisamente dos Estados encabezados por autoridades religiosas, como recuerda. Cuenta orgullosa que su encuentro con el Papa, ¡°que iba a ser de cinco minutos, acab¨® durando 20¡±. Fue otro hito, pues nunca antes hubo representante ante el Vaticano de este pa¨ªs, que autoriza la construcci¨®n de iglesias cristianas en su territorio.

No muestra ninguna prisa, s¨ª curiosidad cuando pregunta que por qu¨¦ se llama gatos a los madrile?os o pide detalles sobre c¨®mo cocinar el pescado a la sal.